¡Mueve el culo, yanqui!
EntrevistasThe Right Ons

¡Mueve el culo, yanqui!

Don Disturbios — 01-04-2009
Fotografía — Colectivo Anguila

Deben su nombre a una canción de James Brown, su energía a una fe a prueba de bombas en lo que hacen y su directo es posiblemente uno de los más desenfadados, sólidos y contagiosos de nuestro país. No tienen coartada arty, pero eso no va con ellos. Son The Right Ons, el grupo de rock´n´ roll que arrasó en el SXSW de Austin. Esta es la crónica de una intensa semana en la feria más importante de América.

Reconozcámoslo, no suele ser habitual ver a una banda española de rock’n’roll que canta en inglés ocupando nuestra portada. Si nos ponemos a repasarlas todas, la última fue la dedicada a Atom Rhumba y es muy posible que la culpa se reparta a partes iguales entre nuestra habitual inclinación por las bandas de pop que cantan en castellano y los grupos que practican sonidos digamos que más vanguardistas, pero también porque posiblemente no haya habido una banda que recoja la herencia de Rolling Stones, James Brown y MC5 con tanta efectividad y desparpajo como The Right Ons. Y encima esa herencia clásica la saben transportar al directo con una soltura y contundencia que, aunque pueda no ser de tu agrado, no te dejará indiferente. En directo son una máquina de rock´n´soul divertida y sólida, con la suficiente entidad como para salir sin ningún complejo a defender su propuesta en cualquier escenario internacional que se precie. Conocedores de esto, cuando surgió la oportunidad de acompañarlos al SXSW de Austin para convivir con ellos durante una semana y comprobar de primera mano como los recibían los yanquis en la cuna del rock´n´roll, no nos lo pensamos dos veces: Había que hacerlo. Además la historia del rock está trufada de historias como esta. Desde el fallido viaje de Truman Capote con The Rolling Stones en 1972 a “Casi famosos”, la ligera película de Cameron Crowe... muchos han sido los testimonios de periodistas metidos como un miembro más de la banda para descubrir sus intimidades. Historias tan antiguas y manidas como el rock, repletas de sexo, drogas y rock´n´roll aunque, para no faltar a la verdad, esta vez hubo mucho y buen rock, algo de drogas (las justas) y nada de sexo. A no ser que el onanismo y algún intento fallido sean “pulpo como animal de compañía”. Pero como es imposible resumir tantas experiencias vividas en tan sólo unas líneas, dejadme que destaque los cinco momentos “Right On” del Festival más inimaginable jamás vivido.

Los cinco momentos más “Right On” del SXSW de Austin

Momento Right On número 1”: Miércoles 18 de marzo: Actuación en una tienda de ropa con Eli ‘Paperboy’ Reed
Tras las presentaciones de rigor en el aeropuerto de Madrid y la mala fortuna de un servidor de caer en desgracia frente a la responsable de la línea aérea americana y sufrir un registro en toda regla, empezamos a convivir y a conocernos. La primera impresión ya fue positiva. Mi habitual inclinación a todo lo que huela a fiesta y diversión se iba a sumar a las diferentes personalidades de los cinco miembros de The Right Ons. Por un lado, Ramiro (batería y voces), sin duda el verdadero motor del grupo siempre pendiente de todos los detalles. En el otro extremo, Álvaro, cantante y guitarrista que ejerce su rol de frontman descarado y canalla aunque no exento de una entrañable inocencia. En medio, la dedicación y habilidad de Rafa como guitarrista líder y músico dotado; la solidez robusta de Utah al bajo, con ese cinismo tan gallego que lo hace impermeable a casi todo y, por último, la profesionalidad de Martín, el teclista y conductor abstemio de la banda que nos recogía noche tras noche, sin importar nuestro estado, para devolvernos a nuestra casa de ensueño con piscina digna de Beverly Hills y que habían alquilado para la ocasión sabedores de que saldría mucho más barata que un hotel para los nueve componentes de la expedición (a los cinco miembros del grupo hay que sumar a Leandro como tour manager, David como manager, Cristian Picore como técnico y un servidor como crápula dispuesto a pasárselo en grande). De esa guisa llegaría el primer punto de inflexión del carrusel de la gira. La actuación en una pequeña tienda de ropa llamada Sonics Vintage en la que compartirán escenario nada más y nada menos que con el fenómeno soul de los últimos meses en Europa, Eli “Paperboy” Reed ante no más de veinte privilegiados pares de ojos que, como un servidor, se frotaban ante un acontecimiento poco común. La explicación es sencilla, tanto Eli como The Right Ons comparten el mismo productor y valedor en América. Un personaje de fino olfato para el soul llamado Ed Valauskas que está en Austin para propiciar el máximo éxito y rendimiento de sus pupilos y sin el que “Look Inside Now!” (2Fer Records/Pias), segundo álbum de la banda, no hubiera sido lo mismo. (Álvaro) “No sólo ha sido importante la labor del productor, que sin duda ha sido fundamental, sino también el hecho de grabarlo en Boston. Cualquier factor ambiental que te rodea cuando estás haciendo algo creativo te influye. Por eso no es lo mismo grabarlo aquí que en un estudio de Madrid”. (Martín) “Lo hemos grabado estando quinientas horas juntos, todo el rato, por eso también se nota lo que es una banda ya que estamos empujando todos en el mismo sentido”. (Rafa) “Y la forma de trabajar y de grabarlo todo en directo con un equipo de primera y trabajando muy duro, porque se trabaja muy duro y el oído que tiene esta gente está muy educado. Sólo por eso estamos muy satisfechos”.

Momento Right On número 2: Jueves 19 de marzo de 2009. Saltando con Primal Scream
El día anterior, tras el concierto en la tienda de ropa, The Right Ons, al igual que el resto de la delegación financiada por Fundación Autor, tenían la cita oficial del programa del Festival en el Esther´s Follies y precisamente el show de nuestros protagonistas fue el más concurrido. Se nota que es el segundo año consecutivo que acuden al festival y eso les ha grangeado cierta popularidad. Al día siguiente, las actuaciones españolas se repetirían en el mismo orden, pero esta vez en una carpa habilitada bajo el lema “Sound From Spain”, en la que se ofrecerá paella y bebidas de forma gratuita y que además servirá de punto de encuentro de toda la delegación española y parte de la catalana. Sin embargo, la vivencia imborrable vendrá por la noche cuando la banda al completo ocupe las primeras filas de un coqueto local llamado Cedar Street Courtyard, en el que Primal Scream van a desatar la locura entre los no más de doscientos privilegiados que han conseguido acceder al recinto. Los Primal tiran de clásicos y en un show de cuarenta minutos dejan a todo el mundo en éxtasis. Se nota que los tienen pelados de tanto tocar y la proximidad no hace más que magnificar el evento. ¡Qué importante es ofrecer algo más que tan sólo música sobre un escenario! (Rafa) “La gente va a un show a pasárselo bien y cuando se inventó el rock´n´roll o la música negra iban a las caravanas a bailar y a refrotarse, porque para ver a cuatro estatuas de cera pues la verdad a lo mejor me apetece más escuchar el disco o ir al cine. Yo creo que el espectáculo visual es muy importante y sino imagínate a James Brown sin el espectáculo que ofrecía, no sería lo mismo”. (Álvaro) “En nuestro caso no se puede separar ningún elemento. Yo, por ejemplo, no podría hacer lo que hago si no estuviéramos los cinco. No me sentiría cómodo haciendo el capullo con otros tíos que no fueran estos. Esos cinco elementos son fundamentales”. (Rafa) “Además nuestro show no ha sido premeditado, ha ido variando y creciendo a la vez que lo hacíamos nosotros sobre el escenario”.

Momento Right On número 3: Viernes 20 de marzo de 2009. Bolazo en el Ginger Man
Llega el turno del tercero de los seis conciertos que van a protagonizar
The Right Ons en el festival y el que se convierte, sin duda, en el
mejor de ellos. Las canciones de su “Look Inside Now!” se suceden con
rapidez y contundencia. Ese vacilón y contagioso himno de agradecimiento
que es “Thanks”; la juguetona “Frontline”, donde explotan al máximo la
combinación de las voces de Ramiro y Álvaro; el insinuante ritmo de bajo
de “Look Inside”; el sonido Motown de “The Right Song” o la efectividad
de ese himno que es “That´s New York” desatan la locura entre el
respetable que acaba ovacionando al grupo. Si a eso le añades recursos
escénicos simples, pero efectivos, como la chulesca manera en que Álvaro
arroja al suelo unos dólares durante la versión de “Waiting For My Man”
o el lanzar panderetas y maracas al público para que se sumen a la
fiesta, está todo hecho. The Right Ons conquistan América... bueno, al
menos un pedacito de Austin, Texas. Lo que queda claro es el enorme
salto cualitativo entre su primer álbum y este segundo, que es la base
de su show. (Álvaro) “Es cierto que hay un salto cualitativo entre el
primero y este. Las canciones están más elaboradas aunque el proceso de
creación fue bastante similar en cuanto a tiempo y energía. La única
diferencia es que el primero era un vómito necesario que teníamos que
sacar rápidamente, crudo, directo y este segundo tiene esa misma energía
del directo, pero con las canciones más elaboradas y buscando matices
distintos, más luminosidad y que no fuera todo en una misma línea”
.

Momento Right On número 4: Domingo 22 de marzo de 2009. Barbacoa a la española.
El sábado fue mi día más desprendido, tocaba concentrarse en el resto de
propuestas del Festival y apenas coincidí con los chicos. Además, para
la jornada siguiente habíamos previsto una barbacoa en la piscina de la
casa de alquiler, una fiesta en la que me quedé con las ganas de ver a
Nacho Vegas en bañador (no se quitó ni la chaqueta) o a Eli “Paperboy”
Reed de cachondeo (poco comunicativo, aunque luego me enteré por otros
que va a venir una semana a nuestro país de vacaciones y declararse a su
novia... flipo). Pero lo que sí pude ver es al binomio Tokyo Sex
Destruction/It´s Not Not, a The Right Ons y a un servidor haciendo el
cafre en la piscina... Nada destacable excepto para nosotros mismos que
nos lo pasamos como niños.

Momento Right On número 5: Lunes 23 de marzo de 2009. New York, New York
Con el cansancio de una semana acumulado y apenas un par de horas de
cama (la barbacoa se alargó más de lo previsto y tenemos que estar en el
aeropuerto a las cuatro y media de la mañana), llegamos a New York,
donde tenemos diez horas de espera para enlazar con el vuelo a Madrid.
Taxi y camino a la ciudad que The Right Ons conocen bien. Primera parada
en el Coffeshop de Union Square, en el que realizamos por fin la
entrevista rodeados de bellas camareras aspirantes a modelos. Es el
momento que aprovecho para preguntarles sobre lo satisfechos que han
dejado a una variada audiencia americana (en los conciertos es habitual
ver a gente de todas las edades). (Ramiro) “Antes teníamos la
percepción que una banda de rock como la nuestra casi tenía que dar las
gracias cuando venía aquí por dejarte tocar su música, pero creo que con
el tiempo este sentimiento de inferiodidad ha ido a menos. Antes si
venía un grupo español a tocar aquí, lo hacía casi con miedo, pero con
el tiempo va cambiando la mentalidad”
. (Rafa) “El símil sería que nosotros somos campeones del mundo de baloncesto y ellos inventaron la NBA...”. (Álvaro) “Aunque tampoco se trata de una guerra”. (Rafa) “Ya lo sé, pero es que estamos al mismo nivel”. (Martín) “A
ellos no les importa que seamos de España o de dónde sea. De hecho no
es la primera pregunta que nos hacen. Cuando se lo dices se sorprenden,
pero no es lo que más les importa”
. (Álvaro) “Aquí la gente no
tiene los odios o envidias que te encuentras en la escena musical
española. Al contrario, hacen una comunión musical entre ellos
acojonante. Son una gran hermandad, también con el público, que va muy
receptivo y no va a examinar si tienes fallos. Aquí la gente va a los
conciertos, si les gusta, perfecto y sino a lo mejor se va o se toma su
cerveza y punto”
. Poco más, tan sólo añadir que, pese a todo, en mi
cabeza no deja de resonar esa canción de Manel que dice “No s´està a cap
lloc com a casa”.

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