"Sale más a cuenta acercarse a una misma"

"Corsé" es el último trabajo de la catalana Clara Peya  pero, lejos de ser un disco más en su ya extensa trayectoria, esta nueva entrega es un paso firme que representa a la artista en su plenitud.

Clara Peya me cuenta que, esta vez, se ha decidido por el concepto de la perfección y la violencia que contiene y ejerce esta. A 40 grados, viendo como el hielo de nuestros vasos se consume bajo este insoportable agosto en Barcelona, le pregunto por la idea que vertebra su álbum. "Corsé", título de su nueva obra, le viene como anillo al dedo. «La perfección está muerta. Algo perfecto no se mueve, no necesita nada, no desea nada, y como cosa no deseante es inerte, está muerta. En cambio, un ser imperfecto, es decir, todo ser vivo, se mueve porque desea algo, y en este deseo está el cambio, está el movimiento, y moverse quiere decir estar vivo. El disco habla de esto, de seguir moviéndonos, de seguir siendo seres deseantes desde el lugar más rico de esta palabra, de estar conectadas con lo que queremos».

«La salud mental se frivoliza, es necesario hablar bien, es como cuando el capitalismo absorbe los conceptos, cuando algo pasa a ser moda»

"Corsé", el decimotercero disco de Clara Peya (cifra admirable a mi parecer) cuenta con trece temas interpretados por trece artistas por los cuales la pianista siente una gran admiración, desde el timbre de Silvia Pérez Cruz, a la emoción de Ede o a la expresividad de Albert Pla. Junto a Dídak Fernández (batería y percusiones) y Adri González (teclado y sintetizadores) Peya reconoce este álbum como aquel donde la electrónica ha tenido mayor protagonismo. «La producción la hemos hecho entera los tres, ellos han tomado muchas decisiones, llevamos muchos años trabajando juntos, conocen mucho mi forma de tocar y ha sido muy fácil que se acercaran a lo que yo quería, ha sido un proceso muy orgánico».

Pero Clara no casa con la electrónica secuenciada en concierto de la que otros géneros musicales se nutren como bien hace, por ejemplo, el hip-hop. Ella es una artista de directo y hace tiempo que utiliza sintetizadores modulares con el piano encima del escenario como una herramienta que «da profundidad… Tocarla en directo, no disparar la pista… los sonidos son electrónicos, pero, como los toca una humano, se convierten en sonidos orgánicos». Además, admite que así la gira da respiro a los temas, porque implica reinterpretarlos y de forma muy distinta a cuando los grabó. De nuevo, esa búsqueda del movimiento, de un cambio que haga que los temas se transformen en directo.

"Corsé" trae una experimentación evidente con temas tan sensibles, pero violentos, como “Les flors” junto a Marina Herlop. Luego, si tuviera que definir este nuevo sonido vestido de electrónica que nos trae su nuevo álbum, ¿qué tema escogería para representarlo? «Me cuesta un poco separar el sonido del concepto. Como resumen de temática, “Sota les dents” (ft Leo Rizzi), es muy concreta… pero de sonido, “Abrir la luz”(ft Momi Maiga)». También puntúa otro detalle, eje sonoro del disco. «El sonido que lo define es haber usado los bombos orgánicos, sampleados pero orgánicos, al grabar un bombo legüero… La idea de que en temas tan electrónicos, una parte tan esencial y propia de la electrónica, como es el bombo, de repente sea orgánica»

"A veces pensar que no he escrito sobre algún concepto, es mentira, porque cada uno lo ha podido interpretar de mil formas»

Para mi sorpresa, Clara no piensa que su música sea actual. Cree ya pertenecer a otra época. «El hacerme mayor me ha hecho hacer muchas cosas raras. Primero, intentar ser muy actual porque, claro, te estás haciendo mayor. Luego, decirte: tú te vas a alejar de esto, quieras o no quieras… Sale más a cuenta acercarse a una misma que intentar acercarse a otras cosas y eso es difícil al hacerse mayor. Para mí este disco me representa, me veo a mí». Sin embargo, creo que al hacer un disco que la represente, ha conseguido un claro reflejo de nuestra actual sociedad, tanto en la experimentación electrónica en la que se ha embarcado como al decidir escribir sobre el tema del momento: la salud mental. «ALELUYA» grita, «ya-era-hora», pero añade «la salud mental se frivoliza, es necesario hablar bien, es como cuando el capitalismo absorbe los conceptos, cuando algo pasa a ser moda. Si se habla de salud mental, se debe hacer desde una reflexión completa».

La música es su obsesión, pero hay otras disciplinas que captan su atención. «Me gusta mucho la danza contemporánea, me gustan los cuerpos, lo que veo en la música es que hay muy poca conexión entre el cuerpo. No entiendo por qué el cuerpo no es el vehículo. Por eso me gusta tanto la voz, porque es parte de tu cuerpo, como la danza». Entonces me confiesa que tiene una voz horrible. Que no hay manera. Pero que es buenísima en el ping-pong de mesa «Me encanta. Meditación activa».

Por último, quisiera saber sobre qué tema o concepto jamás ha escrito y le gustaría escribir. Tal vez, lo próximo a Corsé... «No lo he pensado nunca. Creo que, escribiendo textos tan poéticos, en realidad mi intención no es lo importante. Importante es cómo lo recibe cada persona. Cuando escribo, evidentemente escribo acerca de algo pero no acostumbro a explicar sobre qué. Luego, cuando la gente lo recibe, lo recibe a su manera. A veces pensar que no he escrito sobre algún concepto, es mentira, porque cada uno lo ha podido interpretar de mil formas».