Emulando al Sargento Pimienta

Si la escena pop te parecía aburrida, si creías que lo mejor había sucedido ya y que llegaba el momento de encerrarte en tus discos preferidos del pasado, aquí llega la constatación de que estabas equivocado. Super Furry Animals regresan con "Phantom Power", una vuelta atrás mirando hacia delante, una suerte de "rescate emocional" en tiempos en los que el tedio nos asola.

Los galeses llevan conservando su particular estado de gracia prácticamente desde el día en que cinco tíos desgarbados de Cardiff decidieron montar una banda de indie-pop psicodélico. Eran días felices en las Islas Británicas, el brit pop era el producto que mejores dividendos estaba procurando a la industria discográfica desde la época de los Beatles. Todo esto ocurrió hace diez años exactos, y lo cierto es que desde entonces el entramado musical ha dado tal giro que ni el mejor de los oráculos hubiera alcanzado a intuir jamás: Oasis reivindicando el rock garajero, Blur firmando como Blur pero sin serlo, Radiohead en su particular "Plan 9" musical y Suede sufriendo una auténtica crisis de inspiración.

Sea lo que sea, lo que está claro es que los discos de Super Furry Animals siempre han sabido mantenerse en la superficie sin demasiadas dificultades. De hecho, pocas bandas son capaces de hacerle sombra a su discografía -con seis álbumes en su haber-. De todos modos, su verdadero punto de inflexión lo alcanzaron con su penúltimo álbum, "Rings Around The World" (Sony, 01), su disco más vendido en los Estados Unidos. Con una obra tan descomunal, cargada de excelentes temas y con unas letras más inteligentes que nunca, se pusieron el listón altísimo de cara a éste, su último trabajo. "Phantom Power" será, sin duda, el disco de la controversia para sus fans ya que se desvía de la senda de pulcritud geométrica iniciada hace dos años para retomar el camino de la visceralidad discos como "Guerrilla" o "Mwng". Al otro lado de la línea telefónica se encuentra Cian Ciaran, teclista y responsable máximo de los arreglos electrónicos del grupo. Le llamamos a su casa y, desgraciadamente, la respuesta que obtenemos es mucho más apática de lo que cabría esperar. Aún así, la insistencia y, sobre todo, la paciencia dio sus resultados. Obviamente, empezamos hablando de su último disco con la intención de descubrir los motivos por los que se han tomado más tiempo para grabarlo que con cualquiera de sus predecesores. "No, la verdad es que la agenda de conciertos se nos alargó con el último disco y prácticamente empezamos a trabajar en los temas de éste a finales del pasado verano. Los tuvimos casi listos en febrero, cuando empezamos la parte final de mezclas y todo eso, pero no ha habido ninguna razón especial". Curiosamente, todos los discos de Super Furry Animal han sido lanzados al mercado durante la estación estival. Según el propio Ciaran, no hay una época más propia para hacerlo. "Si hay que empezar algo, que sea con el buen tiempo", dice en la que es la respuesta más avispada de toda la entrevista. Es entonces cuando le pregunto por el desmarque de este nuevo disco con respecto a "Rings Around The World".

"Sí, yo creo que hay diferencias en este sentido. Y tiene su lógica ya que no hemos trabajado con el mismo equipo; la producción e incluso el estudio han sido diferentes. Con tantos cambios, uno está como más dado a salirse de su marco. Tienes más libertad de movimiento para la experimentación, aunque en este caso la parte electrónica haya disminuido. También es cierto que es la primera vez que tenemos tanto control. Y cuando tienes que estar encima de tantas cosas es cuando todo funciona más lento, así que esa ha sido otra de las causas de nuestra demora". Los galeses siempre han sido una banda bastante excéntrica, prueba de ello la encontramos en los títulos de sus discos. ¿A qué viene éste? ¿Acaso se trata de un disco conceptual? "No, no creo que se trate de algo como ´The Wall´ de Pink Floyd ni nada de eso. Piensa que hablar de un concepto unitario es bastante difícil ya que habíamos preparado veintidós temas para este disco, cada uno de ellos grabado en momentos y circunstancias diferentes. Y lo del título, mira, es lo que se nos ocurrió y poca cosa más". Poco a poco, la voz de Ciaran se va apagando y su predisposición a encarar las preguntas se va difuminando. Era momento de tocarle la fibra para ver si, de esta manera, era capaz de reaccionar. Super Furry Animals nunca han hecho ascos al uso de los aparatos electrónicos, de hecho el equipo inicial del grupo estaba nutrido prácticamente de samplers y sintetizadores. ¿Cómo es que, en "Phantom Power", esa presencia decrece ostensiblemente respecto a los anteriores discos? "Más que descender quizá es que su presencia no es tan clara. Aunque es cierto que en ´Rings Around The World´ había mayor presencia de las máquinas (pausa). No sé, esta vez no nos ha dado por ahí, igual la próxima vez". ¿Eso significa que queda algún resquicio de esperanza -sobre todo para él- de que, en un futuro próximo, firmen un disco enteramente basado en la electrónica? "Si hiciéramos un rastreo entre todos nuestros discos igual nos saldría un disco enteramente electrónico. Pero, sí, claro que me gustaría. Otra cosa es que al resto de la banda le interese algo así. Puede que esta misma noche se lo pregunte".Mis preguntas se extinguían a la velocidad de la pólvora y había que impedir que la entrevista decayese. Así que pregunto malintencionadamente si "Slow Life", el último corte del disco y una canción con una intro warpiana y desarrollo pop, cuenta con alguna colaboración oculta en los créditos. Tras una rotunda negativa me pide explicaciones ante mi duda. Le comento que la parte electrónica me recuerda irremediablemente al dúo Plaid. "¿Ah sí? Pues no ha colaborado nadie. Lo hemos compuesto todo nosotros solitos", comenta algo molesto. De todas formas, que le relacionen a uno con músicos de la reputación de los que componen la plantilla de Warp no debería incomodar a nadie. Finalmente, el músico reconoce su simpatía para con el sello. "Todo el material que editan está muy bien. Es un sello que ha sabido cómo crecer durante todo este tiempo". Cambiando de tercio, me intereso por los parámetros que llevan la identidad de Super Furry Animals más allá de lo meramente musical. Quizás eso signifique que la música es un medio insuficiente para permitirles expresar todo lo que tienen dentro. Me refiero sobre todo al hecho de que opten nuevamente por editar simultáneamente disco y DVD, como ya ocurrió con el disco anterior. "La verdad es que mucha gente nos ha criticado por no limitarnos exclusivamente a la música. Creo que todos estos reproches son una tontería. Para nosotros todo es complementario, tanto los directos como los discos, los DVD´s y las performances. Todo conforma un conglomerado expresivo que necesitamos y que seguiremos usando con tal de difundir nuestro discurso". Aún así, su frente más resolutivo a lo largo de todos estos años ha sido el directo. De hecho en estos momentos andan enfrascados en una nueva gira. Para la posteridad quedarán sus apariciones a bordo de un tanque gigante abriendo los conciertos de la gira de "Fuzzy Logic". ¿Qué serán capaces de hacer a estas alturas para sorprender al público? "Para esta ocasión presentaremos una mezcla de diferentes ideas. Habrá cosas nuevas y otras anteriores que repescaremos. Entre las nuevas tendremos gran cantidad de material que recopilamos durante nuestra última gira por los Estados Unidos. También presentaremos algunas escenas del DVD, aunque el concepto tampoco va a variar demasiado respecto a los conciertos que ya hemos realizado en Gales e Inglaterra". ¿Y qué me dices de los Yetis que ocupan el escenario? "Pues lo siento, pero sobre ese tema no puedo decirte nada. Si lo quieres descubrir tendrás que venir a vernos,