En este primer proyecto discográfico, el intérprete ha querido hacer una reflexión sobre el terreno artístico. En él se plantea el margen y la ausencia que se encuentran dentro del arte. Busca reivindicar a grandes artistas olvidados del panorama artístico español como Isidoro Valcárcel Medina, del que toma sus siglas para el título de la pieza. Recoge todo lo íntimo y lo personal y lo mezcla con referencias de cultura popular creando un trabajo que abarca distintas disciplinas y que vira sobre un mismo concepto temático.
En este EP ha decidido contar con tres colaboradores, uno por cada pista. En “55 rayuelas” le ayuda Timini’ Polo; en “La importancia de comer langosta” es Jorge Ramos quién completa el tema; y Diego Piqueras hace lo suyo en “Tamara”. Este es el primer proyecto discográfico que lanza Claudio Montana en forma de EP, pero el artista lleva desde 2014 haciendo música. Y, a parte de esta, bebe de otras artes como la pintura, la moda y el cine de los que coge inspiraciones para poder crear sus nuevas composiciones. Un creador al que no hay que perderle la pista.
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