Hoy se ha dado a conocer en los principales medios internacionales el fallecimiento del mismísimo Ennio Morricone, uno de los grandes compositores de bandas sonoras de la historia. Las informaciones apuntan a que su muerte fue la semana pasada, aunque no se ha dado a conocer oficialmente hasta esta misma mañana.
Según The Hollywood Reporter, Morricone habría muerto a causa de las complicaciones generadas a causa de una caída en la que se rompió el fémur y sufrió diversos golpes.
A lo largo de su vida, Morricone compuso más de quinientas bandas sonoras, aunque pese a su legendario nombre y la larga lista de trabajos imprescindibles, tuvo que esperar hasta 2015 para recibir el Óscar por el soundtrack de "Los odiosos ocho" de Quentin Tarantino. Eso sí, en 2006 se le concedió un Óscar honorífico por toda su carrera. Estuvo nominado con anterioridad por las bandas sonoras de "Días del cielo" (Terrence Malick, 78), "La misión" (Roland Joffé, 86), "Los intocables de Eliott Ness" (Brian De Palma, 87), "Bugsy" (Barry Levinson, 91) y "Malena" (Giuseppe Tornatore, 00).
Morricone fue además uno de los compositores que más ha influido a artistas de todo tipo, gracias a que su trabajo se ha asociado a lo largo de distintas etapas de su vida con el spaguetti western, con el cine de mafiosos, etcétera. Muchos han sido los artistas provenientes del mundo del pop y del rock que le han rendido homenaje a lo largo de los años, entre ellos Metallica, que han abierto sus conciertos con el tema "The Ecstasy Of Gold" de "El bueno, el feo y el malo" desde 1983, o Mike Patton, quien llegó a publicar en Ipecac un doble disco de rarezas de Morricone.
Suyas son las increíbles bandas sonoras de los westerns italianos "Por un puñado de dólares" (64), "La muerte tenía un precio" (65), "El bueno, el feo y el malo" (66) y "Hasta que llegó su hora" (68), todas ellas obras maestras del género dirigidas por Sergio Leone.
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