"Intentamos mostrarnos cercanos a nuestros seguidores"
EntrevistasWilco

"Intentamos mostrarnos cercanos a nuestros seguidores"

Toni Castarnado — 02-10-2023
Fotografía — Archivo

Wilco han entrado como banda en una fase interesante: los de Chicago están cada vez más cerca de ser una leyenda en lo suyo. Y “Cousin” (dBpm/Sony, 23) es un pieza más para que eso ocurra más pronto que tarde.

El peso en la historia que tienen Wilco resulta ya a estas alturas indudable. Han escrito su propio camino y, en pleno 2023, ya no hay quien dude sobre el lugar que ocupan y la huella que han dejado con una discografía casi inmaculada, con decenas de canciones que hemos escuchado infinidad de veces en casa y con una buena lista de sólidos directos para el recuerdo. Seguramente eso es algo que los propios componentes del grupo ni se plantean. No tienen la necesidad. Lo suyo es componer canciones y grabar discos de los que se sientan orgullosos. Si Cruel Country fue el curioso e inesperado artefacto que lanzaron el año pasado, todavía por digerir, ahora vuelven con “Cousin”. Un disco más concreto, pero que mantiene su punto de riesgo. Nada que no hayamos escuchado antes en una fórmula sobradamente asimilada y aplaudida, similar a la transitada enYankee Hotel Foxtrot o A Ghost Is Born.

Este pasado verano, Wilco han estado girando de nuevo por nuestro país. Da la sensación de que, más allá de componer canciones y grabarlas, no han parado de tocar. Incluso así, el guitarrista Nels Cline tiene tiempo para atender a nuestra entrevista vía Zoom antes de su concierto en Dublín. Cline lleva ya diecinueve años en la banda. “Tras todo este tiempo juntos me siento parte de esta familia. Soy una de las seis piezas del engranaje. Lógicamente al principio me costó entender cómo funcionaban las cosas en el grupo, cuáles eran las dinámicas, incluso me costaba saber cuál era mi papel. Ahora todo es muy fácil. Las cosas fluyen con total naturalidad. A veces, con Jeff [Tweedy] solamente necesitamos una mirada para comunicarnos. Con eso nos basta”. Quienes seguimos a Wilco desde sus inicios tenemos esa sensación. Cuando les ves en directo es como tener enfrente a un grupo de amigos tocando juntos. “Nunca nos han dicho eso, pero compro tu teoría. Intentamos mostrarnos cercanos a nuestros seguidores y la culpa de que esto sea así la tienen las canciones. Son ellas las que crean esa familiaridad”. Frente a bandas con tantos años juntos, siempre me invade una curiosidad: ¿se aburren los músicos repitiendo cada noche sus canciones? “Por suerte, en nuestro caso tenemos mucho repertorio y podemos elegir. Es cierto que hay algunas más recurrentes, pero cada noche metemos material que hace tiempo que nos tocamos. Y las más conocidas, siendo el tipo de banda que somos, y sin considerarnos una jam band o gente que se pasa el concierto improvisando, sí las afrontamos de una manera distinta. Siempre encontramos un enfoque algo distinto, un detalle, algo que las haga de nuevo atractivas”.

Hablando de los directos, en el caso concreto de Nels Cline, un momento esperado en sus conciertos es el solo de “Impossible Germany”. Se crea una gran expectación similar al que se da con el pistoletazo de salida de una carrera de atletismo o el lanzamiento de un penalti en un partido importante. “Cada vez es un nuevo reto para mí [risas]. Y sí, sé que hay mucha gente esperando ese solo. Hay una especie de mística alrededor y yo, cuando llega, lo vivo con la intensidad y el rigor que merece. De hecho me siempre me ha sorprendido, porque no soy un guitarristda especializado en solos, ni la banda va por ahí, pero esa es la magia de la música, y también la de Wilco”.

En cuanto al que es su duodécimo disco, “Cousin”, se percibe que hay una gran expectación. El disco, dadas sus hechuras y circunstancias, va a dar que hablar. El inicio con la intrigante “Infinite Surprise”, la elegancia de “Evicted”, los sonidos más ásperos de “Sunlight Ends”, la belleza embriagadora de “Pittsburg” o “Mean To Be”, con toda esa electricidad camino de la exploración, esos sonidos sugerentes y el folk vanguardista. “Desde dentro es más difícil hacer cuentas sobre cómo funcionará un disco. Nosotros nos dedicamos a escribir canciones. Luego es Jeff, con la complicidad del resto, quien decide el formato. Por ejemplo, con ‘Cruel Country’ no empezamos con la idea de que fuese doble y tuviese ese aire más reposado. Y ahora pasa lo mismo. No diferenciamos unas sesiones de otras. Quizás algunas de estas nuevas canciones ya venían de cuando hicimos ‘Cruel Country’. No tenemos la sensación que este sea un disco que nos vaya a generar más cosas en comparación a otros. Eso sí, estamos ilusionados y expectantes”. Una gran novedad es el nombre de la productora. Wilco han elegido a Cate Le Bon. “Eso fue cosa de Jeff. Hace tiempo que tenía ganas de trabajar con ella. Cate nos ha aportado otros matices y una visión externa necesaria. Ella tenía claro con qué banda iba a trabajar y nosotros también, así que hubo en todo momento un clima en el que primó la confianza y sobre todo en el que nos escuchamos unos a otros”.

Aprovechando que en la exitosa serie de televisión “The Bear” suenan canciones de Wilco, le pregunto qué considera más duro: formar parte de una banda de rock’n’roll o trabajar en una cocina. “Sin duda la cocina. ¡El nivel de estrés es altísimo”, apunta entre risas y prosigue “Creo que es la única serie que he visto en los últimos dos o tres años. Me encantó la trama y ver lo bien que encajaban nuestras canciones. Pero te diré una cosa, al contrario que el resto de los chicos de la banda, yo nunca he vivido en Chicago, aunque según ellos está muy bien ambientada”.

;

Más allá de Wilco

Al margen de Wilco y desde hace décadas, Nels Cline graba por su cuenta discos con un aire jazzístico y experimental, algunos tan excelsos como los recientes “Currents, Constellations” (18) o “Share The Wealth” (20) para el sello Blue Note. De ahí que le pregunte por su opinión con respecto al nuevo jazz. “Estas nuevas escenas jazz en Londres o en Los Ángeles no las veo tan distintas a las que había, por ejemplo, en los setenta. Se fusiona de un modo similar y el sentimiento de comunidad también estaba presente entonces. Creo que lo que las diferencia es que ahora el matiz reside en que el hip hop y los sonidos urbanos son los que marcan el paso”.

En 2015 participó en Jazz In America, un proyecto maravilloso de un día que se puede ver en YouTube. “Gracias a mi disco ‘Lovers’ me propusieron tocar con una orquesta temas inspirados en la ciudad de Filadelfia. Fue un desafío y una gran responsabilidad, tanto elegir el repertorio como reproducirlo. Me encantaría volver a hacer algo así. Y celebro que te gustase tanto”.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.