Fuego y licor

Su último disco “Dalle!” es ante todo la plasmación en estudio de lo que uno de los grupos más excitantes del Estado da de sí en unos conciertos que acostumbran a comenzar ataviados con sus pararrayos de aluminio y a terminar habiendo convertido a su secta a todos aquellos advenedizos del lugar. No te los pierdas este jueves en el Primavera Sound.

Unicornibot son cuatro chicos con mucho amor por el ruido y que no necesitan cantar para llamar la atención hacia su música, caóticamente ordenada bajo el math-core que siguen practicando en su segundo disco, “Dalle!”, un fantástico y cuidado vinilo. Grabado con Javier Ortiz y con diseño de Xosé Lois García, en Unicornibot es importante el colectivo. “Queríamos hacer un disco en nuestra casa, con nuestra gente y de forma manual. Él hizo el diseño y Berto Fojo y Natalia Umpiérrez se ocuparon de la serigrafía. Fue un proceso duro para todos, pero con el tiempo sabemos que tendrá mucho más valor haberlo hecho de esta manera. El grupo somos los cuatro pero no podríamos hacer nada sin la ayuda de toda la gente implicada, como David Tombilla y todos los amigos del Liceo Mutante”. Donde la banda toma total sentido, no obstante, es en sus furibundos directos. “Pues no sé si hay alguna clave, excepto tocar siempre al once. La gente suele conectar por eso y porque tocamos tan alto y rápido que no damos demasiada tregua. Y hasta cantamos a veces. El disco trata de ser un reflejo lo más fiable posible de lo que es un concierto, pero el directo es lo que somos”. Por cierto, escuchándoles ya sospechábamos las influencias que ayudaron a dar forma a “Dalle!”. “Tenemos suscripción vitalicia a Jara y Sedal, la Cuore, Saber Vivir y la Mondosonoro. En cine nos guían ‘Princesa por sorpresa II’, ‘Una rubia muy legal’ y toda la saga de ‘Porky’s’, que siempre estarán en nuestros corazones”. Solamente esas referencias pueden dar lugar a ese endemoniado y decibélico math-core de cuernos de aluminio que con ellos alcanza el mathrockalipsis, no siendo este otra cosa que “el límite cuando el fuego y el licor café tienden a infinito”. No dejen de comprobarlo en directo.