Lo ha hecho a través de un largo post en Facebook, aunque como ella misma cuenta ya intentó hacerlo público en 2015 en alguna entrevista. Empezó a salir con Ramirez con 18 años, "sin experiencia en relaciones saludables", y la historia se desarrolló de una forma que por desgracia podemos reconocer: de los celos y el control iniciales Ramirez pasó progresivamente a la violencia psicológica, a atacar sus inseguridades, y más tarde a la violencia física continuada. En concreto detalla no solo palizas sino una violación violenta en el apartamento de un amigo donde ella se estaba quedando.
Es uno de los tantos testimonios, tal y como contábamos, que están saliendo a la luz estos días. En el caso de Addams el silencio no ha venido solo por el miedo habitual a hablar de algo así dentro del marco de la cultura de la violación, sino que el sello en el que estaba por aquel entonces -por cronología, Risk Records- recomendó no hacerlo público. La razón: las posibilidades de que tanto ella como su grupo fueran boicoteados por promotores, programadores de radio y otras bandas y que la maquinaria legal de Marilyn Manson acabara con ellas.
Ramirez ha sido bajista de Marily Manson durante casi dos décadas y lo sigue siendo hoy en día, al menos de momento. Manson ha declarado que "sabía que Jessicka y Jeordie [nombre real de Twiggy Ramirez] habían tenido una relación romántica hace años y consideraba y todavía considero a Jessicka como una amiga. No sabía nada de estas alegaciones hasta hace muy poco y estoy entristecido por la evidente angustia de Jessicka".
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