Después del bochorno que supuso “Michael” era difícil mantener esperanzas sobre futuros trabajos póstumos del artista. Pero “Xscape” sí vale la pena, y se revela como el disco que “Michael” debería haber sido. Claro que Jackson, perfeccionista y meticuloso, nunca hubiera aceptado hacer públicos los temas aquí incluidos en su forma de esbozo, pero es precisamente la aparición de las versiones originales el gran acierto de este nuevo lanzamiento. El trabajo de “modernización” de Timbaland y compañía resulta tramposo e irrelevante, y son las formas primigenias de “Love Never Felt So Good” (originaria de 1983), “A Place With No Name” (una re-interpretación del clásico “A Horse With No Name”) o “Slave To The Rhythm” (de las sesiones de “Dangerous”), entre otras, las que forman un crudo trabajo de r&b imaginativo y clarividente, digno complemento del legado intocable del artista.
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