"En España hay que hacer común el ir a ver grupos nuevos"

Juan Zelada es un músico que tuvo la oportunidad de estudiar en la escuela LIPA, la cual fundó Paul McCartney para que todos aquellos chicos y chicas que quisieran dedicarse a la música pudieran hacerlo. Años después vuelve para dirigir a una banda formada por músicos y alumnos en un intercambio junto a la AIE que pretende fomentar la formación profesional musical y la movilidad internacional artística. Hablamos con Juan un día antes de actuar con sus alumnos por primera vez en España. 

Acabas de llegar de tus conciertos en Liverpool y Manchester, lo primero de todo, tengo que preguntar qué tal fueron.
Sí… ha sido un aprendizaje constante para mí. Se supone que ellos hacen esto para que aprendan el proceso de lo que es hacer una gira pero… ha funcionado al revés, aprendemos los artistas muchísimo más de ellos. La entrega, la ilusión y la inocencia que tienen es algo con lo que te sientes muy identificado cuando tu tenías esa edad y querías hacerte tu huequecito en la música. Esa ilusión tiene un valor tremendo.
Ha sido un proceso de ensayos, arreglar los temas que ya se habían currado ellos e intentar darles un poco más de forma, pero sobre todo darles la libertad para que se expresen y saquen la bestia que llevan dentro. Ha molado mucho. En Liverpool fue en el LIPA Bar y en Manchester en el Instituto Cervantes, que yo no había estado y tiene un hall muy alto que se pierde un poco el sonido, pero es una gozada que incorporen estas cosas. Yo lo hice como alumno hace años con la gira de Javier Ruibal.

¿Cómo ves este curso ahora que te ha tocado ser profesor después de haber sido alumno?
Es un giro… es como completar el círculo. Yo fui primero becado por AIE a LIPA cuando estaba un poco perdido y tampoco sabía muy bien que hacer aquí en Madrid entre la carrera y más cosas. Así que me surgió la opción de irme y decidí dedicarme a la música cien por cien. En mi tercer año allí hice tanto el Spain Tour como el proyecto de un disco grabándolo de principio a fin y fue una experiencia muy brutal el saber todo lo que conlleva montar un disco. Así es como empiezas a entender porque la gente tarda meses en hacerlo.

Y en todo este proceso de enseñanza que has vivido, ¿has aplicado algo de lo que te enseñaron a ti?
Bueno, es complicado porque las enseñanzas académicas en música no se ajustan al día a día. Hay que aprovechar las instalaciones como estudios de grabación, músicos, eventos y otras cosas, pero luego tu de forma independiente te lo tienes que currar fuera de la LIPA. Depende mucho de la escena local en la que estés, en mi caso era Liverpool. Allí teníamos una banda y tocábamos y tocábamos, pero de vez en cuando viajábamos a Manchester, a Londres… entonces esa actitud de moverse tanto sumada a lo que hace el LIPA provoca que te espabiles y lo apliques a tu perfil lo mejor que puedas. Esa práctica es para mí la esencia de cómo te vas formando como músico. Lo que le digo a los chavales es lo mismo, que aprovechen cada minuto de su estancia pero que no deja de ser una carrera muy práctica y lo académico se queda en lo académico. También les digo que no intenten copiar o emular a alguien, sino que se expresen como son ellos mismos porque igual con 19 años es complicado de verlo.

"Las enseñanzas académicas en música no se ajustan al día a día. Hay que aprovechar los recursos que te dan sumado a la actitud de moverse por tu escena local"

Ahora que lo mencionas, ¿qué edad tienen estos chicos?
19 la mayoría. Luego hay una chica noruega que hace coros que tiene unos 26 y es una pedazo de artista. Yo he escuchado cosas originales suyas y podría estar en todos los carteles de música folk europeos.

¿Entonces ves que de aquí pueden salir músicos grandes?
Total. Camila Sky recomiendo escucharla porque tiene un directo de media hora que hicieron con el que flipé. También hay algún profesor que coordina la operación y luego un americano que toca espectacular, tienen una musicalidad y una ternura que sorprende muchísimo.

Siendo tantos miembros en la banda cada uno con distintos instrumentos y estilos, ¿cómo estáis afrontando la gira? ¿Hacia diferentes tipos de estilos o estáis yendo a por uno más concreto?
Bueno, me pidieron a mi hacer un repertorio y como tengo ya 3 discos intentamos hacer una mezcla de todos ellos con alguna sorpresilla, algún tema nuevo… los chavales lo interpretan a las mil maravillas porque es un soul popero que hemos escuchado toda la vida, es una música bastante universal. Es un registro que dominan los británicos, entonces ellos con sus distintos arreglos y puntos de vista lo interpretan de forma impresionante, porque claro, es diferente a como lo hace mi banda así que yo tenia que dejarme fluir y que ellos aportasen sus cosas.

Bueno, antes ya has mencionado que has aprendido mucho de ellos. ¿Pero que te llevas de toda esta experiencia?
Yo he aprendido a dejarme influenciar y a no estar tan encima de los arreglos y tus propios temas. Aprender cómo se puede manejar un poco la ilusión porque es desbordante. Ellos están con un sonrisa constantemente porque tienen una inocencia que ningún músico debería perder. Yo con 30 y pico años y muchas cosas vividas tengo muchos claroscuros y cuesta mantener esa ilusión de niños que me recuerda a cuando estaba allí.

Al final eso es lo que te mueve a hacer y probar cosas distintas, ¿no?
Claro, te ayuda a tener la suficiente apertura de mente como para aceptar hacer esto o el día de mañana meterte en otro proyecto totalmente diferente. Somos bastante camaleónicos los músicos en ese sentido, estamos siempre adaptándonos a las limitaciones y los recursos que tenemos.

¿Y que pensaste cuando te ofrecieron este proyecto? Porque también es cambiar un poco lo que haces normalmente.
Yo me tiré de cabeza. Para empezar ya tenia la familiaridad de haber ido al LIPA, tenía mucho vínculo y tenía la excusa perfecta para volver a Inglaterra que para mí ha sido como una cuna musical, de influencias, de todo… yo después de los tres años en Liverpool pasé siete más en Londres, entonces poder volver a Inglaterra, aunque estoy muy a gusto aquí en España, era genial.

¿Crees que hubiera sido diferente tu carrera musical si no te hubieras ido allí?
Totalmente. Yo soy todo lo que he vivido, desde las influencias musicales o personales como la de mi manager, quien dejó su trabajo por llevarme a mí y saltar al vacío para meternos en la escena musical de Londres intentando hacerte en un hueco, hasta sonar en la BBC. Son las típicas ilusiones de niño que se dieron gracias a estar en Londres, igual estando aquí también se hubieran dado, pero pasaron así. Para ellos siempre fui un guiri, pero era uno de los suyos.
Tengo un tema del disco anterior que se llama Forastero, lo compuse junto a un trío de chicas que se llama Femina que conocí en buenos aires que habla de eso. Cuando fui allí me sentía así pero al venir a España después de pasar tanto tiempo fuera también me sentía así. Al final qué más da todas fronteras si la música es un mestizaje.

La música al final es un lenguaje universal.
Eso es.

Y  Londres es una ciudad muy musical, ¿crees que allí se vive diferente que aquí?
Sí, se nota. No necesariamente mejor ni peor pero simplemente allí hay muchísima cultura musical. Aquí somos una minoría en el sentido de que tenemos que luchar por hacernos un hueco para que nos escuchen o valoren y en Inglaterra son una mayoría gigantesca. Lo que dice la BBC o una sala mítica sobre una banda va a misa. Allí la gente va con ganas de escuchar bandas nuevas y aquí vamos a ver bandas consolidadas. Muy poca gente hace la practica de descubrir nuevos grupos yendo a ver quién toca por garitos, que es lo que más mola. Pero allí van a los bares a ver música en directo. Yo en mi etapa de hacer bolos por bares coincidí mucho con Ed Sheeran y el tío era igual que ahora, lo que le hacia falta era que le descubrieran.

Igual lo que hace falta aquí es cambiar esa mentalidad de no ir a los sitios porque hay poca gente.
Sí, también tenemos que cambiar la idea de voy a modo de favor para ver al colega de turno o al promotor de turno y es que no son favores, es una necesidad vital. Hay que hacer que sea más comunitario y universal el ir a ver música en directo o descubrir grupos nuevos.

"Estos chicos están con un sonrisa constantemente porque tienen una inocencia que ningún músico debería perder"

Allí cuentan con centros como el LIPA, que le dan una oportunidad a la gente que está empezando. ¿Qué peculiaridades tiene esta escuela?
Lo bueno de la escuela es que también se dedica a la parte técnica. Los técnicos de sonido, ingenieros, danza, artes escénicas en general con lo cual es un trampolín para la gente que hace posible las actuaciones, no solo los que se suben al escenario. Enseñan todo lo que engloba este mundo. El orgullo del LIPA es el alto porcentaje de alumnos que viven y trabajan en el sector. Imagínate que pensásemos así en España.

¿Crees que sería posible una escuela así aquí?
Tiene que haber voluntad, tiene que haber fondos… la verdad es que cuentan con unos fondos increíbles. Esto era el antiguo colegio de Paul Mcartney y John Lennon que han ido haciendo modelaciones para hacer estudios, salas para los bailarines, etc. Está claro que es un presupuesto que igual aquí no tenemos pero sí que hay escuelas buenas, la Creativa en la calle La Palma hace cosas interesantes. Esto es un pequeño trampolín, pero lo que más les complica la vida es la burocracia, todas las titulaciones…l a titulitis me da igual porque los músicos somos de vamos a tocar y a ver si te gusta.

Y ahora que has tocado con gente tan joven, ¿ves alguna diferencia a cuando estabas aprendiendo tu?
Sí sí… pero porque entonces tenemos esa parte de que nos lo creemos y cuando pasan unos años lo ves todo con los pies en el suelo y ves el lado relativo de las cosas y en ese momento te quieres comer el mundo y esa actitud mola porque en el mundo rock and roll hay que tenerla. Pero la experiencia es un grado y hasta que no la tienes no ves esa parte negativa que tiene.

¿Y crees que ahora entienden la música de otra forma? Ya sea en la forma de tocar, de producirla o simplemente de escucharla.
La verdad es que estos que me han tocado a mí tienen una mentalidad muy abierta, les mola desde lo moderno de ahora a Ray Charles. Veníamos el otro día escuchando en la furgo el nuevo disco de Leon Bridges que se llama Good Thing (Columbia Records, 2018). Es un cantante de soul antiguo haciendo una producción moderna y estábamos todos haciendo el tonto con la ilusión de un niño.

Bueno, por último ¿crees que toda esta experiencia te ha inspirado para un nuevo disco o alguna canción?
Estamos ahora con mi banda que hemos grabado y sacaremos algo en octubre con algún tema en español ya que tengo unas cuantas vivencias aquí y la idea es sacar un single ahora en junio, otro para final de verano, el disco en octubre y a ver la gira en noviembre.