"Se nos ocurrió hacer góspel punk sin tener ni puta idea"

Originario de la localidad costera de Sant Feliu de Guíxols (Gerona), Pepe Bolton lleva guerreando media vida en esto de la música. Ska, punk, mestizaje, rock mestizo, sonido Barcelona… Todas las etiquetas y ninguna le van bien. Miembro fundador del mítico grupo de ska Discípulos de Otilia en la Barcelona olímpica de 1992 junto a sus amigos del instituto, en el nuevo milenio dejaría la banda matriz para montar Sin Papeles. En estos últimos años ha decidido asumir el alter ego del Predicador JJ Bolton y darle la vuelta al rizo acompañándose del Coro Gospel Punk, batiburrillo que se ha terminado acortando al simple nombre de Gospel Punk. Llevan tres años lanzando singles, videoclips y campañas solidarias, y en este 2018 publican al fin su primer largo “Luz”, trece temas que se dejan seducir por un número ilimitado de estilos bastardos.

¿En qué momento el “predicador” JJ Bolton, cantante de Discípulos de Otilia, decide montar el “primer grupo de Gospel Punk del planeta”?
Viendo todos los signos apocalípticos, los cambios climáticos, y artísticamente todo el tema social, y por otro lado la necesidad de hacer un proyecto arriesgado, no queríamos sacar un disco típico de banda de rock, de banda de ska o de rock mestizo. Queríamos hacer algo diferente, nuevo, arriesgado, y sin tener ni puta idea se nos ocurrió hacer un grupo de góspel punk, que va mucho con el Apocalipsis, el fin del mundo, hacer un grupo de góspel no cristiano pero sí social, porque todos los beneficios de la música van para causas sociales. Empezamos a montarlo, a buscar cantantes por el mundo. Hacerlo ha sido divertido, y en un momento de crisis de la industria total pues también era importante hacer un grupo de catorce personas, que realmente complica mucho todo pero bueno, queríamos hacer algo nuevo: hacemos coreografía, hacemos baile… Una cosa totalmente diferente.

En realidad hay de todo un poco, además de punk y góspel: rock, ska, reggae, salsa, rancheras… ¿Se puede decir que la única premisa es la diversión a la hora de tocar?
Sí, es un poco mediterránea también, música que coge un poco del rock mestizo, de la salsa, pero también cada canción te pide una historia, y nosotros ahí no tenemos miedo de hacerla y de ponerla.

Por haber hay hasta una versión del Dúo Dinámico, “Resistiré”, que en su día Los Muertos de Cristo llevaron al punk y que ahora lleváis vosotros al ska. ¿Había ganas de meterle mano?
Este tema se lo hice a mi hermano, que estuvo muy jodido de salud, y creo que era un tema básico para grabar ahora. No solamente hacer crítica sino dar un mensaje. “Resistiré” ya es un himno, y la verdad es que creo que nos ha quedado una versión súper chula, muy góspel al principio, pero muy cañera, con mucha tralla luego, estamos muy contentos.

Encontramos diversas colaboraciones en el disco, empezando en el tema de apertura por la de Evaristo, de actualidad por causas extramusicales…
Por causas penosas. Que un intelectual del siglo XX tenga que verse así es muy fuerte, el escenario es sagrado. Evaristo al principio cuando venía a Barcelona siempre le teloneábamos, con Discípulos y con Sin Papeles también. Hemos hecho una amistad y con el “Bótalos a todos”, que es un tema muy punki, le llamamos. Le costó, porque le cuesta, pero al final le convencimos. Vino a Barcelona y grabó el tema.

La de Evaristo supone la tercera participación en el proyecto “La vuelta al mundo en ochenta artistas”. ¿En qué estado se encuentra el proyecto? ¿Tienes pensado ya los siguientes participantes?
Ahora hemos grabado con Karmen ‘La peluquera’ de Skaparapid, hemos grabado con Manu de Sonido Internacional, y ahora vamos a grabar con Crudezas. La idea es “las personas entienden, los políticos no”. Con todo lo que está pasando en Cataluña, España y el mundo creíamos bueno hacer un proyecto en el que artistas de diferentes sitios nos juntáramos en el coche punk y hacer ahí un lío. La verdad es que está teniendo más aceptación el proyecto del coche que Gospel Punk. Está funcionando muy bien por YouTube y la verdad es que muy contentos con este paso.

Los propios Discípulos de Otilia también aparecen...
Sí, nos juntamos la gente que fundamos el proyecto para ponerle una guinda a muchos años de rock’n’roll. Falleció un amigo de un miembro del grupo, decidimos escribirle una canción y, bueno, de ahí salió la idea. Se nota mucho, es increíble que gente que llevamos tanto tiempo sin tocar juntos nos juntemos y salga algo tan discipulero, ¿no? Ha sido cojonudo poder volver a grabar con esta gente.

¿En qué estado están ahora Discípulos de Otilia?
Yo me fui de Discípulos hará diez años, pero ellos siguen en activo y guay. Canté con ellos hace poco, con los que han continuado, y la verdad es una banda que te mueres. No ha cambiado la esencia.

‘Luz para mi mamá’ habla sobre esa terrible enfermedad que se lleva tantas vidas a diario, y contra la cual habéis organizado tres ediciones de la “Peregrinación contra el cáncer”. ¿Qué tal ha funcionado?
El 20 de julio hacemos la cuarta edición, una cabalgada rocanrolera friki, que es coger e irnos desde Sant Feliu de Guíxols hasta Lisboa en tres días en moto. Toda la gente que quiera venir está invitada. La idea es que gente anónima se junte para hacer un viaje. Es un proyecto muy chulo. El año pasado organizamos más bien un festival y tal, este año cogemos carretera y manta y tiene una pinta muy buena.

También habéis lanzado con fines solidarios el videoclip de “Tengo hambre y vivo en Barcelona”.
Colaboramos con esta ONG, Sense Sostre (Sin techo). Como te he dicho somos un grupo solidario. Incluso tenemos el teléfono del superhéroe, donde la gente nos llama cuando tiene alguna ONG que quiere nuestra ayuda. Esta ONG nos pidió hacer una campaña para recoger abrigos, porque tenemos bastantes seguidores en Facebook, la hicimos y ahí decidimos hacerles una canción. Escuchamos un poco lo que nos explicaban y de ahí sale toda la letra. También hacemos lo de la Carta a los Reyes Magos de los Sintecho, el día 4 recogemos todo lo que quieren de la gente que vive en la calle y al día siguiente se lo llevamos. Es un poco lo que te decía, elevar las canciones, que una canción que solo es una canción pase a una ONG. Este vídeo por ejemplo les va a dar muchísima visibilidad a Sense Sostre.

Hasta el Pequeño Nicolás tiene su “homenaje” en el disco (“Viva el Pequeño Nicolás”)…
El Pequeño Nicolás es una consecuencia de un sistema político podrido, y por otro lado es la picaresca. A mí me parece divertido, y como todo el mundo le pone a parir pues los punkis siempre vamos a contracorriente y decidimos hacerle una canción homenaje. Lo único que hacía era ser un niño que imitaba a los mayores. La verdad es que está funcionando muy bien, la gente la conoce.

Con el disco ya en la calle, el siguiente paso es presentarlo. ¿Cómo habéis preparado la gira?
Tenemos una forma de presentarlo. Vamos a venir a Madrid y Barcelona en otoño, pero es un grupo muy para festivales, para escenario grande, porque somos catorce personas en escena y esa es un poco la idea, no hacer muchas salas sino buscar eventos grandes que permitan una cosa diferente, y eso es lo que estamos intentando. Esa es un nuestra filosofía, ir presentándolo poco a poco.

Comentabas antes la dificultad de ser catorce personas en el grupo. ¿Cómo lo hacéis para ensayar y buscar fechas?
Es una locura. Creo que gracias al wasap. La gente se lo está tomando bastante en serio. También hemos montado un grupo de rock del que todo el mundo forma parte. No es mi proyecto, hay un núcleo duro de trabajo y esto también hace que la gente se involucre en el proyecto y que crea en él. Por un lado es un coñazo, pero por otro también cantamos con mujeres, que nunca lo habíamos hecho. Tenemos cuatro mujeres cantando y eso le da un rollo. La idea es hacer poquitos bolos y a ver dónde nos lleva el futuro.