El 30 y 31 de agosto, Feist teloneó los primeros conciertos de Arcade Fire en Dublin y donó todas las ganancias del merchandising a una organización dedicada a la lucha contra la violencia de género. Algo que a priori habría de repetirse a lo largo de la gira del grupo canadiense por Europa durante el mes de septiembre, pero que Feist ha atajado de raíz con un comunicado en el que explica sus motivos para marcharse.
Feist aborda la cuestión de las acusaciones por conducta sexual inapropiada vertidas contra el líder de Arcade Fire, Win Butler. Explica que ella estaba ya en Dublín cuando se enteró de la noticia de que cuatro personas le acusan de haber incurrido en conducta sexual inapropiada derivada de dinámicas de abuso de poder. Feist agradeció a las personas que empatizaron con su dilema: "permanecer en la gira simbolizaría que estaba defendiendo o ignorando el daño causado por Win Butler y marcharme implicaría ser yo la juez y el jurado. [...] No puedo resolver eso renunciando, y no puedo resolverlo quedándome. Pero no puedo continuar".
“Lamentamos mucho ver a Leslie irse a casa, pero entendemos y respetamos completamente su decisión”, han respondido Arcade Fire en un comunicado oficial.
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