BUSCANDO SU LUGAR
Entrevistas / Jim White

BUSCANDO SU LUGAR

Roger Estrada — 08-05-2001
Fotografía — Archivo

HAN TRANSCURRIDO CASI CUATRO AÑOS DESDE "WRONG-EYED JESUS", EL SORPRENDENTE PRIMER ÁLBUM DE JIM WHITE (CUYO NOMBRE REAL ES MIKE PRATT), ENTRAÑABLE Y MISTERIOSO PERSONAJE CON UNA TORRENCIAL HABILIDAD PARA ENVOLVER AL MÁS CURIOSO DE LOS ENTREVISTADORES CON SU MÁGICA CAPACIDAD PARA DESMENUZAR ANÉCDOTAS DE SU VIDA QUE PARECEN SACADAS DE LA MENTE NARCOLÉPTICA DEL RIVER PHOENIX DE "MI IDAHO PRIVADO".

Si su debut tuvo una repercusión discreta en nuestro país, parece que las cosas están cambiando sustancialmente con "No Such Place" (Luaka Bop/Chewaka, 01), trabajo que ahonda en los ambientes polvorientos y de onírica apariencia que caracterizan la música de un hombre profundamente marcado por su infancia en la comunidad religiosa de Pensacola, al sur de los Estados Unidos. "Allí sólo hay dos maneras de poder expresarse: las drogas y Jesús. Me pasé mi juventud intentando descubrir qué camino elegir; en el mundo de las drogas veía a todo el mundo morir y disparándose entre sí y en el de la religión la gente se volvía loca, con lo que decidí marcharme del pueblo, abandonar todo aquello. En mi primer disco intenté reflejar aquellas experiencias, aquella lucha interior y en los conciertos acudía gente a decirme que se identificaban conmigo, que habían pasado por lo mismo y que también habían encontrado un sendero por el que avanzar en paz consigo mismos". White pasó varios años trabajando como técnico de sonido en pequeñas producciones cinematográficas antes de lanzarse al suicida esfuerzo de dirigir su propia película, conduciendo un taxi catorce horas diarias durante tres años para lograr financiar su ansiado proyecto.

"Ha sido conmovedor encontrarme con esta gente que ha acudido a mí para aportarme sus ideas con la única intención de facilitarme las cosas"

Pero lo único que consiguió fue caer enfermo y estar al borde de la muerte. "Volví a casa, con mi familia, y empecé a escribir canciones como terapia, para sacar todo el sufrimiento por el que estaba pasando. Un viejo amigo de la escuela de cine vino a verme para decirme que quería dos cosas de mí, que me recuperara y que grabara esos temas para que él los pudiera mover en California. La cinta llegó a manos de Melanie Ciccione, manager de Joe Henry y hermana de Madonna, que me dijo que iba a ayudarme a conseguir un contrato. Al cabo de unas semanas estaba sentado en el despacho de David Byrne, escuchando como un artista de su talla me decía lo impresionado que estaba por mi talento y las ganas que tenía de dar a conocer mis canciones. Había estado toda mi vida oyendo como la gente me decía no y todo aquel apoyo y aquellas muestras de gratitud me hicieron sentir mejor; estaba tremendamente emocionado". Pero después del lanzamiento de "Wrong-eyed Jesus" en 1997, White entró en un periodo de crisis, anímico y económico, del que logró salir gracias, nuevamente, al apoyo de Melanie Ciccione, quien logró colar una de sus canciones en una película, lo que ayudó a White a remontar el vuelo. Declarado admirador de Tom Waits (confiesa que "Swordfishandtrombones" cambió su vida), Victoria Williams (su voz brilla en el tema "Angel Land" de su debut), el cine de Jim Jarmusch y Víctor Erice ("El espíritu de la colmena" es su película favorita), White empezó a recibir llamadas de gente que quería ayudarle a grabar su nuevo disco. Así, en "No Such Place" ha contado con la colaboración de Morcheeba, Andrew Hale (productor de Sade), Sohichiro Suzuki (Yellow Magic Orchestra) y Q-Burns (Abstract Message). "Tras el agotador trabajo que supuso el primer disco ha sido conmovedor encontrarme con esta gente que ha acudido a mí para aportarme sus ideas con la única intención de facilitarme las cosas. Hemos avanzado juntos en una misma dirección porque respetan lo que hago y el disco se ha enriquecido indudablemente con sus aportaciones".

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.