Fue teloneando a los Black Flag de Henry Rollins (curiosa coincidencia de nombres) cuando White Flag empezaron a despuntar en Hollywood. Sin embargo, White Flag habían salido de una pequeña localidad perdida en medio del desierto donde no había clubes ni salas para tocar. «Ibamos a Hollywood a ver bandas y conocimos a algunas famosas antes de serlo, así que tocar con Black Flag, Bangles o Redd Kross fue fácil una vez que empezamos a tocar en Los Angeles». Editaron su debut en 1982, el autoproducido «S Is For Space», que alcanzó el logro de las veinticinco mil copias vendidas, granjeándoles una buena legión de seguidores y un puñado de críticas positivas. «Recibimos cartas hasta de Checoslovaquia, Africa y Malasia. Cómo consiguieron el disco es algo que no sé». Once discos y diecisiete años después la bandera blanca lanza, convertidos ya en un mito a lo largo y ancho del planeta, «Eternally Undone» (Houston Party, 99), su nuevo álbum. La calidad de las composiciones no ha bajado ni un ápice desde que su anterior álbum, editado diez años atrás, aunque la banda no haya estado precisamente fuera de circulación durante esa larga temporada. «¡Somos muy vagos! No, hicimos un montón de singles, un recopilatorio de rarezas y giramos mucho. No somos una banda con una dedicación total. Es un divertido hobby... cuando nos apetece hacerlo. Nunca nos hemos separado, siempre hemos estado activos de alguna manera, llevando el sello o sacando singles...». En esta última entrega, White Flag cuentan con Ken Stringfellow (Posies, Saltine, Lagwagon) y Eric Erlandson (Hole) como estrellas invitadas, lo cual es una costumbre muy cultivada por estos californianos, que, indirectamente, convierten cada una de sus grabaciones colectivas en delicias para coleccionistas. «La gente que toca con nosotros son amigos nuestros, no hacemos grandes audiciones ni nada por el estilo... como cuando tocamos con Big Star y sólo Trace y yo podíamos ir a Seattle. Jon y Ken de los Posies tocaron con nosotros, lo cual resulta gracioso porque ellos estaban también en Big Star...». Pero dejando a un lado las colaboraciones que uno se encuentre en «Eternally Undone», White Flag siempre han sido punto de encuentro para un buen puñado de músicos. Gente como Kim Shattuck y Ronnie Barnett (The Muffs), Jeff y Steve McDonald (Redd Kross), Dale Crover (Melvins), Pat Smear (Germs, Nirvana, Foo Fighters), Javier Escovedo (The Zeros) y así hasta completar una lista inagotable de notabilísimos músicos. «Al estar en el mundillo musical precisamente cuando un montón de bandas empezaban, tuvimos la oportunidad de conocer a muchas que después se han hecho realmente famosas, lo cual no deja de ser gracioso». Su paso por nuestro país no ha dejado indiferente a nadie, pero la pregunta es qué pensarán ellos del actual panorama musical español. «Dover, Parkinson DC, Ross, Los Piolines, Driver 8, La Secta, los Pleasure Fuckers... y Los Bravos, ¡olé!». Bien por las borracheras de Pat Fear (voz y guitarra), o bien por su desparpajo sobre el escenario, el público ha encontrado un encendido revulsivo en esta cuadrilla de chalados, y eso es algo difícil de conseguir cuando llevas dos décadas en esto del rock. Lo de sorprender, digo.
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