Comencemos por el principio para situar al lector ¿En qué momento os conocisteis y cuándo y por qué decidisteis materializar este proyecto conjunto que es Mostaza Gálvez?
(Guille Mostaza) Frank y yo nos conocimos hace exactamente dos décadas. Él tocaba con su grupo, Gasca, en Zaragoza y le teloneaba otro grupo con el que yo colaboraba, Niza. Nos hicimos amigos de inmediato. Años más tarde compartimos piso y fue ahí cuando empezamos a hacer canciones. Vimos que nos resultaba fácil trabajar juntos y al poco tiempo nos dimos que cuenta de que ya teníamos un disco hecho.
(Frank Gálvez) Recuerdo perfectamente el día que Guille me comentó que deberíamos hacer algo juntos. Me mudé a Madrid por motivos laborales y lo que empezó con un... “Oye ¿me dejas usar tu estudio?” acabó con un puñado de canciones que luego sería nuestro primer disco.
Ambos habéis estado también en otros proyectos, pero a ti Guille se te asociará siempre con Ellos, y a ti Frank con Gasca ¿Qué diríais que hay de cada uno de esos grupos en Mostaza Gálvez?
(Guille Mostaza) Hay un poco de ambos grupos en este disco. Fíjate que en el anterior traté de que no se notara tanto, pero es evidente que venimos de dónde venimos, así que caretas fuera. De Ellos tiene algunos toques en la producción, muchos giros melódicos en la composición, hay armonías comunes, estructuras y arreglos. De Gasca tiene el toque sobrio, comedido, y ese puntito oscuro, es la parte que trae Frank. Yo tiendo a ser más luminoso, así que nos complementamos muy bien.
(Frank Gálvez) Guille lo acaba de explicar perfectamente. Nos complementamos a la perfección y pocas veces estamos en desacuerdo artísticamente. Supongo que algo tendrá que ver que tengamos gustos musicales muy similares.
Siendo más específicos en este aspecto ¿Qué aporta exactamente cada uno de vosotros a Mostaza Gálvez? ¿Qué partes son más propiedad de Guille y en cuáles tiene más que ver Frank?
(Guille Mostaza) Es todo muy de los dos. Para mí supone un cambio en mi forma de trabajar, ya que se dejan las cosas muy abiertas para que la otra parte las complete y yo vengo un poco del “yo me lo guiso yo me lo como”. En cambio, ahora Frank trae una idea (casi siempre partiendo de una frase que se le ocurre inspirada por alguna experiencia reciente) y yo aporto otros conceptos melódicos e instrumentales, empiezo o acabo algunas de esas frases y entre los dos decidimos qué formato darle y cómo se puede vestir a esa canción. Me gusta mucho trabajar con Frank, porque sabe que esto es un grupo de dos personas, yo le escucho a él y él a mí, a veces barremos más para su lado y a veces más para el mío. Puede que Frank se ocupe algo más de lo lírico y yo de lo musical, pero está todo muy consensuado. Somos dos personas muy creativas, cada uno en su estilo. Es un carro del que tiramos entre los dos. Poder a veces dejar que el otro conduzca y llegue a buen puerto es una sensación muy liberadora y novedosa para mí.
(Frank Gálvez) Yo soy más visceral, aporto lo que me sale de manera inmediata, Guille es bastante más cerebral y saca cosas que le llevan rondando la cabeza semanas o meses. Él suele elegir prendas coloridas y yo más oscuras, tenemos también dos formas de cantar muy diferentes que acentúan más ese contraste de personalidades.
¿Cuáles son, en vuestra opinión, las principales diferencias entre “Vida y milagros” –vuestro debut y anterior disco– y “Desventura”?
(Guille Mostaza) “Vida y milagros” es más oscuro, más arisco y enrevesado. Al yo estar todavía en Ellos quería algo que fuese más lo contrario, por eso nos centramos en conseguir un sonido más caótico y guitarrero que me supusiese un descanso de mi otro grupo y a la vez me distanciase. Te reconozco que nos resultó más fácil hacer ese disco que este último, ya que todo fue muy espontáneo, nada estaba muy pensado, nos dejamos llevar y así salió. “Vida y milagros” tiene la urgencia típica de un primer disco.
(Frank Gálvez) En las letras del disco también hay un cambio significativo. Cuando empezamos con las canciones de “Vida y milagros” yo venía de una ruptura sentimental y hay bastante descarga emocional es ese disco. En “Desventura”, Guille ha participado mucho más y mi situación es bastante diferente. Suelo soltar bastante de lo que llevo dentro en las canciones, siempre me han servido como terapia y desahogo. Supongo que esa es una de las grandes diferencias. Otra, y creo que quizá la más importante, es que en “Vida y milagros” colaboró bastante gente y “Desventura” nos lo hemos currado Guille y yo solitos.
Entonces… ¿Qué se puede encontrar en “Desventura” que definitivamente no estuviese en el anterior álbum de Mostaza Gálvez?
(Guille Mostaza) Cuando empezamos a hacer “Desventura” íbamos por el mismo camino que con ‘Vida y milagros’, pero yo, personalmente, notaba que me aburría, no quería repetir lo mismo de nuevo. Acomodarse es muy de vagos y no hay nada peor que un vago. Así que este verano decidimos tirarlo todo a la basura y volver a trabajar las canciones desde cero, con otro planteamiento más rico y diverso, más arriesgado. Es entonces cuando tiramos por el camino difícil para conseguir un resultado elaborado. Si te fijas bien, las canciones están llenas de detalles, es todo mucho más minucioso.
(Frank Gálvez) En “Desventura” los sintetizadores están muchísimo más presentes y la batería es una mezcla de caja de ritmos con percusión real. Recuerdo que estábamos dándole vueltas a la grabación e incluso ya le habíamos pasado las demos a nuestro batería para cerrar un día y empezar a registrarlo. Le dije a Guille que podríamos probar la combinación de caja de ritmos y que él tocara la percusión. Nos gustó muchísimo y ya no hubo vuelta atrás. Ha sido muy laborioso, pero ha merecido la pena. En “Vida y milagros” tiramos más hacia las guitarras, dándole casi todo el protagonismo y con un sonido más clásico.
Personalmente creo que “Desventura” presenta a un dúo bastante más cómplice, lo que tiene como consecuencia un disco que, en conjunto, es más arriesgado y también más sólido ¿Estáis de acuerdo? ¿Fue “Vida y milagros” una especie de piedra de toque o primera toma de contacto hacia lo que ahora es este nuevo disco?
(Guille Mostaza) Absolutamente de acuerdo. Cuando empezamos el grupo no nos planteábamos ningún tipo de continuidad, simplemente queríamos hacer canciones y disfrutar con el proceso. Eso se refleja mucho en “Vida y milagros”. En cambio para “Desventura” queríamos un trabajo más sólido, algo que poder defender con orgullo y sabiendo que todo lo que hay en el disco está porque quieres que sea así, no porque así se quedó y lo dejaste pasar. También para “Vida y milagros” llamamos a varios amigos para que colaboraran con nosotros. Fue una especie de fiesta continua, pero de este nos hemos encargado los dos solos. Queríamos que hablase mucho de nosotros, que nuestros caracteres estuviesen muy presentes en el disco. Ahora que hay featurings hasta en la sopa, quisimos que en este no hubiese ninguno, que nuestras personalidades no quedasen diluidas por el colaborador de turno.
“Decidimos que no daríamos por buena una canción si al mezclarla no caía un lagrimón de emoción”
Este es un disco de electro-pop vistoso y desprejuiciado, presentando sin trampa ni cartón y con una serie de estribillos que os confirman especialmente dotados para ese arte ¿Qué tipo de disco querías conseguir Mostaza Gálvez cuando empezasteis a trabajar en “Desventura” ?
(Guille Mostaza) A mí siempre me ha hecho mucha gracia eso de “desprejuiciado” ¿Qué quiere decir la gente cuando dice eso? Nunca lo he entendido. Mi manera de querer la música es así, no conozco prejuicio ninguno, y de hecho me parece raro cuando alguien lo tiene. Creo que eso es más cosa de pusilánimes que temen quedar mal ante su miserable audiencia snob, de complejos e inseguridades mal gestionados. Es como muy de culpabilidad católica. Yo aprecio por igual a Spiritualized que a Abba, que a TV Personalities, Aztec Camera, Dorian Electra, Talking Heads, The Cure, Stereolab, Pulp, The Buggles, Caroline Polachek, Misfits, Sparks, Holy Ghost, Devo, Troye Sivan, Carpenters, ELO o algunas canciones de Britney producidas por Max Martin. Me gustan Can, me gustan Bauhaus, The Damned, Wire, Charly García, Cyndy Lauper, The Doors, Prefab Sprout, Pavement, Dinarama, Los Planetas, la banda sonora de “Frozen”, me gusta el “Caca, culo, pedo, pis” de Enrique y Ana, las producciones de Stock, Aitken y Waterman o Trabucchelli, Sonic Youth, Supertramp, George Michael, Suzanne Ciani, me gusta el Bowie de “Low”, el de “Let’s Dance” y el de “Hunky Dory”. Me gusta todo lo que tenga una canción interesante por debajo y no me avergüenza absolutamente nada. Siempre he sido muy amante del fondo, la forma me da más igual, nunca he sido mitómano ni me ha interesado la cara o la pinta del que compone o interpreta. Así que este disco es eso, un conjunto de canciones a las que hemos decidido dotar de estos vestidos y trajes. Tan simple como eso. Lo que sí queríamos es que esas ropas fueran elegantes y estuviesen limpias.
(Frank Gálvez) Lo cierto es que no teníamos ni idea de cómo sería el disco ni de lo que queríamos hacer. Vamos haciendo canciones y luego vamos moldeando el vestido según nos lo pidan las mismas canciones. De hecho, hay veces las dejamos reposar y nos sorprende gratamente cuando aparece en alguna carpeta perdida y de repente nos gusta. Al juntarlas todas es cuando te das cuenta de que, sin pretenderlo, tienes algo coherente y que siempre ha estado ahí. Yo creo que los discos son como los embarazos, van creciendo sin que lo veas claro y no sabes qué aspecto tendrá hasta que lo tienes en las manos. Ha nacido con buen peso.
Incidiendo en el tema de los estribillos ¿Cuál es el “secreto” para conseguir uno de esos estribillos pegadizos que una vez oído ya nunca se va de la cabeza?
(Guille Mostaza) Esto es un piropo muy grande, muchas gracias. La verdad es que no lo sé. ¿Cierta sensibilidad? Hablo de sensibilidad común entre creador y oyente, nosotros hacemos las cosas para que nos gusten a nosotros, si luego resulta que a más gente le gustan es que estamos en sintonía. Seguro que hay gente a la que este disco le horroriza, pero aún no lo sabe porque no lo ha escuchado. Hay otros artistas que hacen mejores solos de guitarra, que tienen mayor registro vocal o un sonido más contundente y cañero. Nosotros no buscamos eso, buscamos canciones que funcionen como nosotros queremos. Recuerdo que mientras hacíamos este disco le dije a Frank que no daría una canción por buena si cuando la estaba mezclando no me caía un lagrimón por la mejilla de la emoción. Seguí esa ley a rajatabla. Me lo he llorado todo. Soy un blandengue, lo sé, pero a mí lo único que me hace llorar es una canción que me llegue.
(Frank Gálvez) Muchísimas gracias. Está feo que yo lo diga, pero es que no se nos da nada mal a ninguno de los dos. Salen de manera natural y nada forzada. Somos unos afortunados, de hecho soy el inventor del ‘estrofillo’, esto es una broma interna que algún día contaré… o no.
(Guille Mostaza) No, no, no la cuentes. Madre mía.
Sois dos y hacéis sobre todo electro-pop… ¿Deberíamos empezar a llamaros los Pet Shop Boys españoles? La pregunta es un poco de coña, pero desde luego que el disco muestra influencias de los británicos, sobre todo en el tema “Ambiciones”.
(Guille Mostaza) Pet Shop Boys es otro de mis grupos favoritos, son increíbles. Supongo que sí, algo hay, pero hacer un disco es como cuando tienes un hijo y un amigo te dice “tiene tu cara”. Pues será, yo no quise hacerlo así, pero lleva mis genes. Pues más o menos eso es. A mí la verdad es que se me hace difícil encontrar referencias concretas ya que cuando hago algo y veo que se parece a otra cosa, lo desecho inmediatamente. Luego me encanta que saquen comparaciones porque la mayoría de las veces no me las espero.
(Frank Gálvez) Soy fan acérrimo. Recuerdo que cuando colaboraba con Ellos tocando los teclados coincidieron en un concierto en Pamplona, y yo me tuve que quedar en casa porque estaba recién operado de la espalda... Me dolió más no poder compartir escenario con Pet Shop Boys que la propia operación.
(Guille Mostaza) Te perdiste un highlight de mi vida, Frank.
Precisamente os iba a preguntar acerca de las influencias y referentes a la hora de perpetrar este “Desventura”…
(Guille Mostaza) Sinceramente… ni idea. Nunca nos ponemos a hacer canciones pensando en que se parezcan a esta o a la otra, nunca escuchamos referencias mientras trabajamos. Es algo que siempre he hecho así, sino acabas haciendo algo imitando deliberadamente a otra cosa y no me gusta esa idea. Frank tiene un gusto más guitarrero y yo más electrónico, cuando estamos en el estudio lanzamos ideas al aire y las que nos gustan a ambos se quedan. Otra cosa que hay en este disco es mucho diálogo, no hemos metido nada que no le guste a la otra mitad, si a alguno de los dos no nos convence una idea, por mucho que al otro le apasione esa idea queda fuera.
(Frank Gálvez) Así es, nunca nos hemos fijado en nadie. Recuerdo que coincidí con Nacho Canut en el camerino del Granada Sound y me preguntó que a qué grupo nos queríamos parecer… Le dije que no lo sabía y él me contestó que eso era imposible, que todos los grupos quieren parecerse a otros. Él no se lo creyó, pero es la verdad. No lo sé.
(Guille Mostaza) Yo llevo más de media vida intentando parecerme a Abba, a los cuatro a la vez.
¿Pero sois conscientes de que, al final, al oyente el resultado le va a recordar bastante a Ellos? (y eso, obviamente, tampoco es malo)
(Guille Mostaza) Claro, pero como tú dices, no creo que sea algo malo. Lo que sí estoy convencido es que muchos de los nuevos oyentes no tendrán ni idea de quién es ese grupo y eso me motiva bastante. Nada peor que ir por la vida diciendo “yo hice esto”, “yo estuve en tal grupo” o “soy ex no sé qué”. De hecho, cuando veo a otros músicos haciendo esas cosas pienso: “Espabila, que el tiempo vuela y ya la gente no sabe ni de qué hablas”.
(Frank Gálvez) Sería lo más lógico. Además la voz de Guille está muchísimo más presente en este disco, cosa que me encanta. Tocamos en muchísimos conciertos juntos en la época de Gasca y en la última etapa formaba parte de su banda de directo, así que sería lo normal e incluso lo consideraría un halago.
¿Habéis presentado ya las nuevas canciones en directo? En tal caso ¿Qué tal han funcionado?
(Guille Mostaza) El último concierto que hicimos fue en el Sonorama, justo antes de decidir el cambio de rumbo. De hecho fue casi al día siguiente de ese concierto cuando lo decidimos. Tocamos un par, pero no tienen nada que ver a cómo quedaron luego en el disco. De hecho, es curioso porque varias personas han reconocido aquellas canciones en el disco y nos han dicho que les gustan más ahora, así que creo que no íbamos desencaminados al cambiar de rumbo.
Hemos terminado. Muchas gracias de nuevo por vuestro tiempo.
(Guille Mostaza) A vosotros, queridos. Un honor estar de nuevo en el Mondo. Agradecido y emocionado.
(Frank Gálvez) Abrazo grande a los lectores de Mondo y a vosotros, por supuesto.
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