En este disco acaba de explotar todo su talento y cuenta con quince temas que van desde su estilo más arraigado hasta otros ritmos más exóticos a los que no nos tiene acostumbrados. En esta entrevista, nos revela algunos entresijos de su última obra.
Durante esta cuarentena hemos visto de todo por parte de los artistas: conciertos en streaming, componiendo canciones sin parar, colaborar con otros artistas por videollamada, hacer canciones solidarias con muchos artistas… pero, ¿qué ha hecho Miguel Campello durante la cuarentena?
Pues un poco de todo eso, de compartir, de contactar, de video-llamarnos y todas esas cosas que necesitamos para sentirnos vivos, para poder sobrellevar toda esta pesadilla que tan de sorpresa nos pilló a todos. Son tiempos de unirnos, aunque sea de manera virtual. Y, al margen de lo virtual, intenté utilizar ese tiempo parado para terminar este disco que acaba de nacer con esos 24 meses de gestación y que a veces las prisas de antes no dejaban que las cosas tuviesen su momento exacto de madurez.
Han sido muchos días encerrado que seguro te han hecho pensar mucho en este último trabajo. ¿Ha afectado el confinamiento a algo del disco? ¿Ha variado algún tema? ¿Alguna modificación en el repertorio? O, incluso, ¿el título de canciones o del propio disco?
Sí, como comentaba antes, el poder darle una vuelta más, incluso tres, ha hecho que cosas que están no hubiesen estado, como alguna que otra colaboración, algunos cachitos de letra… Pero, en definitiva, es que este caso afecto para bien por lo que hablábamos del tiempo necesario para terminar las cosas, aunque en el fondo nunca las doy por terminadas.
"Creo que lo bueno es que las generaciones se junten y aprendan a convivir como convivía la gente de mi barrio"
A pesar de la crisis, has decidido publicarlo en formato digital y físico, pero solo en CD. ¿Por qué no en vinilo? ¿Qué opinas del resurgimiento del vinilo y de los casetes?
Me encanta el resurgimiento de todo lo pasado, de hecho, tengo muchos vinilos y muchos casetes, en este caso ha sido cuestión de que es un disco con 15 canciones y no cabe en un solo vinilo. En el próximo disco tendré que ajustarme al minutaje del vinilo.
Ya van diez años desde el descanso que tomasteis de elbicho y no te ha ido nada mal. Después de esta década tienes cinco álbumes de estudio y un par de directos. ¿Qué balance haces de esta década? ¿En qué punto personal y musical te encuentras?
El balance a nivel personal es muy positivo porque continúo haciendo lo que más me gusta, intento mantener los dos lados de la balanza equilibrados, desde hace mucho tiempo nunca espero nada porque nunca lo esperé, todo lo que ha sido es lo que tenía que ser.
Tu nuevo álbum se titula “5”, antes de salir a la luz justo han salido cinco adelantos y aseguras que es tu número de la suerte ¿Qué cosas te ha dado el cinco para que se convierta en el protagonista de tu último trabajo?
A parte de que es mi quinto disco de estudio en solitario, el cinco era la hora a la que se terminaba el colegio, los viernes que son el número cinco de la semana y todas las semanas y todos los meses… y así todo el rato, libertad entre perros y gatos sin nadie que te diga lo que tienes que aprender.
El último single que lanzaste antes de la publicación del disco fue “Ya está”. Una colaboración con Natos y Waor, con los que ya trabajaste en 2019 con “Gato de callejón”. Y, a finales de agosto, salió “Con lo puesto” otra colaboración con MXRGXN y Sharif (con quién también colaboraste en 2017). A priori, tu estilo y el de los raperos parecen totalmente diferentes, ¿Cómo surgen estas colaboraciones? ¿Te sientes cómodo en una base más underground?
Hace tiempo que vienen juntándose muchos estilos que, por diferentes que parezcan, todos ellos son antiguos y llevan tantos años conviviendo que de una forma natural nos juntamos sin pensar más allá de crear. Yo me crie en un barrio con cuatro esquinas, en cada una de esas esquinas sonaba una música diferente, creo que lo bueno es que las generaciones se junten y aprendan a convivir como convivía la gente de mi barrio.
Hablando de colaboraciones, de tus cuatro discos anteriores, es el que cuenta con más de estas, cuatro. ¿Cómo decides que necesitas a alguien más en una canción y cuál ha sido la colaboración más especial para ti?
Hay canciones que ellas solas reclaman otras voces y otras maneras de ver la propia canción, pero sobre todo la ilusión de compartir esos momentos tan mágicos que se crean cuando compartimos. Todas ellas han sido especiales y todas las que vienen lo serán.
"A veces las prisas de antes no dejaban que las cosas tuviesen su momento exacto de madurez"
Tal y como está el panorama, una persona tan entregada a los directos como tú, ¿tienes pensado hacer una gira de presentación? ¿Cómo piensas afrontar el no poder recibir el aliento del público como hasta ahora?
Pues en verdad, ahora mismo lo de la gira de presentación es todo un sueño. Cosas que eran tan sencillas se han convertido en imposibles y ahora mismo pensar en el futuro es pensar demasiado. Prefiero que llegue el momento en el que esta pesadilla pase y lo recordemos como un mal sueño. De todas formas, será lo que tenga que ser, no por resignación, sino porque de momento no tenemos otra. Pero siempre con esperanza y con muchas ganas de encontrarnos cara a cara subidos en esos escenarios que tanto se echan de menos.
El cierre del disco es “Como el agua caliente”, una canción más arraigada a tu estilo de siempre. ¿Qué nos estás queriendo decir con este final de álbum después de haber pasado por todos los estilos posibles?
Pues es una manera de las 15 maneras que había. Para mí todos los temas podrían estar en cualquier sitio, porque todos tienen su principio y su final y ninguno es más especial que el otro. Todos ellos son un 5 hecho con todo el cariño y con toda la libertad de seguir haciendo letras que se convierten en canciones.
Y, por último, ¿podrías resumir tu último disco en una sola frase?
Libre como perros por las calles.
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