Mientras hay vida hay esperanza, deben pensar Jerry
Cantrell, Mike Inez y Sean Kinney. Que la vida sigue, superando incluso el
vacío dejado por el malogrado Layne Staley. El abismo era enorme, pero han
podido superarlo con William DuVall, una voz con cuerpo y auténtica sangre
fresca para unos grandes de los noventa. “Esta situación y las sensaciones
que estoy viviendo son realmente fantásticas. Durante tres años y medio hemos
celebrado el legado de Alice In Chains, su pasado, y eso ha sido muy emotivo en
muchos sentidos. Ahora, por fin, estamos ante otro escenario completamente
distinto que no tiene por qué desligarse del anterior. Lo que más me excita es
contar con nuevas canciones y tener un abanico más amplio que presentar.
Además, ha sido toda una sorpresa ver la respuesta del público ante este
material”. Descubrir cómo iba a encajar DuVall (nuestro
interlocutor en esta entrevista) en la formación era una gran incógnita que
sacudía no solamente las mentes de los seguidores del grupo, sino también de
los integrantes de la banda de Seattle. “He estado involucrado en todo el
proceso y me he sentido una parte más dentro del engranaje de la banda tanto en
la composición como en la mayoría de las letras. Hemos tenido mucho cuidado en
que los arreglos quedasen exactamente como los deseábamos. En Comes With The
Fall (su anterior banda) todo era distinto, trabajábamos
más deprisa. Nos poníamos y lo cantaba todo de un tirón, de principio a fin. En
cambio, con Alice In Chains el proceso ha sido muy largo, más tortuoso, aunque
lo haya pasado en grande. Todo es más complejo ahora, por estructura, por
medios y porque hay mucha gente externa que forma parte del proyecto como el
manager o los productores. Esto es como una gran familia, como un equipo en el
que cada uno tiene un papel asignado en el terreno de juego”. En
cuanto a “Black Gives Way To Blue”, no cabe duda de que mantiene
el sello personal de la banda, con temas densos combinándose con cortes más
reposados e introspectivos. Entre ellos, el single “A Looking In The View” y
“Check In The Brain”, un futuro clásico en su repertorio. “Es muy importante
que Alice In Chains sigan sonando a Alice In Chains. Y eso es algo que aprecio
una barbaridad. Tras tanto tiempo girando creímos que era el momento de entrar en
un estudio. Personalmente no me lo podía creer. Me ayudó el que esta gente sean
mis amigos. Eso hace que todo sea más fácil para todos. Ten en cuenta que ellos
llevan juntos más de veinte años, así que al principio la combinación era
extraña. Una mezcla entre lo familiar y el aire fresco que representaba mi
presencia en el grupo”. Se rumoreaba
que el grupo había aprovechado letras que había dejado escritas el propio Layne
Staley. “Las letras las he escrito yo. No hay nada de lo que dejó Layne en
sus apuntes, aunque es obvio que muchas canciones están inspiradas en su
figura”. William DuVall recupera la tradición y
esencia de todos aquellos grandes cantantes de los noventa: Eddie Vedder (Peral
Jam), Maynard James Keenan (Tool) o Jeremy Enigk (Sunny Day Real Estate) y
muchos otros. “La cultura y las tendencias son muy variables. Ahora estamos
ante sonidos diferentes. Lo de antes no tiene por qué ser mejor, como tampoco
tiene por qué serlo lo más actual. Lo que ocurre es que ahora hay más ideas que
fluyen al mismo tiempo y antes todo se concentraba mucho más. Eso sí, hubo una
generación de magníficos cantantes en aquel momento y, curiosamente, todos
estaban aquí en Seattle. Diría que aún hay mucho que descubrir dentro del
underground. Hay algo en la superficie, pero lo más interesante está ahí
escondido”.
Bueno ha sido un parto no deseado, por el dolor de la pérdida del alma torturada y siempre única de layne, pero el disco es digno. Sin grandes alardes, pero al menos no irrita, y eso, en este caso, no es poco.
Pues a mi no me parece un retorno sólo digno. En mi opinión se trata de un muy buen disco. Contiene tres o quatro canciones que ampliarán el repertorio de la banda seguro. Los viejos grungies siguen dando guerra. Será que los tiempos de crisis oscurecen el rock?