Jorge Azcón, portavoz adjunto del PP en el ayuntamiento de Zaragoza, ha sido el último en abrir un tema ya recurrente a lo largo de los últimos años: la censura a un grupo en base a un supuesto enaltecimiento al terrorismo (de ETA). En este caso son Berri Txarrak la diana del PP y la AVT, quienes han denunciado al grupo por sus letras y han pedido que el ayuntamiento se desmarque y prohíba la presencia del grupo en el macroconcierto del 25 de septiembre, organizado por una plataforma para mostrar el rechazo a las maniobras de la OTAN en Zaragoza.
Además, Azcón ha llegado a considerar que debería declararse al trío "personas non gratas" por parte del Ayuntamiento, y ha exigido abrir una investigación acerca de la plataforma y los miembros que la componen. En este caso, a la habitual persecución del PP y la AVT sobre grupos "sospechosos" de no comulgar con la versión oficial, se suma una fácil lectura como maniobra política: teniendo en cuenta que el actual alcalde de Zaragoza es Pedro Santisteve, de Zaragoza en Común, no es díficil ver en estas declaraciones un intento de pintar al alcalde de "proetarra" de cara a la opinión pública, en el que a Berri Txarrak les ha tocado el papel de víctimas colaterales.
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