De este modo, mientras Ricardo Ruipérez tocaba su guitarra y hacía las segundas voces, Carlos Tarque compaginaba su portentosa voz principal con pequeños arreglos que fueron de la armónica al cajón flamenco pasando por la pandereta o la segunda guitarra. Decidieron registrar los dos últimos de aquellos conciertos (doblete en la barcelonesa sala Barts) en un nuevo disco en directo que llega ahora en audio y vídeo: “En petit comité” (Warner, 2022). Sobre él responde a nuestras preguntas Carlos Tarque al otro lado del teléfono.
Para poner un poco en contexto este disco, nos remontamos a 2020. Llega la pandemia, el confinamiento… Decidís montar una gira acústica en formato dúo, tú y Ricardo. Me imagino que porque se adaptaba mejor a las características de todo lo que vino…
Carlos Tarque: Así es. Tras el confinamiento, en junio de 2020, se empezó a poder hacer música en directo con todas las restricciones. Una agencia nos ofreció una serie de conciertos con estas características. Cachés muy bajos, pero algo que por lo pronto nos podía hacer currar y tocar, que es lo que queríamos. Reaccionamos bastante rápido, porque este formato ya lo habíamos hecho en muchas ocasiones. Empezando por cuando vamos a hacer promos y tocamos en acústico en algún programa. Y en 2016 hicimos una gira con Mahou que se llamaba “Desarmados” y era precisamente así: Ricardo y yo en el escenario con un cajón flamenco y una guitarra. La novedad de esta gira es que yo he tocado la guitarra en algunos temas, como buenamente he podido. En el 2020 hicimos un montón de conciertos, y seguimos en el 2021.
No teníamos idea de grabarlo, era una situación de paso, intermedia, pero los conciertos eran cada vez más emocionantes y más multitudinarios por suerte, cada vez se podía meter más gente. Ha habido conciertos de 2.000 o 3.000 personas en plazas de toros donde normalmente caben 15.000, pero con la limitación de aforo. En un momento vimos que estaba siendo muy importante, eran grandes conciertos dentro de nuestras limitaciones en el escenario. En un concierto en Nigrán, en Galicia, pensamos que lo teníamos que haber grabado. Un paraje increíble, con árboles, en un pazo en medio de la montaña… Ahí ya decidimos hacer la grabación de este disco, también un poco para constatar nuestro paso por la historia. Ha habido una pandemia y una situación especial, reflejarlo en algo que quedara para siempre, con todo lo agridulce de esto.
“Ha habido una pandemia y una situación especial, reflejarlo en algo que quedara para siempre, con todo lo agridulce”
Una de las limitaciones que comentas es que eráis dos. Tú siempre voz principal, Ricardo siempre guitarra y coros, pero luego en algunas has metido otra guitarra, armónica, cajón… ¿Cómo hicisteis esos arreglos?
Como te comentaba ya lo habíamos hecho en muchas ocasiones. Sí que hubo que hacer unos ensayos especiales, porque este show era más largo. Lo que ya sabíamos, pero hemos corroborado, es que las canciones que funcionan con una guitarra y voz son buenas. Por suerte M-Clan tenemos muchos años de carrera y muchas canciones, o sea que tenemos un saco de la hostia de donde sacar. Pero también sabemos cuáles no pueden dejar de sonar en directo. Y es verdad que con guitarra y voz funcionan a un nivel que a la gente le gustaba hasta más. No es que los conciertos con banda sean más brillantes, son diferentes, cada cosa tiene su punto especial. A la gente le llegaban mucho temas como “Miedo” o “Roto por dentro” con guitarra y voz, algo así tan escueto. Esa desnudez es como una canción nace, y eso tiene un punto que a lo mejor con toda la banda no se consigue. Y viceversa, está claro que la grandiosidad de una banda eléctrica y potente sonando en directo no se consigue con una guitarra acústica. Pero nos dimos cuenta de que lo que mandan son las canciones, y por suerte nosotros tenemos muchas.
De todas ellas elegisteis dieciséis para grabar el disco en Barcelona, que además es donde empezó la gira. ¿Se cerraba así un ciclo?
Nunca lo había pensado, pero puede ser. Lo que sí que nos dimos cuenta es que a Barcelona le debíamos algo, es una ciudad importante para M-Clan. De hecho cuando empezamos la gente pensaba que éramos de Barcelona, porque precisamente Daniel López de Mondo Sonoro por aquel entonces hizo de manager, de ayudante y de amigo. Nuestro teléfono de contacto era de Barcelona y teníamos un vínculo especial con esa ciudad, yo he vivido también allí muchos años. Se barajó también Murcia, pero justo tocamos en la Sala Barts unos meses antes y nos encantó, yo diría que es una de las mejores de Europa. Decidimos hacerlo en Barna y fue un súper acierto.
Lo ha grabado la productora Lasdelcine, ¿qué podremos ver en el vídeo?
Es el concierto, básicamente. Lasdelcine son unas amigas desde hace muchos años con las que he trabajado tanto con Tarque en solitario como con M-Clan. Son unas chicas de Granada que viven en Madrid y que son como nuestras primas, tenemos un entendimiento muy bonito con ellas, que eso es a veces más importante que el renombre y tal. Es bonito trabajar con alguien a quien le puedes decir todo.
Han grabado el concierto con mucha sensibilidad, es un concierto de ver. También es un disco que se escucha, pero viéndolo tienes otra sensación, porque precisamente esa austeridad de medios, una guitarra y una voz en el escenario, también te permite que los planos sean más cortos y que haya una intensidad especial. Está muy bien grabado y muy bien montado, lo va a disfrutar mucho la gente.
“Me imagino como fan el hecho de que el grupo que te gusta venga a tocar a tu casa, tiene que ser alucinante”
¿Y cómo lo va a poder ver la gente? Saldrá en físico en CD y DVD pero, ¿en digital lo vais a subir entero, a vuestro canal de YouTube…?
No lo sé, supongo que sí. Yo creo que como se hace siempre, por lo menos los old school como nosotros: sacaremos el disco para que la gente lo pueda disfrutar comprándoselo. Es lo suyo, ya lo pondrá la gente en YouTube. No sé si luego la compañía tiene esa idea, supongo que sí, cuando pase un tiempo. Hemos ido haciendo unos adelantos, y lo merecido es que la gente que compre el disco pueda disfrutarlo antes que los que no se lo compran. Qué quieres que te diga, para eso está la exclusividad. Y vamos a hacer un concurso dentro de la salida del disco, entre los primeros que lo hayan reservado les puede tocar un concierto que vamos a hacer a su casa con estas características. Seis o siete canciones a casa de algún comprador que le haya tocado el premio. Es una idea muy divertida.
Lo había leído. ¿Vais a ir físicamente a casa del ganador? Yo pensaba que iba a ser por streaming…
No, qué cojones, si no, ¿qué gracia tiene? Voy, llamo al timbre de tu casa y subimos. La idea era hacerla en algún sitio especial, y dijimos: la casa del comprador. Ésa es la gracia, digo yo. No sé si es una gran idea, pero no se ha hecho antes, al menos que yo sepa. Nos parece divertida y guay. Me imagino como fan el hecho de que el grupo que te gusta venga a tocar a tu casa, tiene que ser alucinante. Es otro de los alicientes de la salida del disco. Estamos contentos dentro de que el disco es un disco recopilatorio, en directo, no hay nada nuevo. Pero sí que hay cosas y sensaciones nuevas.
El primer adelanto es “Miedo”, ¿una declaración de intenciones?
“Miedo” es una de las mejores canciones de M-Clan. Durante la pandemia le hicimos un vídeo con los sanitarios, todo esto que casi se nos ha olvidado de todo lo que hemos pasado. Y tuvo mucho valor, porque la canción habla del miedo, que es algo que todo el mundo tenía, para bien y para mal. Cobró un sentido especial. Y tocada de una forma tan austera pues también tiene una profundidad muy bonita, por eso fue el primer single.
Mezcláis la versión de “Maggie may” de Rob Stewart con la del “Te quiero” de Andrés Calamaro. También grabasteis en su día la versión del “Me estás atrapando otra vez” de Los Rodríguez…
Somos fans de Calamaro y de Los Rodríguez, cómo no. Y de Ariel Rot y de toda la saga argentino-española. Es un juego que hacíamos siempre en los conciertos, y lo metimos también en el disco, claro.
“Sin ensayar” dices al empezar a tocar “Quédate a dormir”. ¿Fue improvisada?
No, no fue improvisada. Son dos noches, de las cuales evidentemente solo se queda la toma de una o de otra noche, no todas las canciones son de una. La primera noche hubo una cuenta con el público que no nos salió bien o algo así, entonces la segunda noche creo que quedó mejor por esto que te digo.
Y ahora que parece que hemos recuperado la normalidad, ¿qué es lo que viene para M-Clan? ¿Seguiréis en formato acústico, volvéis al eléctrico con la banda…?
Acabamos de empezar a girar con la banda eléctrica, que hacía cinco años que no lo hacíamos y está sonando de la hostia. Hemos hecho tres conciertos, dos en Cataluña y uno en Jávea, al lado de mi casa, y ya a partir del 17 de junio pues tenemos conciertos hasta octubre. Ésa es la idea, tocar en directo. También darle cabida a los músicos que nos han acompañado siempre, que no han podido tocar durante este tiempo, e ir para adelante. No hay idea de hacer un disco nuevo por ahora, ya sale éste en directo, y yo estoy poco a poco trabajando en lo que será el nuevo disco en solitario de Tarque.
Tú como Tarque, Ricardo también sacó un disco como Ruipérez, o sea que vais a seguir compaginando ambas facetas…
Yo sí, tengo muchas ganas de hacer este disco, porque ahora mismo es un proyecto que prevalece casi sobre M-Clan, voy compaginando los dos y me parece interesante. Una cosa me da más ganas de hacer la otra, porque justamente en la variedad está el gusto. Estoy currando en él, saldrá en 2023, voy poco a poco porque trabajo con Carlos Raya, él está muy liado y yo también y no tenemos prisa, pero va a ser un disco muy potente.
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