"No quiero convertirme en una banda tributo de mí mismo"

Manuel Gagneux y sus Zeal & Ardor vuelven a nuestro país este mes de marzo para desplegar su maquinaria de blues, black metal e incluso gospel en Madrid y Barcelona.

(Puedes consultar las fechas de los conciertos al final de esta entrevista)

Manuel Gagneux es el líder de la banda Zeal & Ardor y artista detrás del proyecto de pop experimental Birdmask. Nacido en 1989 en Suiza en el seno de una familia afroamericana por parte materna y suiza por parte paterna en la que la música siempre estuvo presente, el músico de treinta y cinco años creó su ya reconocido proyecto de metal extremo fusionado con soul, gospel o blues casi de casualidad mientras interactuaba con la complicada comunidad de 4chan. Más de una década después de darle forma a Zeal & Ardor, el suizo-americano se ha ganado un renombre importante dentro de la música vanguardista y del metal gracias tanto a sus cuatro discos de estudio como a su actividad (ha estado tocando en más de una treintena de países, incluyendo a España –Primavera Sound, AMFest o Mad Cool son algunos de los lugares en los que ha aterrizado–, y en festivales como Hellfest, Reading, ArcTanGent o Graspop).

Aunque Zeal & Ardor ya es un proyecto bastante conocido, y probablemente te lo hayan preguntado mil veces… ¿Es cierto que comenzó casi por accidente en un hilo de 4chan en el que te desafiaron a mezclar distintos estilos musicales?
(Manuel Gagneux) Sí.

¿Qué puedes contarnos sobre el Manuel antes de Zeal & Ardor? Tus primeras influencias, tu infancia, tu desarrollo personal y musical, cómo empezaste a tocar…
Siempre me encantó la música en general. Toqué en muchas bandas, tanto de metal como de otros estilos. Siempre me ha fascinado la capacidad emocional del sonido, ya fuese Portishead o Tom Waits. Desde el serialismo hasta los pulsos binaurales. Todo me parecía magia.

"Creo que ceder a las expectativas es como un veneno creativo"

Tu debut homónimo fue en realidad un proyecto digital autoeditado lanzado en 2014, antes de “Devil Is Fine”. Después de "Strange Fruit", lanzaste otro álbum homónimo en 2022 bajo MVKA, el mismo sello con el que has trabajado con tu otro proyecto, Birdmask. ¿Cómo ordenarías tu música considerando todo esto?
No la organizo en absoluto. Para mí es muy importante no quedarme en lo que ya está creado, sino buscar cosas nuevas e interesantes en las que trabajar. Además, independientemente de cómo lo ordene, los oyentes tendrán sus propias ideas sobre cómo debería ser, y eso también es maravilloso.

Hace unos meses lanzaste “Greif”, un álbum que parece construirse sobre las bases de tu trabajo anterior pero explorando sonidos algo más vanguardistas y experimentales, alejándose más del metal. ¿Fue algo intencionado?¿Buscas activamente nuevos sonidos o fue algo más orgánico?
Como te comentaba, para mí es importante no repetir lo ya explorado. No quiero convertirme en una banda tributo de mí mismo. Pero la verdad es que sí que fue proceso muy orgánico.

Aunque este es tu primer álbum con la banda completa (Marc, Denis, Lukas y Marco) en el estudio, sigue sintiéndose como algo muy personal. ¿Qué han aportado ellos al disco?¿De quién fue esta idea de meteros todos en el estudio juntos por primera vez?
El disco lo escribí yo entero, pero aun confiando tantísimo en ellos después de todo este tiempo juntos lo personal todavía brilla. Insistí en que esta vez participasen todos ellos en la grabación de “Greif”, porque estas personas le han dado siete años de sus vidas a mi absurdo proyecto. Ya era hora de que formasen parte de la esencia del disco.

Las letras de “Greif” parecen más ambiguas y filosóficas en comparación con tus discos anteriores. ¿Tu proceso compositivo sigue involucrando una crítica social a pesar de esto? ¿O has dado un giro hacia algo más introspectivo?
No he dejado de lado los comentarios sociales, es solo que ahora mismo todo lo que yo podría decir ya se ha dicho o se dice en las redes sociales. Ahora ya no sería como una experiencia para evadirse. Las letras de “Greif” realmente salieron de forma natural en el momento de escribirlas.

Se me olvidó preguntártelo antes, pero… ¿Qué significa exactamente “Greif”? ¿Es un juego de palabras con "grief" (dolor) o una referencia a un grifo mitológico?
El Greif es una criatura mítica importante en nuestra ciudad natal [en Basilea, la gente se disfraza de grifo –Vogel Gryff– en uno de sus festivos nacionales]. Es algo que a toda la banda nos conecta con la infancia. También es una mezcla de muchas cosas diferentes, como nosotros.

Hablando con otras personas sobre tu trabajo y reflexionando un poco, coincidimos en que “Greif” parece un álbum de transición o evolución comparado con el resto. Quizá es porque como oyentes o fans tendemos a hacer comparaciones con lo anterior, o a veces con otros artistas en vez de disfrutar de la música y ya. Tengo curiosidad por saber qué opinas de eso.
Creo que ceder a las expectativas es como un veneno creativo. La gente disfruta de nuestra música porque le sorprendió cuando comenzamos el proyecto, y eso es algo imposible de recrear otra vez si sigues unas expectativas.

Aunque puede que sea un poco pronto para preguntarlo, ¿tienes algún plan para lo que vendrá después de “Greif”? ¿Continuarás con la banda completa en el estudio o dejarás que las cosas evolucionen naturalmente?
Definitivamente volveré a tener a todos mis amigos en el estudio.

Ahora volvéis a tocar en España, concretamente en Madrid y Barcelona. Creo que la última vez que tocásteis aquí en salas fue en 2018. Aunque me han dicho que, en vuestros conciertos en Mad Cool o en Hellfest en 2022, estuvísteis brutales.
Esos festivales fueron increíbles también para nosotros. Tener la oportunidad de compartir nuestra música en directo con nuevos públicos es algo especial. Y nosotros tenemos muchas ganas de tocar en cualquier lugar en el que nos quieran.