Frío en el cuerpo
EntrevistasKiev Cuando Nieva

Frío en el cuerpo

Raúl Julián — 18-05-2010
Fotografía — Archivo

Desde Huesca y a la chita callando nos ha sorprendido muy gratamente "Todos Los Ademanes" (2009, AA Records) el segundo disco de Kiev cuando nieva. No esperes encontrar estribillos coreables, pero si muy buenas canciones.

El proyecto de Javier
Aquilué y Antxon Corcuera comenzó a finales de los noventa en la
Facultad de Bellas Artes de Cuenca. Las inquietudes musicales de los dos amigos
dieron como fruto la creación de una banda, y su pasión por la antigua Unión
Soviética sirvió como inspiración a la hora de bautizar a la criatura, tal y
como explica Javier. “Teníamos un
programa de radio y como toda la temática venía dada por nuestra ‘fascinación’
por el mundo eslavo, lo soviético… pues lo llamamos así. Y luego trasladamos el
nombre al grupo”
. Queda claro
que Kiev Cuando Nieva no son unos recién llegados y ya en aquella época
grabaron y empezaron a mover un inaugural EP que finalmente no logró editarse
oficialmente, pero que fue la antesala de su debut homónimo publicado en 2007.
Ya con Carlos Aquilué como nuevo baterista ve
ahora la luz un segundo disco titulado “Todos
los ademanes”
, una entrega más
madura y trabajada, dejando percibir una evolución que sigue respetando la
esencia del grupo. “El primer disco era
en gran parte una recopilación de canciones compuestas a lo largo de los años.
Este es íntegramente nuevo, y por tanto la visión de conjunto de los temas es
más homogénea. Además, el primero nos lo produjo Rafa de La Jr, mientras que
este ha sido grabado por nosotros mismos y su sonido es un tanto más luminoso,
más amable… suena más a banda”
. Una
decena de canciones intensas, sinceras y personales, que ningún seguidor de
Nick Drake, Red House Painters, Nacho Vegas o The Montgolfier Brothers debería
dejar pasar. “Son grupos que nos gustan,
más que influencias en sí mismas. Al final te conviertes en tu propia
influencia, tratas de filtrar lo que oyes a través de los parámetros de tu
propio sonido”
. Preguntados al respecto de la reacción que esperan obtener
por parte del oyente, la respuesta tiene la seguridad de quien conoce bien su
creación. “No es que nuestra música sea
especialmente difícil o sesuda, pero tiene un tempo, un cierto carácter
‘raquítico’ que hace que no sea del todo accesible para mucha gente”
.

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