“Pienso que el cambio de cantante es lo peor que le puede pasar a una banda ya que la voz es la que le da su identidad y cuando se produce una situación como esta hay veces que no es aceptada por los fans”. Varios meses de búsqueda del cantante adecuado, la composición de nuevas canciones y el acoplamiento a marchas forzadas han dado como resultado un álbum donde el reggae muestra sus pinceladas en un contexto metálico, y donde otras vías de expresión totalmente nuevas (léase funky e incluso hip hop) tienen también su hueco. Todo ello se resume en el título del disco, realmente significativo. “Creemos que “Rastafari Mamao” es la canción que más refleja lo que es el disco. Es un cruce de reggae y metal. En este álbum hemos querido abrirnos a otros estilos, profundizar en nuestras influencias y este tema refleja muy bien esta labor de investigación musical”. Para muestra, incluyen una sorprendente versión de Manu Chao, de Mano Negra, “Sueño De Solentiname”, bastante fiel a la original aunque impregnada del característico estilo guitarrero del grupo. ¿Apunta a un cambio de dirección o se trata solamente de un divertimento? Más lo segundo que lo primero. “Siempre hemos hecho versiones y para este disco teníamos ésta y una de Bad Brains. Al final nos quedamos con la de Manu Chao. Yo creo que nos ha quedado muy potente y con un sonido muy Flitter, estamos contentos con cómo nos ha quedado”. Tras cambiar de discográfica, de Mil A Gritos a Gor -de donde curiosamente habían salido años atrás- esperan que sus discos obtengan un reconocimiento mayor del conseguido hasta la fecha (unas cinco mil copias largas vendidas de sus dos últimos discos, “Ciudadano Masoquista” y “La Vida Ke Kotxina Es”), tarea que, a estas alturas, no resulta nada fácil puesto que el extendido fenómeno del pirateo no deja de cebarse en los grupos y sellos más pequeños. “Más que a las bandas perjudica a las discográficas, pero a su vez nosotros nos vemos dañados porque bajan las ventas y las promociones. En mi opinión es un error la equiparación de precios entre los discos de los grupos locales y los de los extranjeros. Yo creo que si estuviesen un poco más baratos nuestros trabajos, las bandas de aquí venderíamos muchos más álbumes y se piratearía menos”. En resumen, nos hallamos ante doce nuevos temas de Flitter, una banda que trata de crecer poco a poco y no estancarse en unos parámetros, como los metaleros, en los que ha quedado demostrado que si te duermes te repites, algo a lo que ellos se niegan rotundamente.
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