Después de la polémica por los abusos sexuales que supuestamente cometió Till Lindemann (Rammastein), la Fiscalía de Berlín ha anunciado recientemente que no seguirá investigando el caso por falta de pruebas, archivándolo. Todo se originó en mayo de este año cuando varias mujeres afirmaron haber sido sometidas a abusos sexuales bajo el efecto de las drogas. La noticia ha llegado de improvisto causando reacciones diversas.
La ausencia de testimonios presentados directamente ante las autoridades ha propiciado la decisión que libra al vocalista y líder de la banda de rock alemana de los cargos que lo acusaban. Las presuntas víctimas denunciaron de manera anónima pero a través de los medios de comunicación, sin pasar por la justicia o policía alemanas. Ni siquiera las declaraciones de la youtuber Kyla Shyx se han valorado como concretas.
Tras archivarse el caso, tanto el cantante como su equipo legal han reafirmado su posición con una actitud desafiante asegurando que tomarán medidas legales contra las fake news, sobre todo contra las falsas narrativas en redes sociales. En definitiva, el mal trago se lo llevan las víctimas de casos similares a las que muchos recuerdan la importancia de presentar denuncia ante los organismos correspondientes.
Sobre este caso informamos previamente cuando el batería de Rammstein, Christoph Schneider, compartió un comunicado.
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