"Las canciones de 'Balanceo' tienen la voluntad de provocar"

Cala Vento. Tras dos discos grabados a la velocidad de la luz llenos de talento en bruto, el dúo de l’Empordà se descuelga con un tercer álbum más cuidado y depurado que abraza definitivamente el pop. En "Balanceo" (Montgrí, 19) se dan cita nuevas influencias y una lírica más abstracta y conceptual. Ahora bien, la euforia, la intensidad y la facilidad para facturar himnos de sus inicios siguen estando ahí.

Kevin Rowland, líder de Dexys Midnight Runners y una de las mentes privilegiadas del pop británico de los ochenta, utilizaba la siguiente expresión para hablar de sus elepés favoritos: “un disco que da fuerza, un disco en el que SER”. Esa frase serviría para describir el espíritu de los dos primeros trabajos de Cala Vento (chequeen las críticas firmadas por Joan S. Luna para corroborarlo), pero es ahora con "Balanceo" (álbum con el que estrenan sello propio, Montgrí, el nombre de una zona montañosa de l’Empordà) cuando el grupo catalán clava de forma total eso que decía Rowland. Es más, en un giro inesperado de guion digno de una película de M. Night Shyamalan, el tercer esfuerzo del dúo formado por Joan Delgado (batería y voz) y Aleix Turon (guitarra y voz) lleva a su terreno el pop exquisito y sofisticado de unos héroes coetáneos a los Dexys. Y es que "Balanceo" se atreve con arreglos de viento y melodías inspiradas en otro tótem inglés del pop: Paddy McAloon y sus Prefab Sprout. “Esas referencias al pop de los ochenta y a Prefab Sprout son conscientes”, comenta Joan mientras los tres charlamos en el Mecànic, un espacio dedicado a la fotografía situado en el corazón del barrio de Gràcia. Cala Vento descubrió el genio de McAloon gracias a Eric Fuentes, uno de los productores de confianza de los catalanes. De hecho, ese descubrimiento llegó con el timing perfecto, justo cuando Joan y Aleix querían pasar más tiempo en el estudio para componer y grabar canciones más elaboradas. “Somos muy fans del funk y del groove clásico, y eso también está presente en algunos temas de Prefab Sprout, que a la vez es un grupo de pop, vamos la perfección”, dice emocionado Joan. “No hemos intentados copiar sus canciones, pero si la idea de hacer algo más currado con más medios y tiempo. Los primeros discos los hicimos solo en cuatro días y tocando en directo, y para este hemos estado unos veinte días, grabando los instrumentos y las voces por separado. Nos concentramos más de una semana en un estudio residencial de Motril para centrarnos y nos llevamos con nosotros a Eric Fuentes y Santi García [productores de Balanceo] para que solo se focalizaran en nuestra grabación”, añade Aleix.

Los nuevos Cala Vento no han perdido la fuerza bruta de sus inicios, pero han ganado en concreción y gancho pop. (Joan) “Tenemos dos vertientes, la primera es que nos gusta el pop y hacer canciones que nos emocionen a nosotros mismos. La segunda es la contundencia, la energía y la violencia, la fuerza en definitiva. Las canciones nos tienen que hacer sentir algo, sea rabia o alegría”. (Aleix) “El disco es una mezcla de espontaneidad y de reflexión, y eso ha sido posible gracias a dos cosas que nos pasaron durante el proceso de creación: el consejo que nos dio Eric de escribir algunas canciones siguiendo el espíritu más espontáneo de 'Cala Vento' y 'Fruto Panorama', y la pequeña crisis que tuvimos antes de entrar a grabar 'Balanceo' porque nos estábamos aburriendo de los temas nuevos. Lo que hicimos para superarla fue dejar de tocarlos durante un mes y luego volver a ellos. En algunos casos no nos acordamos de cómo eran y eso les dio una nueva vida”. (Joan) “En el momento en que nos aburrimos o nos sentimos mal es cuando nos preocupamos”.

“Ahora decimos que no podemos acabar con el sistema pero habrá un momento en que sí podremos, porque si no nos moriremos todos".

Dejando de lado el sonido, "Balanceo" también significa un avance a nivel poético. Las letras escritas por Aleix consiguen hablar de un montón de cosas (el hecho de estar en una banda, la situación política actual, la lucha contra los mercados y el sistema o las relaciones afectivas) sin caer en tópicos manidos y siempre con un ramalazo costumbrista. A veces todas esas temáticas se combinan en una misma canción. 'Solo ante el peligro' (con la reveladora estrofa: “lo que hemos hecho hasta ahora, lo podéis pasar por la trituradora, pero aquí seguirá para siempre, aunque os duela, aunque os joda”), 'La comunidad' (un pildorazo power pop imbatible), 'Bienvenidos a la tierra' (una reflexión lúcida sobre la dificultad de enfrentarse a la sociedad de consumo), 'Liquidación total' (un guiño a Weezer en el que participa Lluís Galvalda de Els Pets. Aleix me confiesa con devoción que se sabe de memoria toda la discografía del grupo de Constantí) o la honestidad que desprende 'Muerte por ambición' son buenos ejemplos de ese poder de síntesis. (Aleix) “El reto era incluir todo lo que ha pasado a nivel político y social en España estos últimos dos años, cosas que me atormentan por dentro, y combinarlo con nuestras vivencias personales. Escribir me aligera el tormento, y es algo que me gusta canalizar a través de Cala Vento. No queremos convertirnos en un grupo político de manera explícita rollo Obrint Pas, sino serlo de manera elegante”.

Una de las ideas que sobrevuelan "Balanceo" es “la presencia tan fuerte que los mercados tienen sobre la vida de la gente” y las renuncias que hay que hacer ante ellos para seguir con tu vida. “Ahora decimos que no podemos acabar con el sistema pero habrá un momento en que sí podremos, porque si no nos moriremos todos. Las canciones de 'Balanceo' tienen la voluntad de provocar cosas en la gente, pero también de redimirla de esa lucha. El disco también habla de las consecuencias que supone dedicarte a la música, cuando te das cuenta de que también eres esclavo de un sistema que va haciendo como una máquina”. Aleix y Joan describen esa cruda realidad con esperanza y luz (la energía y ganas de vivir que respiran sus composiciones, llenas de coros y de armonías vocales festivas a dos bandas), nada de regodearse en la mierda. “Cuando tocamos esas canciones es como una redención y se nos pasa todo, una sensación que también queremos transmitir a nuestro interlocutor”, explican.

Cala Vento fueron víctimas del sistema, pero solo perdieron una batalla, no la guerra. El grupo se formó en Barcelona, pero regresaron a su tierra natal, l’Empordà, para resistir y seguir dedicándose a la música. (Joan) “Esto lo aprendí de mi padre: lo más importante es vivir tranquilo y contento. En l’Empordà eso es posible. Estamos en el local desde las diez de la mañana a las ocho de la tarde y a veces solo ensayamos treinta minutos. Estar pendiente de hacer cosas para triunfar no es nuestro rollo”. (Aleix) “No somos ambiciosos, con tener dinero para ir a comprar al súper y poder hacer la carbonara ya está bien”.

Para los fans

Cala Vento es uno de esos grupos que disfruta sobre el escenario. Gracias a ello, Lori Meyers les eligieron personalmente como grupo invitado en su concierto de veinte aniversario en el WiZink Center de Madrid. Pero ahora el dúo catalán ha decidido agradecer a los fans que siguen comprando sus discos precisamente eso, que compren una copia de Balanceo. Lo hacen con una mini-gira de cinco conciertos gratuitos para las primeras personas que se hagan con una copia física del tercer álbum de los de l’Empordà en las tiendas FNAC (Triangle, Barcelona; San Agustín, Valencia; Callao, Madrid; Plaza de España, Zaragoza y Alameda de Urquijo, Bilbao).

El aforo estará limitado en cada uno de los conciertos a 100 personas y las ciudades y salas son:

Barcelona (8 abril, Sala Meteoro), Valencia (9 abril, 16 Toneladas), Madrid (10 abril, Wurlitzer Ballroom), Zaragoza (11 abril, La Lata de Bombillas) y Bilbao (12 abril, La Ribera).