Nos encontramos en la Rambla de Poble Nou con Sideral para que nos hable del pasado, el presente y el futuro de su trayectoria artística. Empezamos hablando de su sello. "De momento hemos sacado tres referencias, un maxi en vinilo a mi nombre, un formato con el que trabajaremos siempre que sea material destinado a la pista de baile, el Ep de remezclas de Sidonie que hemos editado a medias con Bip Bip Records y mi doble sesión. En la nevera tenemos la reedición del disco Peanut Pie con nuevas remezclas". El sello, creado a medias con Carles Baena y distribuido por PIAS tiene como objetivo sacar material propio y ajeno. La conversación acaba derivando hasta llegar a Sidonie, un grupo que ha saboreado las mieles del éxito que se le negaron a Peanut Pie.
"La técnica y las virguerías ayudan, pero no hacen bailar más al público" |
"La idea de los remixes fue mía. Es un grupo que me encanta y me apetecía mucho. Lo hice por placer no por dinero, de hecho los hice gratis". En el primero de los compactos, "Schizotronic", se refleja lo que puede dar de sí una sesión suya, muy ecléctica y sin miedo a mezclar a Maga, Dntel, Squarepusher y Metro Area. "Lo de Maga surgió porque me encanta ese tema y exactamente lo mismo con el de Squarepusher, fue simplemente cuestión de mirar de cuadrar el tempo en el disco y por suerte lo conseguimos". En lo referente a "Techno", el segundo disco, se trata de una sesión más homogénea y directa. "La razón de dedicar un compacto al techno es que realmente en mi ultimo año he pinchado más techno que nunca y de hecho este lanzamiento trata de reflejar las sesiones que vengo haciendo en el ultimo año". Si hablamos de sesiones toca hablar de clubes y de sus preferencias. "Después de bastante tiempo sin pinchar en Barcelona, ahora tengo dos residencias de las que estoy muy contento. Una en el Discothèque y la otra en The Loft, donde me encanta pinchar, tanto por la atmósfera del club como por la programación, la mejor de Barcelona ahora mismo". Y también en Madrid, después de tanto tiempo pinchando ha conseguido un club en el que sentirse como en casa."En el Siroco me encanta pinchar, allí puedo entregar sesiones cien por cien Sideral". Gracias a todo esto se ha dado cuenta de que cuenta con un público, hecho que le permite hacer las sesiones totalmente libre, sin ningún compromiso por el hecho de tocar en un club o en otro. Por otra parte, reconoce no tener ni mesa de mezclas ni dos platos en casa. "De hecho, para grabar la sesión tuvimos que alquilar el equipo, nunca he tenido platos en casa. Aprendí a pinchar en el Nitsa delante de gente y creo que eso me ha ayudado mucho a ver que realmente lo importante es la música y como la secuencias. La técnica y las virguerías ayudan, pero no hacen ni bailar más al público ni hacer de la sesión algo mejor". Reconoce que le encanta bailar y que, ahora, por cuestiones de trabajo solamente puede mover el esqueleto en los clubes en los que pincha sean en la península, en Italia, Canadá, Portugal o Irlanda.
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