El Chojin, entrevista en Mondo Sonoro (2024)

Charlamos con el rapero de Torrejón con motivo de la celebración de sus 25 años en la música y de esa gira de aniversario en la que se encuentra embarcado de lleno.

El Chojin aparece por el skatepark de Torrejón marcando bíceps y engalanado con la 43 de los Toronto Raptors de Pascal Siakam. En el cielo, surcan más aviones militares que pájaros. Haber crecido junto a una base aérea americana ha marcado la idiosincracia de sus habitantes. A través de las instalaciones militares entró el rap en Madrid, elevando a Torrejón como meca del movimiento. También pionera en la lucha antirracista. El Chojin es producto de su contexto y así lo ha marcado su trayectoria: rapero, ingeniero aeroespacial, cinturón negro de jiu jitsu y defensor de los derechos humanos.

(Puedes consultar las fechas de la gira de aniversario de El Chojin al final de esta entrevista)

Un cuarto de siglo años de carrera. ¿Pasa rápido el tiempo?
Me cuesta mucho reconocerme como un señor que lleva 25 años sacando discos. No sé qué ha ocurrido, la verdad. A veces notas que el tiempo se te escurre de las manos.

Si te sirve de consuelo, a tus oyentes también les pasa lo mismo.
Es verdad. Afortunadamente, no soy el único que envejece.

¿Cómo se vive siendo un rapero al borde de los 50 años?
Yo soy rapero desde muy pequeño y da igual la edad que tenga. Siempre lo voy a ser. Para los que hemos llegado hasta aquí, todo lo que esté por delante es terreno inexplorado. Cuando cumplimos los 30 nos preguntábamos cómo podíamos seguir rapeando a esa edad. Pero aquí seguimos.

"Un cinturón negro es un cinturón blanco que nunca ha dejado de esforzarse"

¿Tienes algún modelo a seguir en cómo ir envejeciendo bien en el rap?
Nas, el rapero de Queens. Ha sido mainstream y lo ha vendido todo. De hecho, Illmatic es uno de los mejores discos de la historia. Y ahora hace lo que le da la gana. Hace discos muy raperos y nada comerciales. Sigue teniendo repercusión y es muy auténtico. Se nota que se lo pasa bien haciendo lo que hace.

¿Has cambiado mucho en este tiempo?
Mucho, afortunadamente. La experiencia, como el amor, no se puede explicar. Hay que vivirla. Haber hecho tantas cosas te hace más consciente de tus limitaciones y de que sepas que los sueños solo debes tenerlos hasta cierto nivel. Tienes menos entusiasmo pero más certezas. Vivo las cosas de una manera mucho más pausada y adulta.

Esto se plasma perfectamente en tu evolución musical. En tus comienzos eras un chico con mucha rabia. Ahora se te ve más espiritual y trascendental. Has pasado del Contra Todos al Con Todo.
Esta muy bien que eso se refleje en mi música. Estoy orgullosos de reconocerme en las letras que escribía con 13, 17, 21 y 30 años. También en las de ahora por que son capítulos de mi diario. Me enseñaron que en el rap debías ser real y expresar lo que tenías dentro. Y es lo que he hecho desde que era un niño

¿Sigues sintiendo esa rabia?
Claro. De hecho, acabamos de sacar "Vergüenza" donde hablamos sobre todo lo que está sucediendo en Palestina. Sigue habiendo rabia porque ninguno de los problemas que existían cuando empecé a rapear, se han solucionado. Así que sigue habiendo motivos para luchar.

¿Notas que tu alrededor ha cambiado?
No creo que haya habido una mejora significativa. La etapa vital de una persona es demasiado corta como para ver cambios importantes a nivel social. La evolución requiere de cientos y cientos de años. Siguen estando los mismos predicadores que dicen saber cuál es la solución, las mismas argucias de los medios de comunicación y de los grandes políticos.

¿Qué significa haber nacido en Torrejón a finales de los 70?
Fue a mi amiga la periodista Lucía Asué a quien le escuché por primera vez el término de barrionalista. Al no ser blanco, nunca me he sentido español. De hecho, me han recordado constantemente que no lo era. Lo que sí me siento es de Torrejón. Aquí he encontrado un lugar del que sentirme parte.

"Hay veces que veo cosas que he escrito y pienso que son una basura. Pero sé que era lo mejor que podía dar en ese momento"

La base militar es la puerta de entrada del hip hop.
Algo bueno tenía que tener una base militar de Estados Unidos en tu pueblo.
No me gusta haber tenido instalaciones militares cerca de mi casa ni qué significa la OTAN; sin embargo, gracias eso, entró esta influencia cultural y artística. Al final, son los pobres los que se van de misiones a otros lugares del mundo. Afroamericanos y latinos. Y ellos traían rap, que era la música que sonaba en sus barrios.

¿Cuánto hay de talento y cuánto de trabajo en tu carrera?
De talento, cero. Y conozco a personas con muchísimo.

¿Te consideras una persona sin talento?
Soy una persona muy disciplinada y trabajadora. Mucho más que la media. Eso hace que puedas destacar sobre algo que los demás han hecho mucho menos que tú. Un cinturón negro es un cinturón blanco que nunca ha dejado de esforzarse. El talento no es importante en el desarrollo de una carrera. Lo único que necesitamos es perseverancia y tener clara cuál es tu meta.

No hay palabrotas en tu discografía. Tiene que haber pocos raperos en este país que no hayan dicho nunca la palabra “zorra” o “puta” en sus canciones. ¿Esto es una representación de cómo eres en tu vida diaria o una posición política?
Solo las utilizo cuando hay que hacerlo. Te va a parecer curioso pero si nunca las dije en mis canciones es por respeto a mis padres. Me daba vergüenza que ellos lo escucharan.

Escuchándote hablar, se nota la importancia que le das al honor y al respeto. Y tengo la sensación que tu carácter está más determinado por las artes marciales que por el rap.
He pensado bastante en esto. No ha habido ni un día de mi vida en el que no haya escuchado música. A pesar de haber vivido momentos horribles, la música siempre ha estado junto a mí. Sin embargo, lo que ha acabado marcando mi filosofía de vida es el entrenamiento físico. Sentirte capaz es algo esencial para enfrentarte a la vida y no cambio por nada esa sensación. No quiero imaginarme mis límites, quiero tocarlos. Soy lo mejor que puedo ser porque trabajo día a día para serlo. Hay veces que veo cosas que he escrito y pienso que son una basura. Pero sé que era lo mejor que podía dar en ese momento.

¿Cambiarías la letra a alguna de tus canciones?
Lo he hecho. No por arrepentimiento, sino porque la persona que lo dice ahora tiene otra visión. No son grandes cosas. Cambian las formas pero no el objetivo. La lucha social, el antirracismo, la lucha en contra de la violencia machista. Eso lleva conmigo desde el principio.

Te tocó el inició de Internet, las redes sociales y ahora la Inteligencia Artificial.
La IA es lo que me va a hacer viejo del todo, porque se me escapa de las manos. Me parece que está avanzando todo a una velocidad exponencial y de aquí a cinco años no sé donde vamos a estar.