Natalia Améstica –quien fuera manager del rapero– ha confesado ser la autora del asesinato de Tirone José González Orama, más conocido como Canserbero, rapero venezolano de gran éxito internacional que fue hallado muerto en 2015 en extrañas circunstancia en una urbanización en Maracay.
En su momento se habló de que Canserbero sufría de esquizofrenia y depresión, y que en plena crisis psicótica mató a otro músico y esposo de Natalia Améstica, Carlos Daniel Molnar González, para posteriormente suicidarse lanzándose por la ventana del edificio. Según las informaciones, Natalia Améstica había sido testigo de los hechos. Pero todo ha cambiado al confesar la ex-mánager que ella fue la responsable de la muerte de ambos artistas y que posteriormente manipuló la escena del crimen con ayuda de su hermano, Guillermo Améstica.
Todo ha salido a la luz después de que el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, reabriese la investigación por considerar que había muchas lagunas en el caso. Tras anunciar la exhumación del cadáver de Canserbero se iniciaron nuevas investigaciones que acorralaron a la mánager hasta conseguir que confesase haber matado a su marido y al rapero por asuntos económicos.
En la letra de "Jeremías 17:5", una de las canciones de "Muerte” (12), Canserbero cantaba aquello de "El más traidor puede que lo tengas de frente/Bebiendo tus frías, o compartiendo tu cena caliente/Ojalá se ahoguen los que siempre mienten/Y una vez en el infierno, que se quemen para siempre/Nunca había pensado que tu socio puede ser un sucio/Que por un negocio te puede dar chuzo". Y nunca una canción podía hablarnos tanto sobre lo que iba a suceder a continuación.
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