Sangre nueva

Nada menos que cinco años han pasado entre el debut de The Eyes, “Pursuing The Misfortune”, y su nuevo “Insignis”, veloz segundo asalto que se sitúa a la altura de su sólido directo y que confirma a los barceloneses con una de las bandas metálicas con más proyección del país. El próximo 1 de mayo actúan en el festival Viña Rock

“Ha sido como dar a luz. Es algo súper bonito y al mismo tiempo muy
doloroso, pero al final vale la pena. El problema es que, debido a algunos
contratiempos, la salida del disco se ha retrasado casi dos años” Habla Edgar, guitarrista y
cofundador de la banda junto a Wero. Ambos responden a mis preguntas en una
informal charla en el frankfurt
contiguo a la barcelonesa sala Apolo. Falta una hora para su concierto junto a
Soziedad Alkohólika. El presente no podría ser más dulce para la banda. Han
fichado por un sello de calibre; el
pasado verano actuaron en el festival  Sonisphere abriendo para sus ídolos
Metallica (“los dos llevamos tatuada esa
fecha”) y acaban de protagonizar una gira estatal junto a S.A. (“que te vean mil personas dos veces por
semana es de lo mejor que nos podía pasar”). Aunque, como decían al inicio de la entrevista, antes de llegar
hasta aquí han padecido algunos altibajos. El más importante de ellos, los
cambios de batería y, sobre todo, de cantante, con la salida de Iván y la
llegada de Jordi, un recambio excepcional que ha hecho olvidar ya el buen
trabajo de su predecesor. (Edgar) “Desde
el principio buscábamos a alguien que no se estancara y que tuviera distintos
registros, para poder acompañar nuestra mezcla de heavy antiguo y metal más
rápido”. Aunque en el pasado ya hubo otros cambios; de hecho, Edgar y Wero
son los únicos miembros originales de The Eyes. “Los dos tenemos claro que queremos llegar lo más lejos posible con la
banda, y llega un momento en que o te subes al carro o no es posible. Si no lo
puedes compaginar con el trabajo o los estudios, no pasa nada, pero nosotros
estamos sacrificando muchas cosas para luchar por esto”. Por si fuera poco, muchos en la banda
aún tienen tiempo de involucrarse en proyectos musicales paralelos, desde Los
Tiki Phantoms o Segunda Apnea, en el caso de Edgar, hasta Read My Lips, por
parte de Wero. “Cuando algo te gusta y
lo tienes tan claro, sacas tiempo de donde sea”, afirman. Si algo positivo les ha brindado ese largo hiato
discográfico es la oportunidad de replantear muchos aspectos. El resultado ha
sido una clara mejora compositiva y de sonido. (Wero) “Les íbamos dando vueltas a los temas y eso los ha mantenido vivos y
frescos”. (Edgar) “Por desgracia,
muchas veces la gente se fija más en el sonido de un disco que en si le gustan
las canciones. Y eso es algo que jode porque a veces no puedes pagar un buen
estudio. Con este trabajo teníamos claro que queríamos las dos cosas: que el
disco sonara brutal y que las canciones fueran buenas, que engancharan”. Con todo, “Insignis” constituye una radiografía mucho más fiel a lo que The
Eyes son y representan hoy en día. (Edgar) “Cuando
grabamos nuestro primer disco llevábamos solo seis meses tocando y ahora
llevamos siete años juntos”. En cuanto al estilo, se aprecia también cierta
evolución. Su primeriza mezcla de metalcore y death melódico se ha desplazado
ligeramente hacia el thrash metal y hacia un sonido más americano. (Wero) “Aunque procedíamos de grupos más
orientados hacia el metal, estábamos en la escena hardcore. Y eso en el primer
disco se notaba, pero después de tanto tiempo vas depurando el estilo y acaba
siendo metal, que es lo que queríamos hacer desde el principio”. Un mensaje subrayado por la portada
del disco, inequívocamente heavy, diseñada, como es habitual, por el bajista
Cristian. (Edgar) “Queríamos que quedase bien claro lo que
hay, esto es metal y no engañamos a nadie”. Con las cartas tan bien
definidas, tan solo falta que el público responda. (Edgar) “Hay una cantera
muy prometedora, con bandas realmente buenas, y debe producirse ya un salto
generacional. Hay público suficiente para todo el mundo, nadie va a pisar a
nadie, pero no entiendo cómo vienen bandas de fuera y consiguen reunir a cuatro
mil personas, y a las bandas de aquí, como mucho, las van a ver entre
doscientas y mil personas. Hacemos exactamente lo mismo y encima somos de casa.
Hay bandas que merecen dar un paso y creo que el público también necesita nueva
música”. Convicción y ganas no
les faltan. (Edgar) “Ahora tocamos en el
Viña Rock, pero también estamos intentando cerrar fechas fuera de España”. (Wero) “No paramos de trabajar, ya estamos pensando qué es lo siguiente. Lo
importante es no parar el tren”. (Edgar) “Vamos a muerte. Esto no termina aquí”.