“Tinoni”, “Palmas”, “Acoples” o “La tercera es la segunda” son canciones del debut autoeditado de los gallegos Unicornibot. Bajo esos títulos tan modernos prometen dar guerra con una técnica instrumental que avala el mismísimo Escrivá de Balaguer. “La verdad es que los nombres de los temas nunca estuvieron muy claros hasta que Javi Ortiz de Estudios Brazil nos dio un par de ideas... nosotros seguimos pensando que no son importantes”. Efectivamente, Ortiz puede ser uno de los culpables de que el disco suene así de bien. Bob Weston también ha ayudado. Ellos lo corroboran. “Javi es genial y su Estudio Brazil la gran maravilla del extrarradio madrileño... sólo su colección de sintetizadores ya asusta nada más entrar. Weston nos dio el último toque y alas, y se hizo una foto con nosotros en Vigo”. Nos cuentan que una de las mayores fuentes de inspiración para la banda fue aquella ocasión en que se quedaron sin gasolina en la furgoneta y nos dan una rápida lista para rastrear la para muchos siempre recóndita Pontevedra. “Hay un montón de bandas interesantes: Drama, The Fingers, Execute!... buscad, buscad...”. Unicornibot suponen una alegría más en el cada vez más poblado (repito que eso siempre es bueno) panorama cercano de bandas instrumentales. Su mesilla de noche musical también es florida: “Es evidente escuchándonos: desde Cañita Brava hasta Sabina, pasando por Miguel Bosé o Bertín Osborne. Todos han tenido algún hueco en el local de ensayo. Por lo que dicen por ahí nos gustan unos tales Shellac, Don Caballero, Joe K-Plan o Za!”.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.