Lapido dirige el Laboratorio Autor de SGAE en Granada

Siete músicos encerrados durante siete días. Cobayas musicales por una semana. En el buen sentido, porque los lujosos salones y la paz de los jardines del complejo rural La Marquesa, en el Hotel Darabenaz de Granada, favorecen el objetivo del retiro creativo dispuesto por Fundación SGAE en la denominada ‘Semana de Autor’. El resultado de la experiencia se podrá disfrutar esta noche en un concierto de entrada libre en la sala la Expositiva de Granada (21 horas).

Los artistas, de características dispares, han sido seleccionados entre 151 propuestas por un comité en el que se encuentra José Ignacio Lapido, tutor de la estancia andaluza. ¿Los agraciados? Ricardo Vicente (Tachenko, La Costa Brava, Francisco Nixon), los cantautores Juan Trova, Antonio Álvarez (Picolissima Jug Band, La Taberna del Piano), el canario Alberto Cañete, Inma Claudio y la cubana Jamila Castillo. Para Lapido, que prepara la vuelta a los escenarios de 091, lo más jugoso de esta iniciativa es “la posibilidad de ver crecer, con el plus añadido de estar hechas por dos autores que no se conocían. Es como contemplar la fase de desarrollo de un hijo”. El veterano del rock granadino rechaza el rol de ‘profe’: “Mi labor aquí es sugerir. Hay libertad absoluta y ánimo a la creación. Todos ellos guardan un amor incondicional a la música y a la profesión”, explica. “Yo soy un autor que tarda meses en acabar un tema. El reto aquí es conseguirlo en una semana y con interacción entre los artistas. Es difícil, pero muy satisfactorio. Es un reto, un estímulo, porque son autores de calidad”, señala.

“Yo soy un autor que tarda meses en acabar un tema. El reto aquí es conseguirlo en una semana"

Granada es uno de los vértices del triángulo de laboratorios musicales previstos por la SGAE, que completan La Habana y Madrid. La inercia de trabajo se ha desarrollado por parejas, con el riesgo obligado de ver las canciones desde la perspectiva del otro. Tal ha sido el caso de Inma Claudio, que después de grabar en México, ha pergeñado “cuatro o cinco temas” al lado de Juan Trova, otro perro viejo del oficio. Por su parte, la cantante habanera, curtida en el bolero y el filin, ha dado forma con el tinerfeño Cañete a ‘La copla de José Luis’, dedicada al dueño de la sala Secadero, que fue sentenciado a dos años y medio de cárcel y multado por programar música en directo, circunstancia que movilizó al gremio, incluido Javier Krahe. “La persecución a la música en vivo está acabando con el semillero de la cultura musical”, comenta Jamila.

"Te pones a escribir las canciones y es como en el local de ensayo, solo que mucho más lindo"

Otro que se lleva un saco de composiciones se su estancia en La Marquesa es Antonio Álvarez, que considera “un lujo” que le permitan dedicarse una semana a su actividad preferida. Según el cantautor almeriense, “Lapido nos ha aportado matices sutiles”. A su lado, el único indie de la tropa, Ricardo Vicente, que acaba de publicar “Hotel Florida” a través de BCore. “Mi principal hándicap, más que la disparidad de géneros, era mi hermetismo. Pero tanto Antonio como yo hemos mamado la tradición de la música popular norteamericana y británica y su adaptación al español. Lo más extraño es verme de repente viviendo en este caserón, aunque al final las canciones son las canciones. Te pones a escribirlas y es como en el local de ensayo, solo que mucho más lindo. Trabajar con Lapido ha sido sencillo, como apostar a caballo ganador”, reflexiona Vicente, entre recuerdos de sus lejanos conciertos en la extinta Sugarpop con La Costa Brava y una visita exprés a su amigos de Discos Bora Bora.