Como mitad de Mobb Deep, junto a Havoc, fue uno de los responsables de definir el sonido de la Costa Este de los 90, y por ende ha permanecido como una influencia fundamental de ahí en adelante para todos los que se adentran en el género. Ese rap crudo y oscuro y esa forma de desarrollar historias se siguen escuchando en muchos discos y la escena estatal no se libra de ello. Puede que no se les vea en tantas camisetas como a Notorious B.I.G., que el peso de "Illmatic" (Columbia, 94) de Nas haya ensombrecido el rol de clásico de "The Infamous" (Loud, 95), que Big L sea considerado más de culto... sin ellos esa edad dorada del hip hop hubiera brillado mucho menos.
Hace tres años habían consumado su reunión con el álbum "The Infamous Mobb Deep" (Infamous Records) y habían vuelto a subirse a los escenarios, la última vez hace cuatro días en Las Vegas. Prodigy también había lanzado este mismo año, en solitario, "The Hegelian Dialectic" (Infamous Records). Se le echara de menos, pero su escuela sigue latiendo. Sirva de homenaje el que probablemente fuera su mayor himno, "Shook Ones (Part II)".
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