Hacía mucho tiempo que un disco no era capaz de esclavizarme de este modo. Puede que el descubrimiento de esta explosión de sensibilidad con aroma pop y folk durante un viaje a través del Teruel más bello y verde tuviese algo que ver en la absoluta dependencia que he desarrollado por este disco. Puede que escuchar coros como los de “Roscoe”, “Bandits”, “Head Home”... (paro o les daré la lista completa de las canciones que contiene “The Trials Of Van Occupanther”) mientras iba poniéndose el sol a la vez que me iba hundiendo en el asiento trasero de una furgoneta que atravesaba montes, ríos y barrancos, haya desequilibrado aun más el seso de este tarado al que le caían lagrimones durante el concierto de Midlake en Barcelona.
"Estábamos en el hotel y me senté al piano con ellos (The Flaming Lips). No se puede describir. No podía creerlo " |
Me alegró comprobar que no era el único enfermo allí. Enfrentar mi grabadora a Tim Smith, uno de los músicos con mayor capacidad para contagiar calma con su sola presencia, y alma de los de Denton, en Texas, provocaba, horas antes de esa actuación, una sensación que, aunque adoro, incomoda un poco. Creo que, al empezar, le asusté al preguntarle si era consciente de lo que había creado. “No... no lo sé, ¿de verdad te parece tan grande? No sé..., a la gente parece gustarle. Pero... no sé lo que contestarte. ¿Tu disco favorito?”. Para acabar de arreglarlo, le digo que su criatura tiene parte de culpa en mi intento de escapada de la ciudad para irme a vivir al campo. El tipo mira perplejo a Sergio Vinadé, de Tachenko, quien nos acompaña a la mesa y más tarde subiría con el resto de la banda al escenario para abrir esa noche. Me mira, decía, se ríe y reacciona. “¿En serio? Es una broma, ¿no?”. Le aclaro, muy serio, que no lo es, Vinadé asiente con la cabeza, y abordamos el tema de los paisajes que aparecen en las canciones. Nieve, valles y montañas se sugieren en todos y cada uno de los temas del álbum. Empieza a tomarme en serio. Hablamos de las diferencias con su anterior trabajo “Bamnan And Slivercork” (Bella Union, 04) “En ese momento escuchaba bastante a Flaming Lips” -no hace falta que lo jures- “pero ahora he estado escuchado más a bandas de los setenta como Fleetwood Mac, Jethro Tull o Joni Mitchell. No sé, también se puede decir que hemos usado menos teclados, ahora hay más guitarras”. En este punto Vinadé se interesa por saber el modo en el que crea las canciones. “En el anterior disco, componía más usando el piano y los teclados, pero en este las canciones pedían salir gracias a la guitarra. No sé, igual me he vuelto más rockero, quiero decir: ¿menos popi? (risas)”. Y al hilo de lo de The Flaming Lips, debo apuntar que Midlake giraron con ellos, algo que para Tim Smith supuso una grata experiencia. “Aparte de poder girar con una de las bandas que más admiras, es que son gente súper encantadora, tipos muy amables. En cada concierto que dábamos los teníamos ahí, en primera fila, animando, realmente parecía que les gustase lo que estaban viendo. Ha sido increíble. Hubo un día en el que estábamos en el hotel y me senté al piano con ellos y estuvimos tocando canciones de The Flaming Lips. No se puede describir. No podía creerlo”. Hablemos del disco, de la historia que encierran esas preciosas melodías y esos coros impagables. Un concepto que van desarrollando tema a tema y que es la historia de Van Occupanther. “Es el tipo vestido de dorado que tenemos aquí, un científico raro o algo así...”, comenta mientras señala la portada, “...que trata de ser él y de escapar, como un juego, como si de algo parecido al escondite se tratara”. ¿Como de alguien que no acaba de encajar, alguien diferente que intenta dar la espalda al mundo para salvarse? “No quiere acabar consumido por el mundo” como declara el protagonista en una de las frases del tema “Van Occupanther”. En este momento Vinadé y Smith se ponen a hablar de los programas informáticos que usan a la hora de grabar las demos, y es entonces cuando el americano se entera de que el maño no es uno de los cuatro freaks que pasaba por ahí y que les habían estado ayudado a descargar el equipo del autobús en el que viajaban, sino uno de los miembros de la banda que iba a abrir para ellos esa noche. De lo que no se enteró fue de que ese era, al menos, otro al que le caían lagrimones durante su concierto.
As to Vegas 4, I never had a chance to hear any of their music until now with your plug!The only time I have heard of Vegas 4 is when the act crloobloated with renown German DJ Paul van Dyk. The song was titled "Time of Our Lives".