"Nuestra música sigue teniendo un toque de rebeldía"

Es posible que los más jóvenes no tengan ni idea de quienes son Fila India, pero hace más de una década su nombre era sinónimo de diversión y desenfreno. Ahora vuelven con nuevo disco bajo el brazo dispuestos a reverdecer laureles.

Hace quince años, cuando sus temas sonaban en la cabeza de toda una generación y tenían todo un mundo por comerse, decidieron dar un tiempo de tregua a Fila India. Ninguno dejó de lado la música y, al igual que llevaban haciendo desde que eran unos niños niñatos, siguieron haciendo de todo juntos. Todo menos canciones. “Sentimos que no había una progresión, que no teníamos tanta motivación, que ya no había una discográfica detrás… Lo bueno de decidir parar es que el público se quedó con ganas de más y guarda una fotografía genial de la banda en sus recuerdos”, cuentan Juampa Claros (voz y guitarra), Álvaro Herrera (guitarra, coros y sintes) y Víctor Hidalgo (batería).

Ya entonces los tres sabían que les quedaba algo pendiente, y junto al que siempre fue casi el cuarto miembro de la banda, Miguel Rueda (Cecilia Ann, Concorde), acaban de lanzar “El rayo de Gerry López”, un álbum lleno de luz y de canciones que invitan a escaparse en busca de una buena ola. Las dos guitarras que ahora suenan electrifican un poco más un sonido que en temas como “Promesas decepciones”, “Crescendo”, “La hora del baile” o “¿Cansada?” sigue remitiendo a lo mejor de Fila India. “Puede que seamos un poco más viejos, pero nuestra música sigue teniendo un toque de rebeldía e inconformismo. Seguimos sin ser instrumentistas virtuosos, pero lo alocado de entonces se ha transformado en muchas ganas de disfrutar del directo”.