“Este EP es mi deseo de romper con la dinámica actual de solo lanzar singles"

Con apenas veinte años, Tristán Rodríguez aka Tristan! parece estar bendecido con la intuición del experto. Eso es lo que se vislumbra en los relatos de emoción y desgarro en un mar de disonancias incómodas y punzantes que se esconden en “Music EP” (rusia-IDK, 24).

Tras unos años firmando música como TRISTÁN!, es ahora y de la mano de los seis temas de “Music EP” cuando este joven artista ha decidido pasar al siguiente nivel entregándonos una visión más sólida y personal de lo que estaba haciendo hasta el momento. “Los temas que ahora forman parte de ‘Music EP’ son el resultado de una evolución muy natural de los singles que había estado soltando años atrás”, dice Tristán. “Veo este nuevo trabajo como una apuesta personal hacia caminos más experimentales, probando ideas que llevaba mucho tiempo queriendo intentar. Pero sobre todo, este EP es mi deseo personal de romper con la dinámica actual de solo lanzar singles, que es algo que cada vez soporto menos”. Con esta afirmación, el joven artista desde luego deja claro hacia qué dirección quiere orientar sus nuevos proyectos. “Disfruto mucho escuchando un disco desde el primer track hasta el último y creo que es un formato que no se debería perder. La idea de involucrarme en un proyecto que denote cierta continuidad y suene todo en sí con cierta coherencia es algo que siempre he querido hacer y siento que ahora tengo las tablas necesarias para enfrentarme a ello”. Y por supuesto, también sabe con quién contará para ello. “Entre Roy [Borland] y yo establecimos una dinámica de curro muy guay hasta el punto de que su presencia en este trabajo fue clave. Cada tema parte de referentes e influencias muy diversas, pero fue el filtro de Roy lo que logró darle esa cohesión que el disco pedía. Sin duda, entendió muy bien el tipo de música que quería hacer y, por supuesto, querré seguir trabajando con él en el futuro”.

“El futuro de la música parece estar muy abierto y al final da la sensación de que no va a haber un solo camino a seguir, sino muchos"

Encapsular su estilo se antoja harto complicado, y es que TRISTÁN! pertenece a esta joven generación de artistas que, embriagados por el anarquismo que ofrece la autoproducción y el trabajo entre amigos, consiguen que todas las etiquetas, y ninguna a la vez, sean válidas. “El Y2K diría que me inspira más a nivel estético, pero en términos sonoros no estoy muy de acuerdo con que mi música suene tan dosmilera como dicen”, nos cuenta cuando le hablamos de este fenómeno que hereda los tropos de la cultura de los dosmiles. Del bedroom pop, por otro lado, casi mejor ni hablar. “Creo que es una etiqueta bastante machacada ya y que se ha puesto muy a la ligera en los últimos años”, sentencia. “Todos los artistas que conozco quieren hacer algo más ambicioso que simplemente pop de dormitorio, solo que por recursos, evidentemente, termina siendo lo más asequible”.

Con “Music EP”, TRISTAN! comienza a ganar puntos para convertirse en la nueva cara de un sello, la casa discográfica rusia-IDK, que no ha dejado de entregarnos algunos de los fenómenos de la cultura zeta más importantes de los últimos años. Tanto, que hasta se les considera precursores de un cambio en la escena independiente de nuestro país, aunque huyan de su responsabilidad. “Si se está dando tal cosa, desde luego no creo que haya sido intencionado. Yo, por lo menos, no he buscado romper ni introducir un nuevo sonido de forma consciente. Simplemente, creo que la generación de artistas a la que pertenezco se ha dejado llevar más por unos referentes que quizás en España no estaban muy asentados todavía o directamente no se conocían, y por eso puede dar la sensación de que estemos creando algo nuevo. Cada uno de ellos, además, tiene un estilo muy propio. Rusowski, Mori, Ralphie Choo, DRUMMIE… Todos comparten unos referentes determinados pero han conseguido llevárselos a su terreno y hacer algo único, introduciendo esas influencias en un idioma que hasta ahora no sabíamos que podía tolerar ese tipo de estilos. Puede ser que lo que estemos haciendo sea bastante único, sí, pero en cualquier caso está siendo un proceso del todo natural y detrás de lo que hacemos no hay ningún propósito de ser pioneros”. Sin embargo, les guste o no, sus propuestas traspasan fronteras y desde fuera contemplamos su actividad regular como el caldo de cultivo idóneo para un gran fin de ciclo. TRISTÁN! nos transmite su serenidad natural desde el otro lado de la línea, con observaciones y conclusiones muy maduras sobre los derroteros hacia los que nos dirigimos. “Debo confesar que cada vez soy más escéptico con respecto a lo que las IA aportan. Es cierto que hemos ganado mucha libertad creativa, pero también percibo que son recursos que están provocando que se pierdan otros métodos de hacer las cosas, menos inmediatos, menos urgentes, con los que, curiosamente, cada vez conecto más”, nos responde el artista cuando le preguntamos sobre estas nuevas herramientas de creación y el futuro de la música. “El futuro de la música parece estar muy abierto y al final da la sensación de que no va a haber un solo camino a seguir, sino muchos. Y al final, cada uno tomará el suyo”.