En “Immunity” y también en los directos en los que hemos podido verte recientemente (en el LEV Festival y el Sónar), estás mostrando tu faceta más enfocada a los clubs y el baile . ¿Encuentras alguna razón para ello?
En realidad no pienso demasiado sobre este tipo de cuestiones, simplemente me limito a seguir mi instinto. Los temas más bailables se trasladan muy bien al directo y es algo en lo que quiero centrarme ahora. De todas formas creo que lo que he venido haciendo en los últimos meses y también el nuevo disco es una buena combinación entre sonidos bailable y mi faceta más clásica.
He leído que “Immunity” viene a representar aquello que sucedería a lo largo de una noche de fiesta. ¿Es correcto?
Lo hace en términos de estructura porque arranca con la excitación inicial de la noche, continúa con la intensidad y el crescendo que se experimenta a lo largo de la madrugada y terminaría con el amanecer en calma. Pero eso no quiere decir que el disco tenga una temática, sino que cuando me refiero a ello lo hago exclusivamente por la forma en que están dispuestos los temas a lo largo del disco.
¿Y existe algún punto de vista cinematográfico en el disco? Teniendo en cuenta que buena parte de tu producción son bandas sonoras…
No, en realidad no.
Leí unas declaraciones tuyas en las que afirmabas que no tiendes a pensar en nada en particular cuando escribes música y que simplemente sigues el instinto para ver dónde te conduce la melodía. Entiendo que más o menos es lo mismo de lo que estamos hablando ¿no?
Es cierto, no intelectualizo demasiado mi música cuando estoy trabajando en ella. Respecto a eso que comentas, en este disco no hay demasiadas cuerdas, pero en “Insides” la primera línea de melodía me conducía a la segunda, y así progresivamente. Un sonido siempre es lo que permite saber qué viene después. Lo más importante es capturar la fuerza inicial que arranca con una idea, y a partir de ahí voy completando el tema con otros detalles.
Esa fórmula es contraria a tu formación clásica…
Sí, tienes razón. En su momento yo accedí a la música a través del piano, interpretando obras de otros compositores y disfrutaba mucho con ello. Pero al mismo tiempo el mundo de la clásica es muy elitista, terminas haciendo conciertos para círculos muy cerrados y creo que hay algo antinatural en ello y en toda esa falta de libertad que está relacionada con la música clásica.
“Immunity” es el trabajo de todos los que has hechos en el que el beat tiene un mayor protagonismo, lo que en cierto modo creo que tiene mucho que ver con la buena acogida que está teniendo este disco. ¿Cuentas con un similar método de trabajo en lo relativo al ritmo?
Sí, es muy parecido, en esencia me concentro en los primeros acordes y a partir de ahí voy desarrollando. Es cierto que nunca antes me había aproximado al ritmo de la forma en que lo he hecho con este disco, creando ritmos que convierten tanto el proceso compositivo como la escucha en algo mucho más adictivo. De hecho empleé la mayor parte del tiempo en esa cuestión, y aunque resultó una experiencia difícil también fue alucinante. Porque si tienes un tema que dura 10 minutos y no hay demasiados cambios en el beat debes estar seguro de que ese beat es realmente bueno.
¿Está “Immunity” especialmente influido por algún tipo de software o de instrumento musical?
La primera mitad del disco está muy influida por una serie de sintes que he manejado por primera vez y con los que me propuse experimentar. Por ejemplo el tema “Open Eye Signal” lo construí esencialmente con un MS20. “Collider” tiene también un riff de MS20. Ese fue el cambio principal. Al mismo tiempo trabajaba con la versión Mac de Logic en conjunción con un antiguo editor para PC que utilizo vía Parallel.
Me vas a perdonar, pero resulta inevitable preguntarte por tu trabajo junto a Brian Eno aunque él no haya colaborado en este disco. En concreto me interesa saber qué tipo de debates mantienes con él, si se centran en cuestiones técnicas sobre sonido o más bien mantenéis conversaciones de tipo más conceptual.
Es curioso porque yo diría que no hemos tenido ninguna conversación en profundidad sobre música. Desde luego no sobre cuestiones técnicas. Obviamente yo tengo conocimientos técnicos, pero no te creas que soy un obseso de las máquinas. En realidad creo que todo lo que te decía antes de cómo utilizar el instinto para desarrollar las ideas es en realidad una consecuencia de trabajar con Brian Eno: a él le obsesiona que las ideas no lleguen a agotarle.
¿Sería esa la principal enseñanza que te ha transmitido trabajando a su lado?
Sí, esa misma: capturar nuestras ideas rápidamente
Suena como que resulta realmente fácil trabajar con él…
Sí, sorprendentemente sí.
Has trabajado con uno de los padres fundadores de la electrónica y muchos ya te señalamos como uno de los nombres que más tienen que aportar al presente y futuro del género. Con este bagaje, ¿te atreves a vaticinar hacia donde se pueden dirigir los pasos de la música hecha con máquinas?
Es difícil para mí analizar esta cuestión porque yo no soy un dj, alguien que está demasiado al tanto de la actualidad musical. En realidad yo paso la mayor parte de mi tiempo encerrado en el estudio, componiendo y sin prestar demasiada atención a lo que sucede ahí fuera. Obviamente el software ha facilitado mucho el proceso de hacer música y posiblemente lo hará aún más en el futuro, aunque siempre habrá gente que de alguna forma se salte las normas que esas nuevas herramientas de algún modo imponen. E imagino un futuro en el que aparecerán sonidos que hoy ni siquiera imaginamos.
¿Cuál ha sido en tu opinión la mayor innovación en el terreno de la música en la última década?
No lo sé, porque si te soy sincero no sigo demasiado los avances tecnológicos. Creo que no tengo el conocimiento suficiente para responder a eso.
Cuéntame entonces cuáles son los movimientos inmediatos que tienes entre manos.
Lo siguiente es una colaboración que me tiene muy emocionado con Hayden Thorpe de los Wild Beasts. Se trata de un cover de “Goodbye Horses” y es una de las cosas favoritas de cuantas he hecho (en el momento de publicar la entrevista el tema en cuestión ya se ha hecho público. Puedes escucharlo bajo estas líneas). También hay una nueva banda sonora terminada para el filme “How I Live Now” dirigida por un gran director Kevin MacDonald. Y mi intención es pasar el próximo año haciendo el mayor número de shows en directo posibles. Después creo que volveré a trabajar con King Creosote en la continuación de “Diamond Mine”. También estoy trabajando de nuevo con Coldplay en su nuevo material, y posiblemente vuelva a colaborar con Eno en su próximo disco.
¿Diferencias de alguna forma tu carrera musical de las bandas sonoras para películas? Creo que buena parte de culpa del reconocimiento del que disfrutas hoy lo tiene la banda sonora de “Monsters” y no sé si es una faceta que vas a explorar…
Ahora mismo quiero concentrarme en mi material más personal más que en las bandas sonoras. Aunque hay directores con los que me encantaría trabajar, en realidad estoy diciendo que no a la mayor parte de ofertas que me llegan. He pasado muchos años trabajando un poco por encargo para otra gente y no centrándome en mi propio material y a día de hoy quiero que eso cambie…
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