Y es precisamente esta canción la que abre "Dancin´ With Them That Brung Me" (Gearle/E-Squared/Discmedi, 00), una deliciosa grabación que confirma las alabanzas vertidas sobre Stacey a raíz de su debut, "Simple Gearle". En esta ocasión, sin embargo, es su marido Mark Stuart quien la canta con ella, con lo que esa alegre declaración de amor incondicional adquiere nuevos matices. Una composición que une dos de los hombres más importantes de su vida. "¿Qué mejor maestro y consejero se puede tener que Steve Earle? Es uno de los mejores autores que conozco. Para mí es como un héroe porque en un negocio tan duro como éste superar los problemas que él tuvo con las drogas, reconducir su carrera y lograr asentarse de nuevo como artista para crear esos grandes discos es algo digno de elogio. Poder trabajar con Mark es algo muy importante. Mi hijo Kyle, que toca la batería, nos acompaña de gira, con lo que puedo estar feliz al tener a la familia cerca. A veces es un poco estresante estar veinticuatro horas junto a tu compañero, pero cuando surge algún tipo de discusión a nivel profesional ambos somos capaces de separarlo de nuestra relación personal. Hay que marcar claramente los límites para poder sobrellevarlo". La vida de Stacey está llena de emociones fuertes, de esas que marcan a la futura letrista.
| "¿Qué mejor maestro y consejero se puede tener que Steve Earle? Es uno de los mejores autores que conozco" |
A los quince años tuvo un hijo que dio una adopción (una experiencia traumática que reflejó en el tema "Loosers Weep" de su debut) y dos años más tarde se casó con Michael Mims, con quien tuvo dos hijos, Christopher y Kyle. El joven matrimonio se vino abajo y Stacey se trasladó a Nashville al lado de su hermano, que en esos momentos estaba grabando "Copperhead Road". Cuidaba de sus hijos y de los de Steve y su vida parecía estancarse. Pero su hermano la animó a cantar "Promise You Anything" y se la llevó de gira por Estados Unidos, Canadá, Nueva Zelanda y Europa. Su suerte había cambiado y su formación musical iba madurando. A mediados del 91 conoció a Mark, miembro de la banda de Steve, The Dukes, y el resto, como suele decirse, es historia. "Mark y yo decidimos montar nuestro propio sello, Simple Gearle, porque estábamos cansados de esperar a que alguien nos financiara la grabación. Cuando salió el primer disco tenía treinta y ocho años, supongo que algo tarde para algunos, pero creo que ese era el momento ideal para mí, cuando realmente tenía algo que contar. Al inicio de la primera gira estaba un poco asustada, me preguntaba si la gente iba a aceptar mis canciones y debo reconocer que me llevé una grata sorpresa con la gran acogida que tuvimos. Fueron doscientos setenta días tocando por todo el país y era emocionante comprobar la conexión que se establecía con el público". Inevitablemente, surge en la conversación el papel de la mujer en la sociedad, así como el nombre de aquellas cantantes que han influido a Stacey como artista. "Las mujeres han evolucionado hacia una actitud más fuerte durante estos últimos tiempos. Hubo una época en que a la industria no le gustaba que las mujeres se expresaran artísticamente con tal grado de honradez y realismo, seguramente porque los hombres eran los que ejercían el control. Pero ellos también se han amoldado a los nuevos tiempos y ya no se avergüenzan de mostrar sus sentimientos. Joan Baez, con la que giré recientemente, es un gran ejemplo para mí. Es reconfortante ver que sigue disfrutando de la música con casi sesenta años. Su empuje vital me da ánimos para no desistir".
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