Linkin Park no han tardado mucho tiempo en grabar nuevo disco, pero al mismo tiempo no quieren dejar nada al azar en su carrera. No parecen dispuestos a dejar la cresta de la ola con “The Hunting Party”, su sexta acometida discográfica y un nuevo giro en su propuesta. “La edición de un disco nuevo siempre es excitante. Como músico, te lo planteas como crear una pieza de arte. Esta vez hemos estado realmente inspirados y hemos creado una obra que solamente nosotros podíamos hacer. Diría que era el momento ideal para grabar este tipo de disco”, comenta Chester Bennington, cantante y carismático líder de la banda californiana. “Nunca estamos asustados a la hora de enfrentarnos al nuevo material. No nos importa pensar en algo concreto o con un estilo más definido. Esta vez el foco se centraba en hacer algo con melodía, más pop e incluso más bailable, pero esa idea cambió el verano pasado. Nos dimos cuenta de que las canciones que estábamos escribiendo requerían un sonido más rock, más agresivo. Las demos originales ya iban por esa onda”.
Bennington se muestra muy seguro de lo que apunta, mostrando en todo momento cierto entusiasmo. “Hemos demostrado que podemos hacer cualquier clase de disco, el que nosotros queramos. En esta ocasión se nos planteaba esta posibilidad y no la hemos echado a perder. La verdad es que ahora mismo no hay mucha gente que se pueda permitir hacer un disco de estas características. ‘The Hunting Party’ es la versión hard rock de Linkin Park, la versión más joven y más salvaje de nosotros mismos”.
Por las palabras del vocalista queda claro que la banda tiene muy claro lo que busca, y en esta ocasión era algo que se alejara un punto del rap y de la electrónica. “Estamos imbuidos por la escena alternativa, por el pop bailable, y sin embargo no hay muchos grupos que se preocupen por ofrecer otras propuestas, como por ejemplo algo más rock. Cuando me doy cuenta en casa, nunca me pongo a cantar esas canciones, con lo que me doy cuenta de que se necesitan bandas que suenen más rock. Hacer música rock es lo más parecido a estar dentro de una película de acción”.
Todo ello lleva a pensar en que Linkin Park se han tomado su tiempo para saber hacia dónde dirigir su actual sonido. “En su día, grabamos tres discos muy rápido, y esta vez pensamos en no hacerlo de ese modo. La banda está en un momento muy saludable, así que no había prisas, ni presión. Teníamos tiempo y nos pareció necesario tomarnos todo con calma. Además todos estábamos en sintonía sobre lo que queríamos hacer: un disco más furioso. No se trataba de hacer un disco hardcore o thrash metal, pero teníamos claro que no había espacio para baladas en clave acústica. Este disco de Linkin Park tenía que ser la más increíblemente heavy dentro de la escena más alternativa. No somos una banda de metal, no queremos compararnos con nadie, quizás podríamos definirnos como una banda de punk progresivo”.
"Hemos demostrado que podemos hacer cualquier clase de disco, el que nosotros queramos."
En el álbum participan nombres del calibre del rapero Rakim, Tom Morello (Rage Against The Machine), Page Hamilton (Helmet) y Daron Malakian (System Of A Down, Scars Of Broadway). “Fue fácil convencerles. Les llamamos o les escribimos esperándo una respuesta afirmativa. Queríamos hacer las mejores canciones posibles y les queríamos como acompañantes. Con Page Hamilton, por ejemplo, fue francamente sencillo. Desde los primeros acordes ya sabíamos hacia dónde llevar la canción. Nos entendimos a la primera y fue fantástico porque para nosotros era uno de nuestros héroes. De todas formas, podría decirte lo mismo del resto”.
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