“He llevado todo más al límite"

Soledad Vélez ha pasado de alentadora promesa a realidad aplastante, y de grabar un disco notable como “Wild Fishing” a otro excelente como “Run With Wolves”.

Cuando conocí por primera vez a Soledad Velez me pareció una chica extremadamente tímida, muy prudente y dulce como el azúcar. Lo continúa siendo, lo lleva en la sangre, pero en cambio se ha sacado de encima el caparazón que la cubría y se ha desatado el huracán. Cuando interpreta sus canciones en directo la rabia se expande y cuando las escribe no se corta un pelo. Tras el espléndido pero atemperado “Wild Fishing”, llega otra clase de disco, que a la primera impone y extraña, pero que con las escuchas adquiere todo su valor y toda su amplitud. “He llevado todo más al límite, tanto por la producción, por cómo he explorado mi voz. No me he guardado nada. Ha sido una especie de exorcismo. Me he liberado. Estoy muy satisfecha con el resultado”.

No se identifica con otra cantautoras chilenas como Francisca Valenzuela o Javiera Mena, pero en cambio en “South Mountain” reivindica sus raíces. “En el estribillo de esa canción digo que estoy orgullosa de ser sudamericana, que reconozco mis orígenes, que no me debo esconder de nada, aunque tampoco cierro puertas, por eso dí el paso de moverme de allí para cumplir mis sueños como músico. Volver hace poco a mi país también fue un ejercicio y un aprendizaje muy interesante para mí”.