Mi larga charla con Joan Garriga está a punto de finalizar cuando el autor de canciones incontestables como “Volant” o “Flor de Primavera” me regala una perlita a modo de declaración de intenciones: “El Kung-Fú es el compás, el ritmo vital, la respiración, y nosotros igual ahora hemos conseguido el cinturón verde. El propósito es grande, el anhelo también, y el reto además es muy alto, eso quiere decir que todavía nos queda mucho trabajo por hacer”. Todo esto viene a cuento a que nos hemos pasado una gran parte de nuestro encuentro, analizando el porqué La Troba Kung-Fú no ha alcanzado la misma cuota de popularidad que bandas más jóvenes sí han logrado. El tema está claro que me interesa más a mi como periodista que a Joan como autor, pero la injusticia se me antoja tan grande que no puedo reprimir el ponerlo sobre la mesa, aunque al final todo se resuma en un... “Toda esta comida de tarro que hemos tenido con lo del público, con el hecho de si llegas o no llegas, no tiene ningún tipo de importancia. En realidad es humo. A la hora de hacer una canción todo eso no tiene ninguna importancia y cuando la ha tenido, aunque sea mínimamente, es un mal camino y este disco no tiene nada que ver con todo esto”.
Un tercer álbum que ya desde su título, “Santalegria”, es una declaración de intenciones que incita al baile, a pasarlo bien y dejarse las penas en el perchero, por eso suena más homogéneo, como una unidad que engrandece el estilo de la banda que lo ha creado: “Al igual que el anterior era un intento por ser más urbano y cosmopolita, este es totalmente lo contrario. Es un disco más comarcal, está casi todo en catalán, en los arreglos hemos ido a buscar más una pachanga que nosotros hemos denominado “rumbia”. Antes intentábamos huir de etiquetas, pero nos hemos dado cuenta que hay un estilo definido, hay un hilo conductor entre toda la música que se hace desde los alrededores de Barcelona y que no es urbana y que nosotros denominamos rumbia, rumbia vallesana”.
Un trabajo hecho de cabo a rabo en su cuartel general, La Fournier y que ha huido de la grandilocuencia del arreglo para sustentar la canción y además posee una vertiente satírica, incluso humorística que casi podríamos catalogar de inédita: “Esta vertiente que comentas estaba en Dusminguet, pero con La Troba no lo había tocado todavía porque había una intención más de autor en las letras. Además con este disco hemos alcanzado un mayor ritmo de creación, ahora tenemos más oficio”.
Recuerdo que cuando te entrevisté con motivo del disco anterior, me comentaste que era un trabajo muy influenciado por el viaje y por el hecho de haber vivido en Nueva York una temporada. ¿Está también este nuevo disco influido por algo en concreto?
Al igual que el anterior era un intento por ser más urbano y cosmopolita, este es totalmente lo contrario. Es un disco más comarcal. Está casi todo en catalán, en los arreglos hemos ido a buscar una pachanga que nosotros hemos denominado “rumbia”. Antes intentábamos huir de etiquetas, pero nos hemos dado cuenta que hay un estilo definido, hay un hilo conductor entre toda la música que se hace desde los alrededores de Barcelona y que no es urbana y que nosotros denominamos rumbia, rumbia vallesana. Explicado de forma sencilla podría parece una mezcla entre rumba y cumbia, pero esta mezcla es algo que en cierta medida ya se adivina en muchos grupos anteriores y en un género “pachangero” presente desde La Orquesta Platería al Gato Pérez y en un montón de grupos y no deja de ser ese gusto por las fiestas populares en las que cabe de todo.
De hecho es un disco mucho más festivo, con temas en los que esta intención se ve muy clara como “A ballar”, un tema en el que incluso dices; si no bailas qué hago yo aquí”
Si, sí, en este sentido hay una intención muy clara de explicar más que nunca nuestro estilo y defenderlo
¿Eso ha provocado que el acordeón esté mucho más presente y que la guitarra haya quedado más en un segundo plano?
Hay mucho más acompañamiento, por decirlo así. Están los colores, pero las canciones están más trabajadas como cancioncillas sencillas de tres minutos que acaban sin grandes espacios instrumentales. En los discos anteriores había mucha más producción y los temas estaban construidos en base al proceso de grabación y, en cambio, en este las canciones estaban claras antes de entrar a grabar y la base de batería, voz y acordeón la grabamos del tirón de todas y luego el resto lo hemos añadido.
Vaya que por lo que veo hay una especie de ganas de reivindicar la música festiva y la verbena que siempre ha estado como en un segundo plano ¿no?
Ya no es ninguna reivindicación de la verbena. Igual cuando empezamos con Dusminguet si que había un punto de reivindicación, pero ahora ya no. Queda muy claro que lo que hacemos es música festiva para bailar y la verdad es algo que está superado y para bien. Además cuando hablamos de este género es bonito ver como surgen grupos como setas que tienen esa atmósfera festiva. Eso hace unos años era improbable porque estaba como mal visto.
Me ha parecido que esa atmósfera más festiva también ha contagiado a las letras y que las hay bastante más divertidas como “La prima de riesgo” . ¿Son ganas de aplicar esa máxima que dice al mal tiempo buena cara?
Esta vertiente más divertida en las letras que comentas sí estaba en Dusminguet, pero con La Troba todavía no lo habíamos explotado, posiblemente porque ha habido un componente más de autor en las letras. Pero en este disco sí hay canciones más divertidas, no he querido comerme tanto la olla.
Pero ¿te ha surgido así o ha sido algo intencionado marcado por el tono del álbum?
Ha surgido así. Lo que ha marcado ha sido el ritmo de creación del disco que ha sido como una vomitada. Piensa que en el disco anterior había solo nueve canciones y dejamos mucho material fuera, y además hubo bastante más comida de olla. En cambio en este ha sido todo más ¿porque no?. Todo ha venido más marcado por el ritmo que te da la experiencia, el oficio, y que siempre habíamos querido lograr. En este sentido creo que ha habido una paso adelante importante. Luego podrá resultar más o menos, pero el hecho de lograr este ritmo de creación para nosotros ha sido muy importante.
Lo malo es que igual lo que ha quedado un poco relegado a un segundo plano ha sido la vertiente más intima de tu música y tus letras,. Esa parte más delicada que yo casi diría que ha quedado reducida a “La pregària”
Yo no lo creo. Lo que pasa es que con la producción que hemos hecho igual resalta mucho la rítmica y parece que vayamos hacia otro lado, pero las letras son igual o puede que incluso más íntimas que los otros discos. No sé, una letra como la del “Pot ser” es super delicada, lo que pasa es que como es un reggae bastante contundente puede pasar que no lo parezca, o la balada bandolera también es muy delicada. Lo que sí es cierto es que después, cuando vas produciendo el disco y añadiendo música y empaque, puede pasar que enmascare algo y no lo parezca tras una primera escucha. “El juglar” también es muy delicada, lo que pasa es que como tiene esa rítmica y un coro muy evidente... Vaya que yo no tengo esa impresión. Sucede que hemos jugado a utilizar una carcasa de baile, pero con un mensaje bastante bluesero”...
Supongo que la elección del título del disco “Santalegría” tenía la intención de darle un sentido a todo lo que estamos hablando...
“Santalegria” puede tener un punto irreverente al ponerle “santa” a una cosa que no lo es, pero todos lo encontramos muy bonito. En el fondo es querer santificar las cosas que realmente son importantes y la alegría es una chispa, un motor imprescindible para vivir, y también es una decisión. Es lo que nos da curiosidad, ganas de conocer, crecer, viajar, ganas de vivir en definitiva, porque la vida es un misterio y la alegría es una gran compañera, así que mejor que no falte. Y hay pequeñas cosas que nos la da, y la fiesta es una de ella. Por eso reivindicamos la fiesta, porque la alegría está presente en ella y es una forma de darle la vuelta a las cosas que día a día te machacan. En una sociedad donde todo está tan machacado para que consumas, para que seas eternamente joven, en una sociedad así estamos abocados al fracaso y la infelicidad, por eso la alegría es fundamental, y por eso también la fiesta cambia cosas y es importante desde el punto de vista antropológico.
Pues ya que hablamos de la alegría, me gustaría saber ¿cómo estáis? ¿en qué estado estáis tú y la banda?
Estamos bien, aprendiendo a carburar de forma diferente para adaptarnos a los tiempos que corren e intentando aligerar algo el peso de las cosas que llevamos encima para poder crear con más facilidad y estar más contentos. Hay cosas que nos cuestas y otras que hemos mejorado. En general bien. Es verdad que este disco nos hubiera gustado hacerlo más rápido, pero vamos más lentos porque no sabemos más y porque hemos tomado decisiones que han hecho que vayamos más lentos como el hecho de hacerlo todo aquí (NdR.- se refiere a La Fournier), pero en general el disco ha sido un ejercicio de alegría, aunque cuesta. Cuesta porque somos una banda muy grande , nos hemos hecho grandes todos también y es complicado porque tal y como está el panorama, nos da la sensación de que hemos de currar mucho para mantener la barca a flote. Pero este disco, a diferencia del anterior, no ha sido nada traumático. En el otro logramos una super producción, hicimos un muy buen trabajo, pero a la vez se nos hizo muy pesado, económicamente, creativamente, se nos fundieron los plomos y eso a la gente también le llega. Y bueno no sabemos como funcionará, pero de momento estamos contentos, ha sido como una vomitada , pero a la vez ligera
Es el disco más casero...
Sí, si, hemos llegado a un momento en el que hacemos lo que queremos hacer y tampoco hay muchas pretensiones de ver a donde llega sino que la pretensión es más de equilibrar el ritmo que nosotros podemos llevar con la máxima autosuficiencia posible, y en base a eso estamos poniendo a punto el motor. Pretendemos defender la banda en directo durante este verano, sorprendentemente tenemos bastantes bolos cerrados en toda Cataluña, cosa que el año pasado no, es decir , el verano lo pasaremos bien, trabajaremos mucho, puede que incluso demasiado, pero se debe hacer y a partir de septiembre, octubre ya veremos, porque en invierno una banda tan grande se vuelve imposible de mover, no movemos a tanta gente como para poderlo defender.
¿Le encuentras una explicación a esto que me comentas de que este veranos tendréis mucho trabajo y sin embargo el año pasado no?
Yo no, no se la encuentro. Eso te lo deberían contestar los que montan los conciertos
Porque por ejemplo el hecho de que grupos como Txarango o La Pegatina funcionen tan bien ¿os ayuda?
El hecho de que ahora haya muchos más grupos que hace diez años que sean capaces de mezclar me parece fantástico. Son una generación que ha crecido escuchando a una serie de grupos y nos lo dicen, que han escuchado mucho a Dusminguet, que les gusta La Troba y eso te hace sentir bien, piensas que has hecho un buen trabajo. ¡Ah! ¿nos ayuda de cara al trabajo?. No sé, yo veo que no somos tan populares como ellos, al igual es porque no hacemos tan buenas canciones o que estas no llegan tanto a la gente, pero la verdad no sé que decirte, es una cosa que simplemente no me la planteo...
Ya sé que me vas a utilizar la respuesta políticamente correcta, pero yo sí puedo decir sin tapujos que me da cierta rabia que La Troba no haya logrado el nivel de popularidad que merece y que luego hayan llegado grupos más jóvenes que en cierta medida se han aprovechado de lo sembrado... Me da cierta rabia porque me parece que vuestra propuesta al ser más genuina y tener una mayor personalidad, no conecta de la misma forma con el gran público.
Pero esto que me dices es posible que sea un gran error, porque también lo podemos plantear como una gran virtud de estos grupos de los que estamos hablando. Yo me lo miro así y además me he relajado mucho con este tema. Porque llega un momento en el que te planteas: yo ¿quiero hacer una canción así o no la quiero hacer?. No, yo la hago como la hago y eso tiene sus consecuencias. No puedes pensar que el mundo está equivocado. Y, en este sentido, con este disco estoy muy contento. Piensa que en el disco anterior hay una producción muy contundente y en el primero también, hay una serie de canciones que están muy trabajadas y creo, desde mi punto de vista, que son discos que los pones en según qué circuitos y aquello funciona porque hay un trabajo muy bien hecho detrás, pero una cosa es eso y otra es la gente y como le llegan las canciones a la gente. Y eso es ya otra película y no pasa nada....
Pero se te ha escapado el que ahora te lo tomas de forma diferente, eso quiere decir que antes sí te afectaba. ¿no?
No, no. Me refería a que a veces haces un sobre esfuerzo innecesario, y nosotros nos hemos equivocado al querer llegar a según qué sitios a nivel de producción, por ejemplo. Nos hemos equivocado al querer que tuviera un sonido para llegar a las radios y luego resulta que en las radios no ha sonado... Hay una serie de parámetros que se te escapan mucho y después te has de quedar con lo que haces... Claro que el porqué llegas a más o menos gente, creo que la respuesta está en las canciones, que llegan o no llegan, no hay que darle más vueltas, que no pasa nada... Y también a la gente hay que ir a buscarla mucho, y esa es una parte del trabajo que nos supera, no estamos 24 horas colgados de facebook...
(NdR.- La charla sobre los diversos caminos, vericuetos y circunstancias que llevan a que algo se convierta en popular y masivo se alarga hasta que volvemos de nuevo a su último disco)
Este trabajo me resulta como el más apegado a la tradición y a la vez el más unitario, el menos diverso ¿no?
Sí, ha habido un esfuerzo de no liarnos demasiado con los patrones, de ir al tajo, que ya hemos investigado mucho para llegar aquí. No pasa nada si todo el disco va con la misma rítmica de arriba a abajo. Ya haremos otro disco con otro estilo, pero no hemos pretendido hacer un disco en el que haya cuatro estilos distintos.
Igual el hecho de que sea más unitario hace que llegue a más gente ¿no?
No lo sé, igual sí... Es el más casero y hay como una especie de intención de vuelta a los orígenes...
Por mi parte ya está, tengo material suficiente para cinco entrevistas, no sé si quieres añadir algo a todo lo hablado.
Sí, que toda esta comida de tarro que hemos tenido con lo del público, con el hecho de si llegas o no llegas, no tiene ningún tipo de importancia. En realidad es humo. A la hora de hacer una canción, todo eso no tiene ningún tipo de importancia para mi. Y cuando la ha tenido, aunque sea mínimamente, es un mal camino. Y este disco está hecho con una actitud que no tienen nada que ver con todo esto... y por eso lo hemos acabado haciendo, por eso hay tantas canciones.
Es una especie de reacción a todo lo que ha sucedido hasta ahora...
Un poco sí . A veces sí. Mira hay una parte, por ejemplo con el tema de la rumba, todo el día justificándote por el hecho de hacer rumba y después empiezan a aparecer grupos de rumba por todas partes y dices, sí, sí, hago rumba, pero claro, no es bien, bien eso y al final... Estoy hasta los cojones de que la Troba sea considerado un grupo rumbero, sí que hace rumba, pero... ¿sabes?. Luego está lo de: grupo de fiesta, grupo de fiesta, bueno vale, pero queremos hacer bailar y también hay una reivindicación del “agarro”, pero también nos gusta el rock’n roll y hacemos letras, pero es igual. Es aquello de que constantemente hay una necesidad de quererte encasillar en un rollo para poder vender la moto, y en este disco la moto ya la vendemos nosotros. De hecho hay todo un texto explicativo sobre el tema, hay un trabajo científico al respecto y estamos super tranquilos. Si llega o no llega, ya es otro tema, pero estamos muy tranquilos y es lo mejor. Nos ha costado mucho hasta ahora.
Vaya que por lo que comentas ahora os encontráis en el mejor momento. No os habéis comido la olla, no os habéis complicado la vida con el disco, no habéis ido a buscar una super producción como habíais hecho antes...
Es mejor sí, es mejor. Siempre hemos tenido la sensación de que estábamos currando mucho y ahora sacaremos el disco en junio que no es lo mejor desde el punto de vista de la promoción.. Aunque no tenemos muchas ganas de hacer mucha promo, Ganas de hacer entrevistas charlando como en este caso, sí, pero ir a la típica radio y de repente encontrarte con que te vuelven a decir aquello de: bueno, y vosotros hacéis rumba ¿no? Y sois muy divertidos ¿no?. Y tú estás allí y dices, me voy. Me voy , que ya he pasado por aquí ¿sabes?. Y ahora me he de parar a pensar que la entrevistadora esta no ha escuchado nunca el grupo, que no le interesa, y yo ¿tengo que hacer esto porque es muy importante la radio y la está escuchando mucha gente?... ¿Ahora he de ser el rumbero de la ostia super simpático?. Pues no lo soy. Que traigan al Peret o que traigan a otro. Es entrar en un juego que ya lo hemos sufrido, por defecto nuestro pero ahora no estoy dispuesto a entrar.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.