A nadie se le escapa que los actuales Wilco, aun siendo una banda del todo respetable, hace tiempo que lucen lejos de su mejor versión de estudio, concretado este techo en álbumes con certificado de clásicos del tipo de “Summerteeth” (Warner Bros., 99) o “Yankee Hotel Foxtrot” (Nonesuch, 02). Los de Chicago han dejado, en los últimos años, títulos como “Star Wars” (Anti-, 15) o “Ode To Joy” (dBpm, 19), tan aceptables como por momentos densos, en los que procede rascar con esmero para localizar las gemas de cada lote en cuestión.
Quizá por eso el presente EP –complemento de “Cousin” (dBpm, 23)– se disfruta exponencialmente, al ofertar un reencuentro conciso, plural y bien rodado con el grupo de Jeff Tweedy y compañía. Un regalo de seis canciones que ganan en agilidad con respecto al mencionado elepé, dejando una grata impresión concretada en menos de veinte minutos. “Hot Sun Cool Shroud” se abre con “Hot Sun”, una pieza de corte indie que podrían haber firmado Luna o Yo La Tengo que antecede a la instrumental (y visceral) “Livid”, acelerando el pulso durante sus setenta segundos.
Por su parte, “Ice Cream” es una pieza con la inconfundible impronta de Wilco: una canción preciosa de ritmo pausado y matizada por la voz de Tweedy; “Annihilation” es otro (inspirado) corte con el trazo habitual de la banda, en este caso de esos en los que las guitarras se cruzan con un protagonismo inesquivable. “Inside The Bell Bones” es otra instrumental, en este caso prescindible y que ejerce de preámbulo antes de que la bonita (y lennoniana) “Say You Love Me” eche el cierre.
Un jugoso EP, en definitiva, que parece destinado a convertirse en obligado (y pequeño placer) dentro de la ya generosa discografía de Wilco. Desde luego, para aquellos más fanáticos y completistas del combo norteamericano, pero, en realidad, también para cualquier aficionado al grupo. No en vano, la referencia raya a buen nivel y se distribuye entre curiosidades y, directamente, algunas joyas compositivas. Unas y otras, sitas al amparo de un formato que, a estas alturas y a la espera de que lo que traiga el futuro, les favorece.
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