"Nuestras canciones hablan de cómo afrontar la vida"
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"Nuestras canciones hablan de cómo afrontar la vida"

Liliana Ramírez — 30-05-2018

Los madrileños Club del Río están de vuelta con Sustancia (El Volcán, 2018), su tercer álbum. Y en él una vez más demuestran que su fórmula es la de un grupo de amigos que abraza la música como parte de su cotidianidad. En la siguiente entrevista la banda nos revela detalles de este trabajo, un disco que pese a todas las facilidades tecnológicas de nuestro tiempo ha sido grabado a la vieja usanza, con los seis componentes de la banda tocando juntos en directo.


¿Cómo habéis afrontado el riesgo de que siete músicos, siendo tan jóvenes, permanezcan unidos en torno a un proyecto como es Club del Río?
(Adriano) Estamos lográndolo. Es complicado combinar trabajos con la música, pero al final somos un grupo de amigos. Si no tuviésemos la música y tuviéramos cada uno un trabajo en nuestro tiempo libre, buscaríamos estar con nuestros amigos. Al final aprovechamos estar con nuestros amigos a la vez que trabajamos. Es un poco complementar las dos cosas. Somos un grupo de colegas que tiene un proyecto en común.
(Esteban) Es una cuestión de motivación y de prioridades. Muchas veces hay que tomar decisiones. A lo mejor te llega un buen trabajo en el que te pagan muy bien pero en el que casi no tienes tiempo, con el que no puedes afrontar la música o las fechas. Entonces tienes que renegar de él. Al final estamos todos haciendo malabarismos con el dinero y con todo para salir adelante. Pero, vamos, Club del Río es algo que queremos mucho.

¿Os sentís cómodos con el momento de la industria que os ha tocado vivir?
(Esteban) Tenemos un contacto con la industria un poco diferente porque trabajamos con una discográfica independiente que es El Volcán, que afronta la música y la industria de manera muy propia y personal. Nos viene bien porque somos una familia, somos como un equipo, no existe esa relación de jefe-empleado. Estamos en un mismo nivel, organizamos todo al mismo nivel.
(Adriano) Realmente nuestra experiencia con la industria y nuestra discográfica es bastante buena. Con el entorno musical que hay ahora nos sentimos cómodos. Creemos que además Madrid está efervescente, hay una escena con muchos artistas y bandas que nos gustan, y aquí estamos todos juntos remando.

¿Con qué artistas de esa escena que mencionan en Madrid sentís que estáis creciendo a la par generacionalmente?
(Juan S) Se me ocurre de pronto nuestros compañeros de local acá en Madrid, los donostiarras  Joe La Reina. Ya llevamos un par de años compartiendo con ellos, incluso hemos hecho bolos juntos.
(Esteban) También están por ejemplo Alberto y García, hemos hecho conciertos con ellos y somos muy amigos. O Bambikina con la que hemos colaborado en una canción y nos cae muy bien. Luego toda la familia de El Volcán que ha sido una gran influencia para nosotros, es como una macedonia de música, en parte gracias al jefe del sello que es Javier Liñán, quien estuvo muchos años en Warner y después se montó su proyecto personal con el que soñaba desde joven.
(Juan S) No hemos mencionado a alguien muy importante, Toni Zeneth y su grupo de músicos de los cuales aprendemos muchísimo. Tienen mucha experiencia y los vemos con una actitud ante la música tan positiva que realmente son los que nos enseñan. Es gente que lleva mucho mas tiempo que nosotros y que la gente de nuestro entorno que están igual un poco como nosotros. Ellos son maestros.

"En los últimos dos años han ocurrido cosas a nivel personal que me han trastocado un poco. Uno usa la música de forma terapéutica"

Hablemos de Sustancia. ¿Cómo fue el proceso detrás de este álbum?
(Adriano) Tuvimos un periodo de pre-producción en Madrid de seis u ocho meses. Teníamos claro que queríamos hacer el disco,  ganas de ir a por él. Sabíamos que teníamos muchas ganas, muchas ideas y dijimos "Vamos a ponernos unas fechas y que sea lo que Dios quiera".
(Esteban) Al final fueron trece canciones, recuperamos algunas que se iban quedando atrás: Luz de mañana que tiene cinco o seis años, Luces esquivas también es de las primeras en castellano que hice, y  la otra es La sed. Las demás son canciones pertenecen a esta última etapa como grupo, pero las canciones que hemos recuperado del pasado las hemos elegido porque tenían que ver con la idea inicial que teníamos al concebir este álbum. Teníamos varias opciones y decíamos: "A lo mejor estas no pegan tanto con el mensaje que transmite el disco". Entonces hicimos un poco de criba. El primer sencillo que sacamos fue El diablo, que es un tema bastante raro, progresivo y quisimos publicarlo para tener intrigada a la gente de para dónde va este grupo. Luego sacamos Remedios, un corte clubero muy a la antigua usanza, que es una canción acústica, de voces. En todos los discos hemos sacado canciones así y han funcionado muy bien con nuestro público. Luego sacamos No hay rival que hicimos con unas chicas de acá de Madrid de un grupo llamado Faneka. Hicimos el videoclip con ellas, son muy amigas nuestras y participaron con nosotros tanto en No hay rival como en La sed.

¿Consideráis que es un disco para fijarse en las letras?
(Esteban) Una de las señas importantes de Club del Río son las voces: siempre les hemos dado mucha importancia y nos gusta mucho cantar. La otra cosa son las letras. No hablamos de banalidades de "Voy a cine y me pido unas palomitas con la chica que quiero". Ojo que hay canciones buenísimas así, incluso The Beatles que son unos genios, si escuchas algunas de sus letras, hablan de una cita con su novia y las experiencias que vive.
Yo escribo casi todas las canciones, y en este momento de mi vida la mayor fuente de inspiración viene de ese lado espiritual porque así es mi relación con el mundo. Todas las canciones hablan de cómo afrontar la vida y las dificultades, y de cómo superarlas. En los últimos dos años han ocurrido cosas a nivel personal en mi vida que me han trastocado un poco, y cuando uno tiene la suerte de hacer música la usas a nivel terapéutico, para cuidarte, para soltar lo malo que uno tiene adentro. Es un poco como ir al psicólogo. Un mensaje común en el disco puede ser el de superar las dificultades de la vida con fuerza y con optimismo, con fuerza y con energía y creer en tu espíritu. Es un poco el resumen de todas las canciones. Cada artista se inspira en lo que puede, pero a lo mejor puede cambiar eso y reniego totalmente del espíritu y de Dios, y mi creatividad puede venir por ir a cine o verme en la calle. Cada artista va tirando por donde le despierta el alma la vida.

¿Hay alguna letra que mejor refleje ese espíritu optimista de Sustancia?
(Adriano) La canción que mejor refleja eso es la de No hay rival una fusión de una letra que es como muy triste pero la música es tan alegre que es como un contraste. Es una melodía muy guay que te transporta a "vamos todos por el campo". Pero si realmente escuchas la letra y piensas lo que está diciendo es un mensaje muy duro con una letra muy alegre a la vez. En esa canción hace muy buen contraste por ejemplo.
(Esteban) Remedios tiene una letra esperanzadora, está todo el rato en las estrofas diciendo "No consigo esto, ayúdame" y luego el estribillo es muy optimista, nos metemos las tres voces y todos juntos y decimos: "Ey, de qué tienes miedo, deja el aire pasar" y luego La sed por ejemplo es un tema muy profundo y estoy muy contento de lo que cuenta a nivel narrativo. Esas son de mis favoritas.

¿Qué músicos colaboran en el álbum?
(Adrian) En la producción estuvo el señor Raúl Pérez. Lo conocimos cuando fuimos a grabar el segundo disco y hemos vuelto ahora a repetir el mismo proceso de grabación. Él tiene su casa, estudio La Mina, y fuimos allí una semana. Todo es diáfano, si alguien se pone a cantar en la mañana, lo hace directamente y entonces consigue estar centrado en la grabación.
(Juan S) Luego todas las colaboraciones las grabamos en nuestro estudio Tuétano Music en Madrid que es un proyecto paralelo de programación de otras bandas de nuestro círculo, y un estudio donde grabamos estas cosas. Como no nos daba tiempo de grabar las colaboraciones en Sevilla, las grabábamos luego en Madrid. Tuvimos por segunda vez a Victor Iniesta y a Tomasito que son unos maestros, a Manuel Machado y a Ove Larsson en los vientos, al señor Harry Haynes que es un amigo de Brighton, a Leo "El Cigueña" un amigo que ya ha estado en nuestros tres discos anteriores y al que le solemos llamar el octavo Club del Río. 

¿Cómo fue de especial esa experiencia en La Mina?
(Esteban) En La Mina nosotros hemos encontrado una simbiosis muy buena, un espacio para grabar en el que la música se fusione con la vida y que no sea un elemento aparte. Generalmente tú vas a un estudio a grabar y luego te vas a tu casa a vivir tu vida. En este caso vas a una casa vives ahí, comes ahí y grabas ahí. Tanto la música como tu vida están fusionadas. Está todo metido en el mismo paquete y eso coincide con que es lo que hemos buscado siempre en la vida. Nosotros justamente estuvimos dos años viviendo juntos en una casa, y desde entonces quisimos que la música fuera algo de la cotidianidad, no elevarla, mantenerla muy cerquita, y así mantener ese elemento folk que es nuestro sello.
(Adriano) Raúl te prepara el set para empezar a grabar, no con un metrónomo en mano, sino como si estuvieras en tu local de ensayo sólo que un poco más grande y luego ya te ponen los micrófonos y marcas las referencias. Entonces grabas toda la estructura del disco y luego lo vas vistiendo. Sin embargo, ese molde que queda hecho suena a orgánico vivo porque que no tiene una claqueta detrás. Es un poco a la vieja usanza con muchas máquinas y micrófonos anacrónicos, intentando grabar todo lo que se pueda en directo para ganar en tiempo y en energía. Eso ha quedado plasmado en el disco. Trabajamos muy bien así, para nosotros es el paraíso.

Están ahora mismo lanzando el videoclip de Bahama Mamma que es bastante vintage tropical. ¿Cómo surgió el concepto?
(Adriano) El videoclip quedó genial fue grabado en Extremadura, hemos ido en un barco turístico hortera con camisas de flores. Nos decía un amigo "Me está encantando el disco, pero es que de repente entra el Bahama Mamma y rompe todo", y por eso lo hemos hecho así a posta. Todo ha sido muy en plan "qué hortera pero qué guay". El título de la canción es inspirado en un Ferry en el que fuimos a tocar a un festival en Mallorca y así empezamos a concebir el concepto de la canción y luego el del videoclip.

¿Qué planes tenéis para presentar el disco?
(Juan S) Tenemos ya planes de girar por España con el álbum. Ahora mismo presentarlo en festivales durante todo el verano. Esto incluirá que vayamos al norte de Europa, vamos a girar por Brighton, Bristol, París, Amsterdam, y muy seguramente haremos cuatro fechas en Alemania.

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