Estoy sentado en la amplia recepción de las oficinas de BMG-Ariola en Barcelona leyendo el periódico cuando veo llegar a Julieta Venegas acompañada por alguien de la discográfica. Me recibe con una sonrisa amable y, como suele ocurrir cuando te encuentras cara a cara con un artista, me resulta algo más bajita de lo que imaginaba, aunque también más simpática y dicharachera. Charlamos y sus ganas de vivir hacen brillar sus palabras. Al finalizar la entrevista me comenta que, cuando esta en nuestro país, hace todo lo posible con hacerse con un ejemplar de nuestra revista. Le encanta todo lo que ocurre por aquí, al otro lado del charco, y siente cierta envidia por la cantidad de festivales bien nutridos en grupos europeos con los que contamos y que son casi imposible de ver en su México natal. Y es que la relación de Julieta Venegas con España es profunda. Diría que se trata de una amor no correspondido. Una tendencia que, por justicia y auténtico clamor, debería cambiar de forma radical con “Si”, su nuevo trabajo. Si nos atenemos a lo que ha sucedido en México es una apuesta segura.
" Mi punto de vista era como más escéptico, más irónico, pero para este disco me puse más flojita" |
Su tercer largo es el nuevo fenómeno de la temporada, arrasando en las listas de ventas de su país (a la hora de escribir este artículo “Si” es número uno en México y lleva vendidas más de 100.000 copias, lo cual es una barbaridad en un país en el que las copias piratas son el pan nuestro de cada día). Y todo gracias al irresistible encanto de unas canciones que rezuman sencillez bajo un halo romántico y picarón no exento de cierta ternura y mucha calidez. Con una voz más descarada, libre de timideces y tristezas, es éste su disco con más hits y el de mayor potencial comercial, todo ello sin dejar a un lado su personalidad y duende. Sus canciones no tienen fecha de caducidad ni límite de edad o condicional social. ¿Estaremos ante el nuevo "Clandestino" -Manu Chao-? “Estoy muy sorprendida y creo que todavía no me he puesto a pensar en eso que dices de que podría ser el nuevo fenómeno de la temporada. Yo siempre he presentado los discos como un trabajo muy personal, lo cual no significa que tenga que convertirse en un éxito comercial. De repente parece que haya tocado un punto ahí en lo mío que coincidió en la manera en como piensan también los demás y que ha generado una conexión increíble. Ahora es el momento en el que quería reflejar alegría y parece que la gente respondió". "Si" es un álbum que toca la fibra y que sorprende porque se aleja mucho de la senda trazada con anterioridad por una artista que se movía en terrenos mucho más sombríos. “Yo antes venía haciendo discos que tenían que ver con ser más introvertida y mi punto de vista siempre era como más escéptico, más irónico, pero para este disco me puse más flojita. Me siento más suave y quería reflejar eso y lo lindo es que conseguí conectar con la gente, como por ejemplo en ´Andar conmigo´, que es una canción de amor que es completamente universal".
"No sé separar mi lado artístico del personal. Para mí es lo mismo" |
Es precisamente este single el que se ha convertido en ariete con el que derribar las puertas que hasta ahora no se le habían abierto. Su prestigio ha ido aumentando en la prensa especializada a golpe de colaboración o banda sonora (“Amores perros”, “Asesino en serio”, “María llena eres de gracia”….), trabajos en los que la chispa del entusiasmo cándido que proporciona el estar enamorado brillaba por su ausencia. Tras su sonada relación con Nacho Mastretta, un nuevo amor le proporcionará el entusiasmo desplegado en “Si” con lo que el proceso de transformación está servido. “Tengo un muso por ahí que me inspiró varias canciones. Aunque si lo pienso bien no fue sólo uno, porque hay varias que son como más de coqueteo y otras más de amor, canciones de querer estar con alguien. Y es que estaba viviendo eso y tenía ganas de contarlo, mientras que antes, aunque tuviera una relación, explicaba el lado contrario. Sin embargo esta vez pensé. ¿por qué no cuento lo que estoy viviendo? Es demasiado bonito como para no contarlo y lo quiero reflejar. Y es curioso porque es algo que me pasó en plena gira de ´Bueninvento´; mientras cantaba esas canciones no podía dejar de pensar que no me sentía nada identificada con ellas y que quería explicar en qué situación me encontraba ahora. Eso es algo que me surge de forma natural, no sé separar mi lado artístico del personal. Para mí es lo mismo”. Una implicación total con su música que surge de lo más hondo de sí misma, algo que debería sucederle a todos los artistas que se precien y que, en su caso, no ha hecho más que evolucionar hasta alcanzar un disco que ha sorprendido a muchos. Julieta Venegas no sólo le ha soltado el pelo a sus emociones si no que ha dejado atrás las grandes producciones con Gustavo Santaolalla (Café Tacuba, Molotov, Maldita Vecindad…) en la ciudad de Los Angeles, con músicos de sesión de la talla de Joe Gore (Tom Waits, PJ Harvey), Joey Waronker (Beck, REM) y Fernando Saunders (Lou Reed), para confeccionar un disco hogareño de bajo presupuesto y percusiones electrónicas. “Eso es algo que ahora veo como un acierto, porque jugamos con los elementos que teníamos y sabíamos que íbamos a hacer un buen disco pero es verdad que para el anterior teníamos como el triple de presupuesto para hacerlo". ¿Consecuencia de la crisis? "Claro y consecuencia de que hice unos discos muy caros que no fueron comerciales y precisamente éste, que ha sido el más barato, está siendo un éxito comercial. Es algo como muy chistoso y que me dejó una lección muy grande. El hecho de no haber tenido presupuesto ha funcionado a nuestro favor porque nos hizo grabar de una manera muy casera con todos los que estamos en el disco: Coti (Sorokin), que es el productor, su hermano Matías, que es el guitarrista, Adrián (Shinoff, teclados y programación) y yo en la parte de España. Y en la parte argentina estábamos Cachorro (López), bajista y productor, y Juan Blas, que fue el que puso el lado de la programación. Fue precisamente jugar con pocos elementos lo que nos hizo concentrarnos en la canción. Estaba claro que si teníamos buenas canciones no importaba que no tuviéramos diez músicos para meter cincuenta guitarras, como sucedió en el disco anterior en el que si había un montón de músicos a lo que adoro y sé que hubieran trabajado también ahora aunque hubiera poco presupuesto, pero tal y como pasó creo que todo cayó en su lugar. Para mí, Coti fue como un elemento básico y fue quien cuajó lo que yo venía buscando a la hora de trabajar y sentarnos a componer juntos fue como que se me abrió todo". Llegados a este punto, déjenme que les cuente cómo se fraguó “Si”. Julieta Venegas tiene unas cuantas composiciones en su grabadora digital y está dando voces entre sus amigos en busca de un productor de estilo. La noticia le llega a su manager en Argentina que le presenta a Coti Sorokin, músico argentino que acaba de editar es nuestro país su segundo álbum en solitario “Canciones para llevar”. Julieta tiene una corazonada y, acostumbrada como está a trabajar con otros artistas (su lista de colaboraciones incluyen a gente tan diversa como Pedro Guerra, Los Tigres del Norte, Pau Donés, Enrique Bunbury, Café Tacuba…), quiere una visión exterior de lo grabado y a la vez una implicación sin cortapisas. “Es cierto, quería ver que es lo que pasaba, pero tampoco quería sentarme con cualquiera. Sin embargo, cuando conocí a Coti me dio muy buena espina y yo siempre me dejo llevar por las intuiciones, así que me vine a Madrid y nos pusimos a tr
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.