“Somos una banda con mucha fuerza en directo que trata de llevar esa fuerza a los discos”

El rock como concepto lúdico. Como diálogo entre el público y la banda. Como campo de pruebas para que tanto quien crea como quien escucha disfrute por igual. Ese es el planteamiento vital de Ezpalak, cuarteto con sede en Zestoa que estos días presenta su tercer trabajo de estudio titulado “Hortz Aina Hots” (Oso Polita).

Resulta tan mágico como hipnótico comprobar que las bandas siguen decidiendo correr la aventura de la publicación de un nuevo disco dentro de un sistema que esquiva el formato físico y se centra en sensaciones más pasajeras. Ezpalak, una banda de directo que trata de capturar su esencia en el estudio, ataca ya su tercera entrega discográfica. “Hortz Aina Hots” sigue la senda marcada por “Kolpatu topatu” y los convierte en una banda más directa y cruda que se apoya en la melodía cuando lo necesita pero que no necesariamente compone en torno a un concepto melódico. No era así en su disco homónimo de 2019 donde reinaban las guitarras noventeras y la melodía. Sin embargo, tanto en “Kolpatu Topatu” como en “Hortz Aina Hots” Ezpalak se abalanzó sobre un concepto más cercano al punk visceral de la Inglaterra del último lustro.

Ezpalak presentará “Hortz Aina Hots” en una gira conjunta con otra de las bandas del momento en Euskal Herria. Rodeo y Ezpalak presentando nuevo disco en una gira conjunta es algo que nadie debería perderse.

¿Un grupo como Ezpalak se pone algún tipo de objetivo cuando publica un nuevo trabajo?
Para nosotros el objetivo siempre es tener la opción de ofrecer muchos conciertos y de que disfrutemos tocando. De la misma forma buscamos una respuesta del oyente que nos permita ver lo que funciona.

Buscando el feedback.
Si pero un feedback físico. Rockero. Ver con qué disfruta y baila la gente. Si es mejor tocar más rápido o más despacio, ver con qué disfruta, lo que funciona. Esa respuesta que recibes en los directos es lo que luego nos ayuda a elegir qué grabar y a grabarlo para que funcione en los directos porque pensamos que hoy en día la esencia de una banda está más en los directos que en los discos.

¿Cuando hablas de esencia te refieres a algún aspecto económico?
No. Porque en un directo puedes entender cómo es una banda. Al final en el estudio puedes hacer muchas cosas. Lo que quieras. Pero un directo es el momento donde una banda muestra lo que es. De hecho, nosotros somos conscientes de que Ezpalak es una banda con mucha fuerza en directo y tratamos de llevar esa fuerza a los discos. Pero definitivamente no es algo sencillo de hacer o no termina por salir siempre.

Como conclusión, podríamos decir que el objetivo de Ezpalak es lúdico. Disfrutar y hacer disfrutar.
Prácticamente sí. Disfrutar de los conciertos, dar el mayor número posible y lograr que sean lo más disfrutables posible para todo el mundo.

Y, por lo tanto, los objetivos económicos quedan a un lado.
Nosotros no tenemos más objetivos económicos que recuperar lo gastado y no crear un agujero demasiado grande.

¿Normalmente se recupera lo invertido?
Te diría que sí. Nosotros hemos recuperado lo que invertimos en el anterior disco. También hemos comprado una furgoneta y es a lo que estamos tratando de darle la vuelta ahora mismo. Tenemos un nuevo disco y en los conciertos de verano esperamos empezar a recuperarnos del esfuerzo de este nuevo trabajo.

En estudio y en productor sí que ahorráis…
Claro, porque grabamos en el mío, conmigo a los mandos y ese es un gasto que no tenemos.

Conocimos Ezpalak en 2019 y era una banda guitarrera con claras influencias de los 90. ¿Queda algo de esos inicios en 2022?
Yo creo que sí que queda algo aunque es cierto que hemos evolucionado hacia algo más punk con un toque más británico. Al final en aquel primer disco las canciones las había compuesto yo en solitario con unas influencias más personales y ahora somos una banda y cada miembro pone algo de su parte. Al final todos escuchamos mucha música y vamos a muchos conciertos y más o menos sabemos qué es lo que queremos. Como consecuencia surge una evolución que tiene en cuenta los gustos de los cuatro, la respuesta de la gente en los directos y nuestras sensaciones sobre el escenario. Pese a todo, creo que sí que queda algo de los 90 y del grunge. Esas influencias siguen ahí quizá algo evaporadas, pero siguen ahí.

Esa evolución es curiosa sí. Aceptando que todavía quedan 90 y grunge, es cierto que el grupo ha evolucionado hacia algo más crudo y británico. De un planteamiento más melódico y limpio a una propuesta más sucia y agresiva.
Sí. Totalmente. Aunque yo te diría que para este disco ha habido una influencia bastante clara de Sonic Youth y su disco “Dirty”, de Oh Sees o de Ty Segall. Y eso no son precisamente formaciones de inglesas.

¿Es más duro?
Diría que de diez canciones hay seis que son algo más duras y el resto más poperas. No creo que haya mucha distancia entre este disco y el anterior aunque haya un par de temas que sí que van más allá.

¿En esa evolución que citas queda algún hueco para el debate democrático entre los cuatro?
Es el directo el que nos va marcando la dirección. Como ya te digo, lo que funciona y lo que no. Lo que tenemos que potenciar y lo que tenemos que descartar. No es el fruto de una votación o de un debate. Es una conclusión a la que llegamos tras analizar lo que pasa en los directos.

Volviendo al público. ¿Tenéis la sensación de que se va ampliando, de que es más numeroso?
Yo creo que sí. Que va creciendo. Cada vez viene más gente a los conciertos y da la sensación de que hay más interés en la banda. No sé esto tiene una repercusión directa en los oyentes pero también es verdad que las escuchas de Spotify van creciendo.

Desde fuera da la sensación de que Ezpalak funciona bien en el streaming.
Quizá sea complicado interpretar los datos pero yo diría que funcionamos bien. Los temas son escuchados y el número de oyentes va subiendo así que por ese lado diría que funciona.

¿Las letras son tuyas? ¿Participa Juanjo?
Las escribo yo pero sí es cierto que Juanjo me va comunicando cosas y me empuja a que escriba sobre un tema o a que escriba más canciones sobre temas concretos.

Las letras dan la impresión de ser más directas. Con mensajes y conceptos más claros. ¿El público las entenderá mejor?
Puede. Pero la verdad es que no es algo premeditado. Quizá dependa de la estructura de las canciones que son más cortas, más directas y cañeras y, entonces, necesitas decir muchas cosas en menos tiempo y espacio. Quizá en el primer disco era todo más poético ya que yo venía de otra historia y he ido evolucionando.

Pregunta obligada llegados a este punto. ¿Cómo componéis?
Primero la música y luego me pongo con la letra. Y la música marca el camino para la letra. Una canción dura y amarga necesita una letra que se mueva por esos parámetros. Así que me dejo guiar por lo que componemos.

¿Sufres mucho escribiendo letras?
No. Me salen bastante fácil. Es cierto que prefiero componer a escribir letras pero tampoco tengo grandes problemas.

En las próximas semanas estaréis girando con Rodeo. Partiendo de la base de que sois del mismo pueblo, ¿Cómo surgió la idea de girar juntos?
Son nuestros amigos, andamos por los mismos bares, ensayamos en el mismo local, vamos a los mismos conciertos y vamos a vernos mutuamente. Y alguna vez entre cervezas nos dimos cuenta de que publicábamos el disco a la vez y de que podíamos compartir algunas fechas. Así que es una idea surgida de la amistad. Además, viendo que cada grupo tiene sus seguidores creo que es interesante juntarlos a todos en un mismo concierto. De momento son cinco fechas pero en el futuro es posible que se conviertan en más.

Rodeo es un auténtico grupazo. Todo el material que ha publicado este año es oro puro.
Así es. Pese a que llevan tocando muchos años yo creo que es ahora cuando están llegando a más público. Es un grupo que trabaja muchísimo y que en directo ofrece grandes conciertos. La verdad es que estamos muy ilusionados en girar con ellos.