Sois una banda bastante novel así que, por favor, comencemos ubicando al oyente ¿Cómo, cuándo y dónde surgió este proyecto?
El proyecto se desarrolló durante el confinamiento duro de la pandemia. Nico y Lucas nos conocimos en un evento del Colectivo SALÒ en Carabanchel y poco después empezamos a hablar de montar algo juntos (llevábamos un tiempo buscando gente), semanas antes de que nos encerraran. Durante los meses en casa aprovechamos para trabajar la idea del proyecto a distancia, compartiendo ideas de canciones, y en cuanto empezó la desescalada y empezamos a poder salir y juntarnos comenzamos a buscar a alguien que quisiera sumarse. Rubén trabajaba en el estudio de foto en el que revelaba Lucas y un día, charlando, salió el tema de la banda y se subió al carro al momento. Juan apareció al poco tiempo: acababa de volver a vivir a Madrid después de unos años fuera y andaba buscando gente con la que tocar.
Pregunta tópica pero que me apetece hacer ¿Por qué el nombre de La Paloma?
‘La Paloma’ es un concepto muy repetido en Tetuán, el barrio de Madrid de donde es Nico, donde vivimos algunos de nosotros, y donde tenemos el local de ensayo. Hay pescaderías, bares, institutos e incluso las fiestas del barrio llevan ese nombre. Lucas es de un barrio de Gran Canaria que se llama Maspalomas, y cuando empezamos a darle vueltas al nombre del Proyecto, de repente dimos con La Paloma y todo cobró sentido al momento.
“La narrativa del disco tiene contexto generacional y también una carga personal muy fuerte”
¿Qué tipo de disco buscabais hacer con ‘Todavía no’? ¿Cómo queríais que luciera el álbum?
Queríamos conseguir una producción ambiciosa y calidad de sonido; unas canciones fieles al momento musical (de composición, gustos e intereses) en el que estábamos en el momento de grabarlo; y una energía que fuera fiel a los directos sin tener que grabar el disco en directo. En cuanto a esto último, apenas hemos metido en el disco elementos que no pudiéramos reproducir en concierto, como teclados o arreglos locos.
En cuanto a las letras ¿Qué tipo de narrativa queréis que protagonice vuestras canciones? ¿Diríais que vuestras canciones son optimistas, pesimistas o realistas?
Creemos que, ante todo, son canciones sinceras. En cuanto a la forma, hay de todo. Desde canciones más directas a otras con un significado más rebuscado o incluso sin significado concreto; y en cuanto a contenido, más de lo mismo. El disco tiene una narrativa muy variada y consideramos que, aparte de tener un contexto generacional, muchas veces inevitable, lleva una carga personal muy fuerte. Hablamos nosotros de lo que nos está pasando (nos gusta / no nos gusta / nos molesta / nos preocupa / etc) a nosotros, a nuestros amigos o a los que no son nuestros amigos. No estamos hablando de nada nuevo y tampoco es esa nuestra intención, pero le damos mucha importancia a cómo decimos lo que queremos decir.
Veo cierta inmediatez o urgencia en vuestra música ¿Perseguís algún tipo de trascendencia o apuntáis al impacto del aquí y ahora?
Componemos constantemente. Es algo que no dejamos de hacer prácticamente nunca aunque estemos girando, de vacaciones o en periodos de ensayo. Es la forma en la que entendemos la banda y es una de las razones por la que la tenemos: para a hacer canciones. Esto hace que siempre tengamos temas en los que trabajar para ir cerrando, y los conjuntos de estas canciones van tomando forma poco a poco. Vas hilando y de repente tienes un disco o un EP que funciona y es coherente. La trascendencia no es algo que nos atormente ni mucho menos, ni tampoco tenemos una filosofía de Carpe Diem. Andamos a caballo entre disfrutar todo lo que nos pasa y pensar en lo siguiente, en evolucionar.
¿Cuáles son los principales referentes de La Paloma cuando componéis vuestras canciones?
Hasta ahora no hemos trabajado con referentes directos a la hora de componer. Intentamos exprimir al máximo el bagaje musical de los cuatro, que tiene sus puntos de encuentro pero es diferente de uno a otro. A la hora de trabajar las canciones en el local de ensayo intentamos que todo surja de la forma más natural posible, tocando y lanzando ideas hasta que poco a poco las canciones van tomando forma y se van ordenando y estructurando. Evidentemente nuestras referencias y nuestros gustos están presentes implícitamente, pero intentamos respetar los rasgos estilísticos de cada uno de nosotros porque creemos que de ahí es de donde puede salir la identidad y el carácter personal de la banda.
Lo cierto es que ‘Todavía no’ incluye diferentes intensidades, motivadas por unas preferencias que van desde el shoegaze hasta el pop pasando por el noise ¿De dónde viene ese amplio abanico estilístico? ¿Era una prioridad hacer un disco que, de algún modo, reflejase cierta diversidad?
Nuestra idea es hacer canciones de la forma más sincera que podamos. Los arreglos, el sonido y la producción sirven a las canciones. El orden de los temas sirven al disco. Trabajamos la canción de forma independiente, aportando la intensidad y el enfoque que consideramos que funciona mejor. Hemos dedicado mucho tiempo a pulir las canciones tanto a nivel compositivo como a nivel de sonido y producción. Una vez tuvimos los once temas, empezamos a crear una narrativa para ordenarlas de la mejor forma posible. Le dimos mil vueltas y al final dimos con la que consideramos mejor experiencia de escucha. O, por lo menos, la que más sentido tenía para nosotros y la que más nos gustaba.
El disco se abre con “Sigo aquí”, toda una declaración de intenciones y uno de los numerosos singles en potencia que incluye el disco. Es un tema que sugiere ecos a Dinosaur Jr y también a Nueva Vulcano.
Es una de las primeras canciones que hicimos de cara al disco. Es un tema que salió de forma rápida, en una tarde, a partir de unos acordes de guitarra de Lucas y una frase de Nico, pero la estuvimos trabajando durante casi un año. Es una canción muy directa, sencilla y visceral y queríamos que mantuviera esa esencia de rabia contenida, por lo que nos centramos mucho en perfeccionar la estructura y las transiciones sin tocar demasiado la intención inicial del tema. Como es una de las primeras canciones que hicimos, tuvimos la oportunidad de tocarla mucho en directo, lo que hizo que fuera cambiando muy poco a poco. Esto nos dio la oportunidad de pulirla al máximo. Líricamente gira en torno a un concepto muy sencillo, uno que nos pareció lo suficientemente potente como para que abriera el disco y resumiera de alguna forma los temas que se tratan a lo largo del mismo. Por otro lado, es una sensación peculiar el cantar/gritar “Estoy aquí” o “Sigo aquí” ante un grupo de gente que te está mirando fíjamente a la cara.
Por su parte, “Algo ha cambiado” me recuerda un poco a El Mató a un Policía Motorizado y, en cualquier caso, es un hit claro.
Es un grupo que nos gusta bastante, dentro de ese mundo de bandas argentinas que nos flipan, como los 107 faunos, Las Ligas Menores o Javi Punga. Igual sí que tiene algo de ese mundo, nos han dicho que las melodías de voz. Por otro lado, Lucas es canario, a lo mejor es simplemente su acento en el contexto del género musical lo que te lleva ahí. Pero bueno, nos lo tomamos todo como un cumplido. “Algo ha cambiado” fue, de hecho, la última canción en acabarse, a solo un mes o dos de entrar a grabar. El riff principal es una mezcla entre un ejercicio de calentamiento de mano para antes de tocar y la intro de “Map Ref. 41°N 93°W” de Wire. La estructura es bastante típica. En cuanto a la letra, va sobre una persona que se había perdido un poquillo y que está hablando y haciendo las paces consigo misma después de unas movidas que pasaron.
“Apenas hemos metido en el disco elementos que no pudiéramos reproducir en los conciertos”
“Tiré una piedra al aire” es una de las canciones más desvergonzadamente pop del lote y casi hasta (extrañamente) me recuerda a Spin Doctors.
De alguna forma “Tiré una piedra al aire” es una rara avis dentro del disco, aunque hay alguna otra. Sin alejarse demasiado del concepto estilístico de la propuesta de “Todavía no”, en esta canción jugamos con elementos de producción que no habíamos trabajado hasta el momento. Desde el principio nos sonaba a canción desvergonzadamente pop, como dices, y decidimos exprimir ese concepto todo lo que pudimos. Tiene un poco ese punto de exageración de conceptos pop, casi irónico, que han explotado otros grupos antes, como el “Cut your hair” de Pavement, por poner un ejemplo. También nos parecía interesante darle ese carácter al tema porque contrasta con la letra. Una producción pop y brillante para una canción que trata sobre el fracaso y el desencanto.
No ha pasado demasiado tiempo desde que publicasteis vuestro EP de debut en 2021, ‘Una idea, pero es triste’ (La Castanya, 21) ¿Cómo lo percibís ahora? ¿Cambiaríais algo de esas cinco canciones con las que os disteis a conocer?
El EP lo percibimos no solo como música, sino como un momento concreto en el tiempo o una experiencia. Ya el título hace referencia a un momento concreto en los inicios del grupo. Es también un cúmulo de emociones, recuerdos y una larga serie de “primeras veces”. Esas canciones son nuestra primera vez juntos componiendo, grabando, cargando una furgo, yendo a tocar a no sé dónde por dos duros, bocatas increíbles, risas constantes, bajonas, etc. Muchas cosas que son de lo más común en nuestras vidas hoy en día.
En cuanto a las canciones del EP, las seguimos tocando hoy en día. Nos encantan y estamos muy orgullosos de ellas, creo que todavía no nos hemos cansado. Dicho esto, si tuviéramos que regrabarlas ahora tal y como las tocamos en directo, sería un poco distinto todo. Es una experiencia bonita ver como las canciones van evolucionando y cambiando con uno y con el tiempo y a base de tocarlas mucho. Cambian ciertos detalles, y en cada concierto son un poco distintas, pero las versiones de esas canciones que dejamos grabadas están bastante bien.
¿Ha cambiado algo en el grupo y en vuestro sonido desde la publicación del EP?
Hemos tenido la oportunidad de trabajar más a fondo las canciones en todos los sentidos. Como grupo, llevamos más tiempo tocando juntos, nos conocemos mejor y estamos cada vez más en sintonía. A título individual, como músico vas cambiando tu forma de hacer música o mejorando en tocar tu instrument. O incluso tocando instrumentos nuevos. Esto se vierte directamente en el proceso de composición y creemos que ha ayudado en lo que consideramos un salto positivo de sonido en este nuevo disco. En ese aspecto de sonido, y de producción, Diego Escriche ha sido clave en este disco. Estuvimos un mes y medio puliendo a fondo mano a mano el enfoque estético y de producción de las canciones por separado y del conjunto. Al final, hemos sumado una pieza más a la banda sin la que habría sido muy difícil materializar lo que teníamos en la cabeza para este trabajo.
¿Diríais que sois una banda generacional? ¿Cómo creéis que encajáis dentro de la nueva hornada de grupos de la escena indie?
Creemos que somos una banda de ahora, como muchísimas otras. Hablamos de las cosas que nos preocupan e intentamos hacer todas las canciones que nos gusten que podamos. No intentamos encajar en ningún sitio en particular, pero nos encanta compartir esto con bandas amigas. Dicho esto, es inevitable que te asocien o te metan en “lotes” con grupos del momento, como si fuera una especie de escena, pero tenemos demasiado aprecio a ciertas escenas y movimientos a nivel histórico. Tanto que sería una falta de respeto hacia todo eso decir (nosotros) que formamos parte de algo semejante.
¿Cómo veis ese panorama actual de bandas de guitarras en nuestra geografía? ¿Hay algún grupo patrio con el que os sintáis especialmente conectados?
Pues hay muchos grupos y eso es muy buena señal. Cuanta más música haya, ya sea de guitarras o de cualquier otro instrumento, major. Luego ya, que la gente consuma lo que le de la gana. Hay muchos grupos que hacen cosas que nos flipan, y hay algo muy bonito también en sentirte inspirado por cosas que hacen colegas y bandas que no murieron hace veinte años. Las canciones redondas de Mujeres, la evolución de La Plata, la música de los Nueva Vulcano, la propuesta de Vulk... mil cosas. Creo que en España estamos en un buen momento a nivel musical.
“Es bonito sentirte inspirado por colegas y bandas que no murieron hace veinte años”
Y, un poco en sentido contrario ¿Qué diríais que os hace únicos? ¿Cuál puede ser vuestro elemento diferenciador?
Nuestro elemento diferenciador es el que pueden tener todas las bandas y artistas. Somos cuatro personas que nos hemos juntado a hacer canciones y que intentamos dejar algo de nosotros en cada una de ellas. Queremos pensar que eso hace especial un proyecto. No estamos inventando la rueda, pero queremos pensar que la carga personal que damos a las canciones ya nos diferencia. También tenemos a Lucas, que es de Gran Canaria y a veces dice unas palabras rarísimas.
Lo cierto es que habéis generado unas considerables expectativas gracias al EP previo y a los diferentes adelantos ofertados del disco. Incluso podría ser que fueseis una de las bandas revelación de la temporada en la escena nacional ¿Cuáles son vuestras expectativas reales y cuáles las metas a conseguir?
Seguir componiendo y seguir tocando. Cuanto más de todo mejor. Estamos felices de todo lo que nos ha pasado hasta ahora, y solo esperamos que las cosas sigan yendo igual y nosotros sigamos tan contentos. En cuanto a expectativas reales: tocar muchísimo (el verano va teniendo buena pinta) que es de las cosas que más nos gusta; y en cuanto a metas a conseguir a corto plazo y relacionado con lo de tocar en directo, estamos locos por poder hacer el equipo de La Paloma más grande, para contar así con una parte técnica que ahora mismo no tenemos (sonido, backline, etc).
¿Cómo describiríais esos conciertos de La Paloma? ¿Hay algún referente en el que os fijéis de cara a llevar vuestra música al directo?
Una vez más afrontamos el tema de los directos como tantas otras cosas en la banda: desde la sinceridad. Como siempre, hay días en los que estás rayado o estás con una energía loca y eso se vierte en la puesta en escena, en las canciones y en la conexión que creas con el público. Tenemos respeto absoluto por los proyectos que consideran el directo como una actuación, con unas personalidades distintas a las reales, o en los que otros elementos fuera de la música (como la escenografía o baile) cobran importancia. Pero, por ahora, nuestros directos son bastante fieles a la persona que somos en nuestro día a día, no hay mucha floritura. Digo por ahora porque sería estupido rechazar la posibilidad de evolución de la puesta en escena. Mola mucho ver cuando un grupo avanza por ahí y llegan a cosas memorables. En líneas generales nos limitamos a tocar siempre con la máxima intensidad y con las máximas ganas, que son las que tenemos.
Lo cierto es que, sin tener álbum publicado, ya habéis actuado en países como Portugal, México y Estados Unidos.
Pues sí, hemos tenido la suerte (somos plenamente conscientes de que es una suerte) de poder tocar fuera de España, abriendo para Bodega en Portugal y Francia, el SXSW de Austin y México dos veces en 2022. No creo que sea algo a lo que uno se pueda acostumbrar y, independientemente del posible éxito que puedan tener los conciertos en países random, estar fuera con tus amigos haciendo lo que más te gusta hacer, comiendo cosas ricas y tal, no tiene comparación.
¿Hay ya entonces gira planeada para presentar en directo las canciones de ‘Todavía no’? ¿Preferís tocar en salas o en festivales?
Esperamos que este disco nos lleve a tocar por todos los sitios posibles. Parte de la presentación del disco se hará en festivales, algo que nos apetece porque siempre es un momento de celebración y fiesta y tiene algo de especial tocar en esos escenarios; pero la verdad, muchas ganas de la gira de salas. Creemos que es ahí donde podemos permitirnos hacer la presentación de las canciones en condiciones, dándoles el espacio, el cariño y el público que se merecen. Es un contexto más íntimo y directo, donde sentimos que mejor podemos hacer llegar a la gente lo que sea que estamos intentando hacer.
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