Hablamos con Pau Lobo (voz) y Alberto Limiñana (bajo) sobre el estreno de su tercer disco y del momento que vive la banda tras ocho años de carrera.
La palabra “fusión” define bastante bien vuestro proyecto musical. En vuestros dos trabajos anteriores ya combinabais ritmos latinos con música electrónica, pero en este “Alegre pero peligroso”habéis incorporado también sonoridades como el trap o el hip hop. ¿Cómo ha surgido la decisión? ¿Sentís que como banda todavía experimentáis con vuestra música?
(Pau Lobo) Nosotros desde el principio mezclamos música latina con la electrónica que estaba sonando en ese momento. En los anteriores discos el drum’n’bass era uno de los estilos de electrónica que más sonaba en ese momento y ahora de repente suena más trap o hip hop. Tenemos la baza de que nos podemos adaptar al sonido actual, somos curiosos y nos gusta jugar con la música y ver hasta dónde podemos llegar, pero siempre llevándolo al nuestro terreno.
(Alberto Limiñana) Desde siempre nos ha gustado ese juego de la perspectiva, analizar un poco el contexto musical actual y llevarlo a nuestro terreno. Es cierto que nos acercamos a sonoridades que están en auge, pero lo hacemos siempre a nuestra manera y no con una música “enclichada” en sí misma. También hemos cambiado un poco toda nuestra sonoridad, porque son ocho años de carrera y la “caña” frenética la sustituimos por contundencia, por un sonido más cuidado… Es una música más vacía, menos cargada.
Seguís experimentando, pero siguiendo una línea de creación propia…
(Alberto Limiñana) Sí, nos gusta experimentar y jugar con los sonidos.
(Pau Lobo) Por ejemplo, sí que hay elementos trap, pero no encontrarás ningún trap en sí, siempre lo mezclamos con elementos “tomaseros”.
"Nos ha costado siempre un montón hacer música, porque no existen referentes directos de nuestro estilo".
¿De dónde proviene ese interés por adoptar la sonoridad latina como base de vuestra música?
(Pau Lobo) La banda se formó en un momento en que la música del panorama que nos rodeaba seguía un mismo estilo, todas las bandas tenían un sonido similar. Nosotros tuvimos la necesidad y la curiosidad de buscar elementos que no estuvieran sonando en ese momento –hablo de 2012 o 2013– para refrescar un poco los oídos a la gente.
(Alberto Limiñana) No estamos criticando la escena como tal, en el sentido de “no vamos a hacer lo que hace todo el mundo”, sino que surgió como decisión propia. Queríamos hacer algo nuevo también para nosotros. De hecho, nos ha costado siempre un montón hacer música porque no existen referentes directos de nuestro estilo. Entonces ahí entra la probeta, el laboratorio y los dolores de cabeza…
(Pau Lobo) Sí, somos una banda de laboratorio.
(Alberto Limiñana) Los miembros de La Sra. Tomasa también somos muy distintos y de hecho si compartiéramos el Spotify… Parece mentira que llevemos ocho años tocando juntos, porque cada uno se va a su mundo y eso mola. Buscamos las intersecciones y es muy guay.
(Pau Lobo) Yo creo que en este disco se notan mucho los ocho años de carrera y como hemos crecido juntos y cada vez nos entendemos más. De algún modo ha sido un poco más fácil que los anteriores. Ha salido más solo.
A través de vuestras redes sociales habéis contado que, en el último año habéis tenido que superar “un bache que os han puesto delante”. ¿Cuál fue esta situación tan complicada para la banda?
(Pau Lobo) El disco se llama “Alegre pero peligroso”. La parte alegre es la que ha definido siempre a La Sra. Tomasa y la peligrosa es la que te encuentras en el camino. A veces te ponen trabas.
(Alberto Limiñana) La misma pregunta que nos hacéis, nos la han hecho amigos y hemos decidido decir “ya lo hemos contado” y a lo mejor algún día hablamos de esta situación entre risas, pero de momento estamos centrados en un disco increíble y en seguir para adelante.
¿Precisamente es eso lo que queréis transmitir con la frase “Alegre pero peligroso”?
(Alberto Limiñana) La parte que la gente ve de la música es guay, pero apostar por la música también es caminar sobre un terreno pantanoso. Es como decir “aquí estamos en este camino, alegre pero peligroso”.
En “Para ti”, el tema que abre el álbum, habláis de “una canción que te diga que no estás solo”. ¿Creéis que ese es el papel de vuestra música?
(Pau Lobo) Totalmente. Yo creo que cada momento de la vida tiene alguna canción. Siempre hay una manera de acompañar cualquier situación, sea alegre o peligrosa, con alguna canción o con algún disco. En el caso de “Para ti” hay un coro que dice “Ahora ella baila, baila con otras almas, pero yo la querré siempre”. Ahí está hablando de la música en sí, que la haces y es muy tuya, pero una vez la has sacado ya no es tuya. Baila con otra gente, pero aún así es como un hijito que se ha ido y al que seguirás queriendo. Se trata de hacer música tanto para mí, como para curar a otra gente.
(Alberto Limiñana) También hablamos del dolor como una especie de acompañamiento a todos nosotros, que hemos tenido nuestras cosas y ha salido hablar de eso. Como siempre en nuestra música lo hemos hecho de una manera muy escueta, sin buscar la rima perfecta, sin ser especialmente elocuentes, sino de una manera muy natural.
En el álbum participan artistas como Bejo, la cantante belga Coely y Stonebwoy, referente del afrobeat procedente de Ghana. ¿Cómo han surgido estas colaboraciones?
(Pau Lobo) Coely es una artista que podríamos decir que viene de esa parte más mainstream y más urbana. En Londres esa música está muy en auge desde hace unos años y era una manera de acercarnos ahí. Salió a través de nuestro manager y muy bien. Bejo representa la parte más desenfadada del rap canario que también continúa muy presente. En el caso de Stonebwoy es un gran artista de Ghana que representa en el disco la parte más afrobeat. Era como agarrarse a los tres elementos que están sonando mucho y sintetizarlos, pero siempre llevándolos a nuestro terreno. Es decir, colaborar con Coely, pero no hacerlo con un tema de hip hop ni de trap, sino un tema de “Tomasa style”.
(Alberto Limiñana) Para contactar con Coely sí que rascamos más, ya que pensamos que era una artista que molaba mucho, que le daba mil patadas a otros (con todo el respeto) y que tiene un nivelazo increíble. Con Bejo, como con muchas cosas en el disco, hay un grado de accidente de “vamos a tirarle a ese” a ver qué pasa. Es un tío muy desenfadado y nos dijo que no era una sonoridad a la que estaba acostumbrado, pero que lo haría y suena increíble. Y en el caso de Stonebwoy fue enviarle el tema y a los tres días ya nos había contestado. Le encantó y nos envió la “colabo” grabada del tirón.
(Pau Lobo) De algún modo también buscamos la internacionalización en las colaboraciones. Somos una banda que podemos funcionar mucho en otros países y acercarnos a otros artistas también nos resulta interesante.
"En la hora y media de un bolo queremos que la gente deje los problemas a parte. Siempre hemos sido festivos y positivos".
¿Con quién os gustaría colaborar en un futuro?
(Pau Lobo) La lista de colaboraciones era muy larga cuando planteamos ¿con quién nos molaría tocar? Yo creo que molar, podría molar con cualquier artista, pero depende de las canciones y de la situación puedes colaborar con uno o con otro. Residente me fliparía. Siempre lo he pensado.
(Alberto Limiñana) Residente tiene una línea filosófica que nos mola mucho. Hace lo que le da absolutamente la gana. El mayor objetivo de un artista es acabar haciendo lo que te da la gana y tener éxito.
En “Nuestra clave”, vuestro segundo disco, muchas de las canciones hablaban de amor o, en su contra, desamor. En este nuevo trabajo las letras salen de esa temática y tienen un punto más social o reflexivo.
(Pau Lobo) En el anterior disco nos fijamos mucho en las letras, en qué decir y cómo para que quedase bonito. En este hemos decidido hablar de lo que sabemos, de lo que nos pasa a nosotros y sin ir más allá, con letras del día a día que cualquier persona puede hacérselas suyas. Tampoco lo hemos buscado, en ese momento más de uno estábamos en un período de desamor y ahora no estamos así. Por ejemplo, Santi (voz) y yo nos conocemos desde párvulos, hemos crecido juntos y hablamos mucho del barrio. Un día salió el tema, ¿por qué no hacemos un videoclip en nuestro barrio, con nuestra gente?
Por ejemplo, en los breves cuarenta y tres segundos de “Estado mental” reflexionáis sobre la pobreza mental. ¿Creéis que vivimos en una época de pobreza espiritual y cultural?
(Pau Lobo) Mucha gente va con la cabeza para abajo, todo el día pensando en el dinero y sin prestar atención a lo demás. Si tienes vida, amigos, familia... puedes ser feliz.
(Alberto Limiñana)¿Cuánta gente no tiene una pobreza material y sí mental, cuyas preocupaciones hacen que su visión sea opaca? Es una época de pobreza mental y espiritual.
El tema “El olivo” es también la lectura de un poema más que un tema cantado. ¿Qué significado tiene para vosotros? ¿Quién lo lee?
(Alberto Limiñana) Es una carta que me envió mi madre en 2013, una época en la que estaba en la mierda. Cambiamos cositas, para que no fuese dirigida a alguien en concreto, pero básicamente eso. Y la que lo recita es mi madre, ¡en un audio de WhatsApp! Está todo grabado de una toma, todo crudo.
(Pau Lobo) La primera vez que lo escuché, ya producido como tema, me emocioné mucho. El saber que no es un palique repensado, que es la madre de Alberto hablando con su hijo...
(Alberto Limiñana) La frase final es el culmen poético. Para todo el mundo hay cosas buenas, pero tenemos la responsabilidad de devolverlas. Es un mensaje muy fuerte. No es solo una caricia, es un mensaje con un deber: todo lo bueno que te pasa lo tienes que devolver a la vida y a la gente.
"Cuando sales de España te das cuenta de que aquí las cosas funcionan de una manera, pero que hay otras maneras de funcionar".
Aún así, los ritmos latinos y el espíritu bailable y fiestero de vuestra música sigue muy presente en esta nueva entrega. ¿Es importante para vosotros compatibilizar ambas facetas de la música?
(Pau Lobo) En la hora y media de un bolo queremos que la gente deje los problemas a parte. Siempre hemos sido festivos y positivos, tal vez en este disco se nota menos, pero está. Es el “alegre pero peligroso”.
Antes de publicar el disco habéis estado haciendo una serie de Live Sessions con colaboraciones como Desiree Diouf, Sr. Wilson, Adala o The Sey Sisters entre otros y que también llevasteis a formato concierto. Esta propuesta ha recibido muy buena acogida en YouTube, generando más de medio millón de visitas. ¿Cómo ha surgido y se ha desarrollado este proyecto?
(Alberto Limiñana) Fue un accidente (ríe). Era un regalo de Navidad del 2017, elegimos “Ella”, una canción con harmonía salsera. En un principio, lo íbamos a grabar con otra persona, pero falló y dijimos “vamos a hacerlo con Ahyvin, que es una colega cercana” y tuvo buena acogida, así que seguimos.
(Pau Lobo) Al final, casi todo el disco de “Nuestra clave” lo grabamos en Live Sessions. Empezamos a recibir mensajes del público en el que nos decían que querían ver y oír eso en directo. En un primer momento pensamos “uf, si son trece músicos en un escenario..., pero la gente lo quiere y nosotros nos lo vamos a gozar increíblemente, ¡así que vamos a hacerlo!” Hicimos cuatro sold out y la sensación, tanto nuestra, como de los colaboradores y el público fue de piel de gallina constante. Este año hemos vuelto a programarlo, con cinco pases, todo sold out. Lo que mola del proyecto es colectivizar La Sra. Tomasa con El Colectivo. La unión hace la fuerza y en Barcelona hay muchísimos artistas que valen la pena.
(Alberto Limiñana) Ha salido redondo. Hablamos de los artistas, pero los técnicos también geniales. El concepto de tocar un concierto a ras de suelo, eliminando la tarima, todos juntos... a nivel técnico es una locura.
De momento tenéis previstos conciertos de presentación del nuevo disco, en Barcelona, Madrid y Zaragoza a finales de marzo. ¿Cómo afrontáis estos y los demás conciertos de la nueva gira? ¿Tenéis ganas de volver a subir al escenario?
(Pau Lobo) Llevamos tiempo sin tocar en el escenario y lo necesitamos para vivir, de algún modo. Tengo muchas ganas de volver a la carretera. De momento hemos anunciado estos tres conciertos, pero iremos desvelando fechas poco a poco.
Sois uno de los grupos de Barcelona con más proyección internacional, con más de ocho años de carrera y conciertos en festivales europeos de referencia como Low Lands de Holanda, el Pole Pole de Bélgica o el Sziget Festival de Hungría. ¿Tenéis planes de visitar otros países en esta nueva etapa?
(Pau Lobo) Hemos estado en diez países ya. Cuando sales de España te das cuenta de que aquí las cosas funcionan de una manera, pero que hay otras maneras de funcionar. Cada vez que vamos a otro país alucinamos con el trato, la calidad del sonido, las luces, los otros grupos... El público es diferente también, aquí si no conoces al grupo normalmente no asistes al concierto, pero en el resto de Europa sí.
¿Cómo afectarán los nuevos estilos que habéis introducido en “Alegre pero peligroso” a la sonoridad de los directos?
(Alberto Limiñana) Nuestro objetivo es internacionalizar el directo, coger las canciones y llevarlas a bandas que tengan un sonido contundente y electrónico, pero también que esté tocado. Exactamente no sabemos como acabará siendo, porque somos unos locos de la cabeza y cambiamos hasta el último momento.
(Pau Lobo) El directo va a ser muy cañero.
¿Cómo os sentís ante el estreno de vuestro tercer álbum después de ocho años de carrera?
(Pau Lobo) Alegres, pero peligrosos (risas). Tenemos ganas de directos y de gira, de ir los doce como una familia, porque será muy divertido… y peligroso.
(Alberto Limiñana) Es el disco del que más orgullosos estamos, así que será muy divertido defenderlo en directo.
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