En la maleta
EntrevistasGuillamino

En la maleta

Redacción — 25-03-2011
Fotografía — Archivo

Músico curtido en mil aventuras y discos, Guillamino también pincha por placer y se mueve muy bien en terrenos bailables, como bien demuestra el doce pulgadas “Whip Gymnastix” (Bankrobber, 10). Lo hace para explorar otras facetas suyas y para pasarlo bien. Y nosotros encantados.

¿Por qué motivos empezaste a pinchar? ¿Para ligar, para ser una estrella?

Claramente para ser una estrella... no, pinchar nunca ha sido mi ocupación principal así que básicamente empecé por diversión y así hasta la fecha.

¿Qué recuerdos tienes de la primera sesión?

Fue en un cumpleaños de una amiga en una verbena de San Juan. También era mi cumpleaños. Recuerdo que estuve ensayando y planeando la sesión e incluso haciendo una lista y intentando seguirla mientras pinchaba, vaya, un lío.

¿Qué disco nunca falla en una sesión tuya?

Durante mucho tiempo me signifiqué con la rumba catalana y siempre caía un “Mig amic” de Peret, o el siempre efectivo y atemporal “The Bomb” de Bucketheads.

 Por contra, ¿cuál de tus discos favoritos nunca ha sonado en una sesión tuya? ¿Por qué?

Aunque miro de poner siempre al principio, desafortunadamente el hip hop tiene poco espacio en mis sesiones. Somos un país poco ecléctico que le cuesta no tener su ración de “bombo a negras” a ciertas horas/copas.

¿Qué es lo peor que puede hacer un Dj mientras está pinchando?

No sé, ¿sacarse los mocos? No mirar a la pista.

¿Qué es lo que más te gusta y lo que más odias de otros Dj’s?

Me gustan los Dj’s que confunden los temas entre ellos, para mí es la esencia de pinchar, generar pequeñas creaciones a partir de la mezcla de dos temas.
El super-cuadreteo de temas.

¿Hasta qué punto es importante que la gente baile más o menos para cambiar la línea de tu sesión?

Si la sesión es en horario de baile entonces es importante, hay que mirar a la pista, pero hay que mirar pa’lante.

¿Recuerdas alguna anécdota especial a lo largo de tu carrera como Dj?

En un sitio muy pijo de Barcelona, se me acerca una chica y me dice: “Qué guay. Me gusta como pinchas, bla bla bla’. Le explico que hago música, me pregunta cuál es mi nombre y me dice: “mañana te busco en el emule”. En fin...


¿Vinilo o CD?
Vinilo, ordenador y CD.
¿Tienes algún problema a la hora de mezclar guitarras y electrónica en la misma sesión?

No, aunque nunca sonarán guitarras con distorsión en mis sesiones.

¿No estás harto de trabajar siempre de noche?

Trabajar de noche me mantiene fuera del mundo de la noche, como trabajo saliendo, salgo trabajando. Así ya no me quedan ganas de salir por placer.
Es ideal.

¿Alguna vez has perdido o te han robado los discos?

Tengo discos prestados que nunca me han devuelto, y lo mismo tengo discos prestados que nunca he devuelto.

¿Qué opinión tienes de la relevancia que se le da en la actualidad a los Dj’s?

En el contexto de la electrónica el djing manda. Ha conseguido difuminar la diferencia entre un Dj y un live electrónico. Supongo que al gran público no le importa demasiado, y eso es en cierta manera preocupante. Es el tipo de público poco musical, el que solo valora el pulso (BPM’s) que mantiene en la pista. Puedes poner una sesión grabada y nadie se enterará. Contra eso cuesta más competir. Yo no lo hago, básicamente porque sería muy aburrido.

 ¿Qué opinas de los músicos que pinchan?

Yo soy uno de ellos. Para mí lo de pinchar es muy musical, así que no concibo el pinchar sin tener una sensibilidad de músico. Creo que ahí está la diferencia.
Me gustaría ver más Dj’s pasándose a la producción y a la música en general.


¿Cuáles son tus Dj’s actuales favoritos?

Vi a Jackmaster en Barcelona, en una fiesta off-Sònar y lo flipé.


¿Bebes o haces cosas malas mientras estás pinchando?

Bebo y gorreo tabaco, muy triste.


¿Cuántos discos sueles comprar en un mes?

No lo sé, soy muy inconstante. Cada mes compro discos pero casi siempre me dirijo a las tiendas de segunda mano y compro discos de un euro. Un dato curioso: he encontrado el filón de las “cookies”. Siempre encuentro unos discos donde está escrito con rotulador la palabra “cookies”. ¿Debe ser que el propietario los consideraba muy buenos? En fin, ahora ya no puedo parar, lo mío es encontrar “cookies”.

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