“Ahora soy  capaz de hacer cosas que antes no podía”
EntrevistasLa Casa Azul

“Ahora soy  capaz de hacer cosas que antes no podía”

Sergio del Amo — 14-06-2019
Fotografía — Lluis Domingo

Se ha hecho de rogar, pero Guille Milkyway al fin publicó hace unos meses La gran esfera (Elefant, 19), el sucesor de “La Polinesia meridional” que llegó a nuestros oídos en 2011. Durante estos años nuestro protagonista ha pasado por una serie de vicisitudes personales y artísticas que, entre otras cosas, le hicieron desechar un álbum que inicialmente estaba previsto para 2014, alejarse del estudio momentáneamente por culpa de un desprendimiento de retina y batallar contra una crisis sentimental. De todo ello hablamos con el artista en una conversación igual de sincera que sus últimas canciones.

Quien haya leído la entrevista que publicó Rockdelux puede llegar a pensar que, incluso antes de que el álbum se publicara, estabas ya cansado de estos nuevos temas.
Sí, soy consciente de ello. Es como si me hubiera quitado de encima una mochila con muchas piedras. Es cierto que tomé cierta distancia, aunque me he reconciliado con él porque estoy satisfecho con el resultado. Ha pasado tanto tiempo y me han ocurrido tantas cosas personales y de salud estos años que se ha generado una especie de bola. Le he dado muchas vueltas a cómo proceder. ¿Retomaba o no el disco de 2014? ¿Empezaba de cero? Me hice muchas preguntas. Quizás demasiadas.

¿De alguna u otra manera te viste presionado?
Hubo un momento en el que sí. Es algo que me ha ocurrido por primera vez. Cuando me puse otra vez en marcha me di cuenta de que había perdido mucho tiempo en pensar qué hacer. Llegué a la conclusión de tirar adelante un disco corto rehaciendo algunas canciones antiguas, incluyendo otras del momento actual y algunas que he grabado en el último año. En definitiva, un disco que pueda escuchar dentro de diez años y que me haga pensar que quedó guay.

¿No te vino a la cabeza lanzar un EP?
Claro que sí, pero a medida que pasaba el tiempo no podía salir con un puto EP después de ocho años. Yo mismo me censuré en la forma de proceder. No por lanzar un EP, sino por llevar tanto tiempo sin sacar nada. Ahora, después de esto, iré lanzando nuevos singles. Todo fue una carga, y no precisamente porque esté insatisfecho con el resultado.

Eso mismo te iba a decir: ningún seguidor de La Casa Azul puede quedar insatisfecho con “La gran esfera”.
Te diré más: el otro día me lo puse en el coche, que es algo que nunca hago, y estoy muy contento de cómo suena. Durante estos años me he obligado a profesionalizarme en el estudio como productor. Ahora soy más capaz de hacer cosas que hace unos pocos años atrás no podía. Estaba lleno de dudas porque sabía que podía hacerlo mejor.

"La gente simplemente empatiza con lo que puedo contar en una canción y le da muy igual quién soy o dejo de ser".

¿Qué les faltaban a esas canciones que desechaste en 2014?
Era puramente un tema de sonido porque conceptualmente sigue siendo el mismo. La gracia y la desgracia de esa debacle en las relaciones personales y el mundo sigue estando presente, aunque ha evolucionado en los últimos años. Muchas canciones de “La gran esfera” siguen diciendo lo mismo que aquellas descartadas en 2014.

Has pasado por una crisis sentimental con tu pareja y eso se refleja en gran parte de los temas. ¿Crees que te has expuesto demasiado en las letras?
Para mí ese discurso costumbrista del día a día es la única forma que tengo de escribir. Tenía mucho interés en hacer eso. Me apetecía que no hubiera mucha distancia entre lo que me estaba pasando y la canción en sí. Como bien dices eso hizo que me planteara la decisión de exponerme o no de una forma tan directa. En “El momento” nombro a mi hija cuando canto “Y cada vez que Nico despertaba, sí, otra discusión”, lo cual es algo súper personal en donde implico no a un adulto, sino a una niña que no ha decidido salir en la canción. En ese momento sí que me planteé que tenía que autocensurarme, pero he optado por ese camino porque no me sale escribir canciones metafóricas.

Lo que dices de “El momento” me pasó muy desapercibido. Imagino que a la mayoría de los oyentes también...
Total, me das la clave de la solución a la que llegué. Si fuera Lana del Rey, Dua Lipa o Elton John hubiese sido diferente, pero tengo la suerte de que a nadie le interesa realmente mi vida. La gente simplemente empatiza con lo que puedo contar en una canción y le da muy igual quién soy o dejo de ser. Nunca más me voy a plantear esto después de llegar a esa conclusión.

Escuchando el álbum me vino a la cabeza la teoría de que a lo mejor el disco se había demorado porque no tenías ganas de rememorar esos momentos malos que has pasado.
Al final del proceso hubo un punto de eso. Cuando empecé el disco sí que estaba narrando una debacle con un final trágico.

¿Ha habido final trágico?
No. En el último año y medio las cosas se han ido poniendo poco a poco en su lugar y nos hemos reencontrado. Siempre tiendo a que todo explote sonoramente, pero me di cuenta de que tenía que haber algo de luz en el álbum. Ahí está el último tema, “Gran esfera”, que de hecho fue el primero de todos que hice y, además, el único en el que reescribí la parte final de la letra. La canción la grabé en 2013, hace ya muchos años, y rehíce el final para que tuviera ese algo más positivo. Otra cosa muy presente en el disco es la interpretación de la nostalgia no como una simple herramienta de añoranza, sino como una solución. Si recordamos cómo nos sentíamos, usémoslo a nuestro favor. En algún momento como “El final del amor eterno” hay esta posible solución. “¿Y si merece el esfuerzo? ¿Y si podemos hacerlo? ¿Y si aún estamos a tiempo?”. Esa duda quería que estuviera ahí.

¿Crees que el próximo largo de La Casa Azul será algo más optimista?
No tiene por qué. No lo sé… las canciones que tengo hechas hasta ahora son ambivalentes como las últimas que hice para “La gran esfera”: “Ataraxia”, “El final del amor eterno” o “Ivy Mike”. Son ambivalentes. Hay verdades que damos por dadas y no siempre se cumplen. Me sentí muy naíf porque todos hemos crecido desde pequeños con la idea del amor eterno y te sorprendes cuando no va así.

¿Hay que afrontar los baches sin recurrir al drama?
La idea inicial del disco tenía algo de eso, pero varió después de todo lo que me ha pasado. Las parejas que llevan tantísimo tiempo juntos, como por ejemplo en mi caso, que llevamos veinte años y tenemos dos hijos, tienden a dramatizar una situación tan habitual como es la decadencia del amor. Realmente creo que ahora estamos en un momento muy bueno. Hay que disfrutar más del día a día y obviar esas ideas preconcebidas del amor.

"Ahora tengo la sensación de que me siento más seguro, más grande al estar mejor armado a nivel musical".

Sonoramente “La gran esfera” tiene ciertas pinceladas de trap y música urbana. ¿Es algo que quieres explotar aún más en el futuro?
No más, sino al mismo nivel de otras cosas que he hecho con anterioridad. En las bases fundacionales del grupo hay algo así como tres elementos. En el primero está la heterodoxia, el no prejuicio y el mezclarlo todo sin tapujos; en el segundo la canción atemporal y melódica constantemente presente y, por último, el vestido, el jugar con otros elementos. A mí me interesa todo al mismo nivel. Y no porque me sienta interpelado generacionalmente con eso. Es su discurso. Me interesa la escena en sí porque es activa y contracultural, pero me interesa mucho más a nivel sonoro porque disfruto probando todo el rato con los sonidos, como cuando sale una herramienta nueva o un pedal que te hace no sé qué. Me siento muy realizado haciendo ese tipo de cosas, pero por encima de todo están esos tres elementos que te he contado. No voy a hacer un disco de trap porque no participo de eso. No obstante, a nivel sonoro sí me interesan muchísimas cosas que suceden ahí. Me siento apelado a nivel de curiosidad sonora. Para mí todo lo musical tiene el mismo valor. Escucho con la misma libertad a Becky G que a The Beatles.

En los próximos meses vas a estar de lo más ocupado de gira. ¿Con qué nos vamos a encontrar?
Somos cinco músicos. Siete dependiendo de la canción. Y a nivel visual hemos cambiado cosas respecto a los conciertos de los últimos años. Por ejemplo, jugamos con los niveles en la puesta en escena. Para mí es el momento. Ahora, por fin, puedo decirle al ferretero donde compro dónde toco.

¿Te avergonzabas hasta ahora de tu directo?
Un poco… Quienes me siguen son fieles y conocen mi universo, pero ahora tengo la sensación de que me siento más seguro, más grande al estar mejor armado a nivel musical. Por fin estoy disfrutando de ese momento. Será una buena gira, sin duda.

Más allá de los singles que antes has mencionado, ¿tienes la previsión de lanzar un nuevo LP en breve?
No, no quiero llevar otra mochila encima. Después del verano empezaré a mostrar los nuevos singles. De hecho, hay dos que ya están acabados. La duda fue si meterlos o no en “La gran esfera”.

Agenda
Fecha Ciudad Recinto Hora Precio
jueves 25/07/19 Valencia Jardines de Viveros / Valencia 21:00 27,50 €
De 14/06 hasta 16/06/19 La Roda (Albacete) Festival: FESTIVAL DE LOS SENTIDOS
De 04/07 hasta 06/07/19 Nigrán (Pontevedra) Festival: PORTAMÉRICA
Saturday 06/07/19 Canet de Mar Festival: CANET ROCK
De 26/07 hasta 28/07/19 Benidorm Festival: LOW FESTIVAL
Saturday 07/09/19 Madrid Festival: DCODE
sábado 03/08/19 Pals (Girona) Jardines Masía Mas Gelabert / Pals 22:00 16,50 €
viernes 18/10/19 Barcelona Razzmatazz 1 19:30 22€

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