“Nuestra manera de hacer música es ir hacia la esencia y lo primario”
EntrevistasSelva Nua

“Nuestra manera de hacer música es ir hacia la esencia y lo primario”

Clàudia Pérez — 29-01-2023
Fotografía — Archivo

Joana Jové, Adrià Garcia y Gerard Català son Selva Nua, el trío de Lleida que acaba de publicar su primer disco, ‘Momentani’ (Bankrobber, 2022), tras ganar el concurso "Una Estrella a casa" en 2020.

Su sonido eminentemente pop con trazos de soul y lo-fi les ha abierto un hueco en la nueva escena en catalán, en la que aterrizaron con la canción “Nuvolosa”. Hablamos sobre el nacimiento de esta particular banda con su batería, Gerard, y sobre sus perspectivas tras el estreno del álbum.

¿Cómo estáis?
Estamos evidentemente muy contentos, también nerviosos con todo lo que nos viene, pero motivados, sobre todo. No tenemos tantos nervios por la salida del disco, porque ya hemos ido sacando los singles y pre-singles, pero hay nervios por ver cómo irá avanzando todo.

¿Cómo fue crear un grupo durante el confinamiento?
Nosotros empezamos a quedar para hacer canciones a finales de 2019 sin ninguna pretensión, quedábamos e íbamos haciendo música cuando teníamos tiempo. Entonces, con la pandemia, dejamos de quedar y de vernos, como todo el mundo, y salió el concurso de ‘Una Estrella a casa’ y fue entonces cuando ganamos y nos pusimos a ello más seriamente.

¿Cómo os ha marcado haber nacido en un contexto tan extraño como ese?
Teníamos la sensación de que nos quedaría esta etiqueta, la del grupo que ganó ese concurso, pero después hemos terminado yendo tan poco a poco en el momento de grabar, entre confinamientos perimetrales que nos pillaron en Lleida, de donde somos nosotros, y todo, que se fue dilatando tanto que ahora nos queda un poco lejos ya. Así que no mucho.

"Joana tiene un timbre de voz y una manera de cantar muy cercana al soul o al jazz, a la música negra, entonces quizás Adrià y yo tenemos influencias más pop, y la mezcla de las dos cosas es lo que nos ha traído hasta aquí"

Además, cada uno vivís en una parte de Catalunya.
Sí, es un poco como que el campamento base lo tenemos en Lleida, que es donde ensayamos y tenemos nuestros círculos, pero después vivimos todos esparcidos por Barcelona, Girona y Tarragona.

¿Cómo os ha influido esto logísticamente o a la hora de crear?
Seguramente nos ha hecho abrir más el punto de vista por el hecho de vivir realidades diferentes, y al final es verdad que normalmente cuando quedamos lo hacemos en Lleida, donde ensayamos.

¿Era vuestra intención estar dos años preparando el disco o ha sido así por las circunstancias?
Pues mitad y mitad. En parte ha sido por todo lo que ha pasado hasta 2021, pero después nuestra manera de hacer es queridamente lenta. Hacemos las canciones poco a poco, pensándonoslo mucho. Lo queremos hacer así y por eso hemos hecho una producción lenta del disco.

¿Cómo habéis trabajado en él?
Al final, la mayoría de las canciones, son ideas que ha tenido Joana, que había vestido de forma muy primaria, solo con la idea, y luego las hemos ido vistiendo poco a poco. Las hemos ido trabajando en paralelo, las canciones.

A menudo citáis influencias internacionales como Alice Phoebe Lou o Men I Trust, pero ¿hay algún grupo local que os inspire especialmente?
Sí, hay mucha gente de aquí que nos gusta, te podría hablar de Carlota Flanêur, de todo el pop metafísico o toda la órbita que hay alrededor de este pop, pero sí es verdad que con nuestra música nos da la sensación de que quedamos más cerca, estilísticamente hablando, de gente de fuera que de gente de aquí.

¿Y eso por qué?
Ha sido muy natural, nosotros no sabíamos cómo acabaría quedando el disco porque no teníamos nada desde antes, no teníamos un objetivo de querer sonar de un modo concreto o de hacer la música de esta manera. Es la manera como nos ha ido saliendo. Joana tiene un timbre de voz y una manera de cantar muy cercana al soul o al jazz, a la música negra, entonces quizás Adrià y yo tenemos influencias más pop, y la mezcla de las dos cosas es lo que nos ha traído hasta aquí.

¿Os esperabais presentar un tema en un concurso y conseguir todo lo que ha venido después?
Para nada, ni lo más mínimo, y más viendo la cantidad de gente que se presentó y las propuestas muy elaboradas que había. Nosotros grabamos esto porque lo vimos cuando salió, dijimos “¡venga, va!, estábamos encerrados en casa y lo hicimos como forma de entretenernos, no con el objetivo de ganar.

"Es evidente que casa siempre es importante, tener apoyos y sitios donde tocar allí, pero al final la música es fácil que llegue a todas partes"

¿Tenéis la sensación de que el actual es un momento muy prolífico para esta escena indie-pop catalana?
Sí, yo creo que la escena ya está creada, hace unos años que funciona, y esto es la historia que cuenta todo el mundo, de que hoy en día es muy fácil o mucho más fácil que antes producirse la música y llevarla hasta donde quieras. La cuelgas y allí la tienes.

¿Pero quizás esto al mismo tiempo crea más competencia?
Sí. Hay mucha gente que hace cosas, muchas de estas cosas están muy bien hechas, pero en esto hay también el factor de la suerte, el algoritmo o lo que sea, que hace que unas lleguen y otras no.

¿Por qué os identificáis con la idea de lo natural y lo salvaje tanto en vuestro nombre como en vuestras letras y estética en general?
Hay dos cosas. Una es buscar la relación con el nombre que tenemos, que nos conduce ya hacia unas imágenes y unos colores, seguramente. Y, aparte de esto, nuestra manera de hacer música también es esta, ir mucho hacia la esencia y lo primario, no buscar grandes artificios ni fórmulas determinadas para conseguir algo, sino que las canciones conduzcan hacia donde tienen que hacerlo.

¿Cómo fue trabajar con gente con la que en un primer momento casi no os conocíais?
Al final fue fácil porque todos teníamos ganas de hacer música. Los tres estuvimos haciendo música anteriormente. En ese momento no teníamos ningún proyecto grande y teníamos ganas de continuar haciendo música para pasarlo bien, y por eso supongo que fue fácil, porque era algo sin el objetivo de conseguir nada, sino de hacer música porque lo necesitábamos, de algún modo.

A veces parece que la escena es solo Barcelona, Maresme y Osona, pero en Lleida se hacen muchas cosas. ¿Cómo lo vivís vosotros?
Claro, aquí hay algo que es el componente demográfico, y por eso es lógico que Barcelona tenga el peso que tiene y todo su alrededor, y entonces es verdad que hay sitios como Osona en los que tradicionalmente desde hace años ha habido una escena que ha funcionado muy bien. A nosotros nos preocupa poco la etiqueta esta de Lleida, conocemos los grupos que hay en Lleida, hay algunos que nos gustan mucho y creemos que se hacen cosas muy chulas y lo importante al final es que la música llegue y es lo que decía antes, que hoy en día con las redes y las plataformas que tenemos no dependes tanto del sitio de donde eres. Es evidente que casa siempre es importante, tener apoyos y sitios donde tocar allí, pero al final la música es fácil que llegue a todas partes.

¿Crees que quizás también hay prejuicios?
Creo que hoy en día ya no, hace muchos años que nos llega música muy buena desde València y últimamente toda la movida que hay en Les Illes es súper potente, y yo creo que esto ya está bastante superado hoy en día.

Ahora empezáis con vuestros conciertos, ¿cómo los afrontáis?
Los afrontamos muy contentos, con muchas ganas. Nos estrenamos en el Mercat de Música Viva de Vic y estamos contentos de cómo fue. En el directo buscamos esto, sin grandes artificios ni grandes montajes, que lo que prevalga y lo que llegue sea la música.

 

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