Si te dan rabia los grupos que van de ultra modernos, con camisetas de tirantes en videoclips en los que hacen cosas que tú jamás harás, que se pintan la cara en directo y sin una preocupación en su cabeza... entonces odiarás a Walk The Moon. Pero si eres de los que piensa que, a pesar de estar en febrero, el verano queda cada vez más cerca y buscas nueva banda sonora, Walk The Moon son tu grupo.
Acaban de publicar su segundo disco homónimo, en el que encontrarás canciones como “Anna Sun”, pildorazos bailables que terminarán sonando por doquier. Aunque hits como ese pueden convertirse en un arma de doble filo y convertir los conciertos de WTM en un mero trámite hasta que no llegue el tema deseado. “Durante mucho tiempo hemos tocado en conciertos en los que no nos conocía nadie y teníamos que ganarnos a la gente desde cero. Los conciertos donde somos teloneros nos ayudan a seguir tocando de pies en la tierra y a ser humildes”, asegura Eli Maiman, guitarrista del grupo, a lo que Kevin Ray, bajista, añade “interactuamos mucho con el público, para cuando llega el hit ¡ya están hechos polvo!”. Prueba de ellos han sido SXSW, Lollapalooza, Bonnaroo o iTunes festival, nada mal para unos recién llegados. Europa es la siguiente meta. Y antes de que nadie más lo pregunte, lo de la pintura facial tiene más que ver con, en palabras de su propio cantante, Nicholas Petricca: “Peter Pan y el no querer crecer nunca, que con bandas como MGMT o Empire of The Sun”.
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