“Wet Will Always Dry” es un trabajo directo, efectivo y adictivo y sobre todo bailable, sin coartadas “intelectuales” ni complejos. Pero al mismo tiempo posee una personalidad sonora incontestable, en la que Jaimie, lejos de acomodarse, continua explorando y adentrándose para descubrir nuevos y sorprendentes recovecos. De esta manera obtiene un bello equilibrio entre la funcionalidad de un disco pensado y hecho para la pista y la obra de autor, ese sello personal que lo hace único e intransferible. Blawan estará actuando en el festival Mugako en Vitoria-Gasteiz este fin de semana y hemos podido charlar con él con motivo del esperado evento.
Uno de los primeros temas que a uno le viene a la mente inevitablemente al hablar de Blawan es su estado de salud. Gracias a una reciente entrevista en The Quietus hemos podido descubrir que sufre una dolencia crónica que le llevó en su momento a dejar a un lado su prometedora carrera como productor y DJ para ingresar en un hospital, y desde aquel momento reorientar su actividad de manera más serena y madura, y tan o aún más excitante. “Siempre y cuando no hablemos de lo que se trata exactamente, y nos centremos en la manera en la que afecta a mi carrera, no tengo problema en hablar de mi salud” me señala al inicio de la entrevista, y obviamente, lo vamos a respetar.
¿Qué tal te sientes últimamente?
Bien, pero es una dolencia continua y cuando me ataca, todo sucede muy deprisa. Un día puedo sentirme perfectamente y al siguiente estar hecho polvo. Por desgracia debo ir al hospital a recibir tratamiento en un par de semanas. Es crónico e incurable. Pero bueno, si me las he arreglado para llegar hasta aquí, ¿por qué no voy a seguir haciéndolo? Ja ja
Claro que sí. Me alegro mucho de oírte decir eso. No vamos a entrar en más detalles de tu enfermedad pero sí que hay un aspecto clave en tu recuperación que no puedo pasar por alto y me gustaría mucho comentar. Se trata del importante papel de Anthony Child aka Surgeon, en todo el proceso y de la estrecha relación que mantenéis.
Nos conocemos desde 2011 aproximadamente. El me comentó entonces que le gustaba mi música y empecé a enviarle cosas en las que estaba trabajando, y una cosa llevo a la otra. Nuestros agentes hablaron entre ellos para planear algunas posibles sesiones juntos y funcionó de maravilla. Así que terminamos haciendo un montón de shows. Pero tras cierto tiempo, Anthony notó que algo no iba bien conmigo. Le conté mis problemas de salud con toda sinceridad e inmediatamente se puso manos a la obra para tratar de ayudarme. Está muy metido en el mundo del yoga, no tanto a un nivel religioso o espiritual, sino de simple y llana sanación física. Así que, en cierto modo, se encomendó a si mismo la misión de mostrarme las capacidades curativas del yoga y empecé a ir a su casa regularmente a recibir mis “lecciones”, durante cerca de dos años. Fue en ese momento cuando grabamos nuestro disco en colaboración y al poco de ello sufrí una crisis aguda y tuve que ser hospitalizado durante una buena temporada. Pero fui capaz de recuperarme y estaré eternamente agradecido a Anthony por toda la energía que invirtió en mi propio bienestar físico y mental. ¡Es una gran persona!
Además de ello, Anthony me he influenciado enormemente en lo musical. Tanto durante ese periodo de colaboración como antes de conocernos. He sido fan suyo desde mi adolescencia realmente.
En esa misma entrevista en The Quietus me pareció muy interesante lo que se decía sobre el dilema que se les presenta a muchos productores a la hora de enfrentarse al formato largo y la tentación de publicar algo “serio”, “profundo” y “artístico”, que termina siendo desgraciadamente en muchos casos, un verdadero aburrimiento. Esto es algo que no ocurre en absoluto en “Wet Will Always Dry”. Parece sencillo y suena sencillo, pero estoy seguro que no lo es en absoluto. ¿Cuál era tu idea cuando empezaste a trabajar en el disco? ¿Tenías un objetivo concreto?
“Wet…” es, ante todo, una exploración de mi propio sonido. Quería que fuera una especie de declaración de lo que ha sido mi carrera hasta ahora. No me parecía correcto tratar de ser otro en mi primer álbum. Me parecía una falta de respeto con lo que he hecho en el pasado, como si dijera que no es música digna de figurar en álbum. Cree la música para el álbum de la misma manera que la hubiera hecho para un EP. Quería ser honesto conmigo mismo y decir: “Este soy yo. Esta es mi música”.
¿Estás contento con el resultado?
Sí. Puedo decir que estoy contento con el resultado. Era algo que francamente me preocupaba. Al fin y al cabo se trataba de mi primer LP, algo que jamás había hecho. Afortunadamente mucha gente me ha dicho que mi planteamiento tenía todo el sentido y eso me ha animado mucho. Al mismo tiempo, estoy satisfecho porque ha habido nuevas cosas que he podido probar en algunos de los tracks, sin dejar de usar el mismo setup para toda la grabación. Me he dado cuenta de que no hay un punto final para este sonido. Hay todavía muchos recovecos que puedo explorar en él. Así que lo que verdaderamente es estupendo es que el disco suena a mí al tempo que tiene cosas nuevas que nunca había intentado. Es un bello equilibrio.
De alguna manera empeñados en pensar que un álbum debe tener un cierto “concepto” y “significado artístico” tendemos a rechazar la idea de que pueda ser simplemente una colección de tracks, elaborados con tanto o mayor mimo artesano, y el mismo cuidado y amor por el puro sonido y ritmo. Esta sensación de placer en la creación y la escucha del sonido en sí creo que es esencial en tu actitud como artista. ¿Estás de acuerdo?
Totalmente de acuerdo. Yo también lo veo así. Para mucha gente los temas de club bailables no son dignos de incluirse en un LP. Piensan exclusivamente en la persona que lo va a escuchar en casa, sólo y a través probablemente de unos cascos. Pero un verdadero track de techno está pensado para un grupo grande de gente en una pista de baile. Llama a la experiencia colectiva. No entiendo porque la gente piensa que eso tiene un valor artístico menor que un track más abstracto.
"Un verdadero track de techno está pensado para un grupo grande de gente en una pista de baile. Llama a la experiencia colectiva"
Al fin y al cabo, un artista es básicamente una colección de decisiones personales y de limitaciones técnicas, nada más (y nada menos) que lo hacen único e inimitable. Y en este sentido quería preguntarte por tu propia voz, que aunque no figura en los créditos, hemos sabido después que forma parte del sonido del disco. ¿Vas a cantar en tus actuaciones en directo?
Bueno, en realidad he usado mi voz en un par de ocasiones antes de grabar este disco, pero nunca se lo había dicho a nadie. Hoy en día puedes crear voces en tu ordenador sin problema pero usar tu propia voz siempre lo hace más personal.
En directo no canto nunca, uso loops con grabaciones de mi voz. Llegué a “cantar” un poco en directo con Karenn (proyecto a dúo con Pariah) pero esa voz luego estaba muy procesada. No soy un cantante absoluto. Bueno de hecho, tampoco soy un teclista.
Pero haces una música estupenda que es lo que importa. Y aprovechando este comentario, sabemos que amas los sintetizadores modulares y que posees un enorme arsenal de hardware para mezclas, ecualizadores, compresores, etc. que han hecho posible el particular y fascinante sonido de “Wet Will Always Dry”. ¿Te importaría compartir con nosotros cuáles son concretamente los equipos que más has usado?
No claro que no. He usado por un lado, el módulo de filtrado QMMF, y por otro, el módulo de mezclas Theirmonic culture fat bustard. Ambos están en todo lo que he grabado en los últimos 5 años. Tengo un montón de dispositivos pero estos dos son los imprescindibles y más usados.
Vuelvo por un momento al concepto del “álbum techno” y al menosprecio por los tracks más bailables y “funcionales”, con una cita de William S Burroughs, que aunque de entrada parece algo alejadísimo del mundo del techno, que me gustaría compartir contigo porque creo que se ajusta perfectamente a tu música: “No debemos olvidar que toda forma de arte –música, escultura, literatura, pintura- es mágica en su origen. Y por mágica quiero decir que tiene intención de producir unos resultados concretos. Las pinturas fueron en su origen una herramienta para hacer que lo que se dibujaba se hiciera realidad. El arte no es un fin en sí. Como todas las herramientas, el arte es funcional en su origen, concebido para hacer que sucedan cosas”. Cuando la lees todo cobra sentido, empiezas a ver el techno como una herramienta para crear esa magia, y experimentarla y compartirla con una audiencia, y no puede haber nada más grande que eso.
Es una cita fantástica. Totalmente de acuerdo con ella, es imposible expresarlo mejor. Tener a un montón de gente disfrutando de manera colectiva me parece más valioso que satisfacer a un sólo oyente.
¿Qué tal te estás sintiendo en tus últimos sets?
Muy bien. Ha sido un gran año. Han pasado muchas cosas interesantes. He tenido varias sesiones estupendas pero donde más he disfrutado ha sido en el festival Draimoleen en Tillburg, en los Países Bajos.
Es todo tan hermoso allí. Hacen un gran esfuerzo de organización y el cartel es estupendo. Crean un entorno muy especial. Se desarrolla en medio de un bosque y ponen luces a través de las hojas de los árboles, generando toda una serie de tonalidades preciosas. Todo está pensado para proporcionar una experiencia única a los asistentes. Es el tipo de festival al que yo mismo iría como público. Además, no es muy grande, sólo cerca de 1000 asistentes. Lo cierto, es que pienso que hay demasiados festivales en el mundo, nos estamos volviendo un poco locos con esto.
Tu actuación en MUGAKO llegará inmediatamente después de la de UNSOUND en Polonia. Allí comentabas que harías “una especie de” reproducción del disco. ¿Qué significa exactamente esa “especie de”? Y ¿qué podemos esperar en MUGAKO?
El setup será muy similar. Evolucionará en base a un sintetizador. Básicamente lo que hago es traer el mismo equipo que usé para hacer el álbum y emular las mismas condiciones del estudio, de manera que el sonido sea reconocido inmediatamente por la audiencia. Pero al mismo tiempo, me costó muchísimo trabajo generar los tracks del álbum y sería imposible reproducirlos tal cual en directo. Recrear el sonido y el timbre es relativamente fácil pero construir los tracks no lo es tanto. Así que será un set improvisado en un 50% más menos.
Digamos que improvisaras nuevas formas basadas en el mismo material.
Eso es. Vengo de una perspectiva de DJ donde tienes que centrarte en lo que el público te pide, la manera en la que reacciona e interactúa contigo. Si lo llevas todo preparado de antemano, no hay movimiento. Necesito espacio para llevar al público donde yo quiero y para que el público me lleve a su vez a donde quiera. Por cierto, he leído comentarios muy positivos sobre el ambiente de MUGAKO y tengo muchas ganas de actuar (e interactuar) ahí.
¿Puedes contarnos brevemente cuáles son tus proyectos a día de hoy tus planes a corto plazo?
Estoy acabando un nuevo EP para Ternesc, mi propio sello. Es un disco de 6 temas de Karenn. También estoy en otro proyecto con dos artistas italianos (Alberto Mancini y Domenico Cipirani), se llama Parasella y vamos a publicar nuestro quinto disco juntos en un sello llamado Restoration Records. Saldrá en un par de semanas. Es techno improvisado principalmente. Estas son cosas que definitivamente van a pasar, y luego hay otras en trabajo de las que puedo hablar aún.
¿Qué te parece el lineup de MUGAKO? ¿Hay algo que te apetezca ver particularmente?
Bueno, Avalon Emerson seguro, Steve Rutter y espera... ¡Mick Harris! ¡Es mi número 1! Es la tercera vez que le veo en directo y esta vez pienso asegurarme que le conozco en persona. Es uno de mis héroes personales junto a Regis o Surgeon. Pero lo cierto es que hay un montón de artistas interesantes en el cartel: Morphology, Skee Mask...
Y ya para terminar, ¿Alguna recomendación entre tus últimos descubrimientos?
Definitivamente Sedvs del sello austriaco Bare Hands. Hace una música techno maravillosa. Lleva tiempo haciéndolo pero es en este último año cuando ha alcanzado ese sonido realmente personal. Sí, si tuviera que citar un nombre, sería ese.
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